El amigo Rubén, frecuentador de nuestro café, ha tenido la amabilidad de pedir al Congreso los datos oficiales del resultado del referendum constitucional. Me los ha remitido por mail con el consejo de que echemos una mirada a las "provincias vascas".
Gracias mil, Rubén,
Gracias mil, Rubén,
Hará cosa de un año, en el programa de los lunes noche del C33 de Televisió de Catalunya Àgora, en el que participaba Arcadi Espada, salió este tema.
ResponderEliminarTODOS los de la mesa creían que la Constitución había salido que no en las provincias vascas. Arcadi dijo lo contrario, no le creían, así que pidió a la redacción que lo investigasen, y tuvieron que darle la razón.
El director del programa era en esos momentos el jefe de informativos de la casa.
También estaba el sociólogo vasco Javier Elzo, catedrático en Deusto.
Se me quedó grabado en la memoria.
Tal es el periodismo "profesional", tan preparado y que se cree las mentiras nacionalistas, haciéndolas propias.
Por cierto, el gráfico con los resultados por autonomías (no existían, evidentemente), lo publiqué el 4 de enero del 2005, sabedor que muy pocos conocían los resultados.
A los pocos días, desaparecieron los resultados en la página universitaria eleweb.net. Acabo de comprobar que han dejado vencer el dominio.
http://maty.galeon.com/articulos_varios/maty_extrema_derecha_eso_dicen.htm
Pues eso, son unos mentirosos compulsivos, emulando a los regímenes totalitarios, repitiendo una y otra vez las mentiras para hacerlas pasar por la verdad.
Pero no cuentan que ahora existe internet, y se les puede dejar en evidencia par siempre, gracias a los buscadores (que tienen bien en cuenta mi bitácora).
Maty: Más de una vez he optado por callar ante gente más vehemente que yo, dispuestos a jurar y rejurar que, evidentemente, Euskadi había rechazado la constitución.
ResponderEliminarLos mitos son indestructibles.
La pregunta es qué salió; algunos piensan que salió que sí.
ResponderEliminarComo otros piensan que no hay ningún problema si en un pueblo, pongamos que Lizartza, haya una alcaldesa, pongamos que del PP, con tan solo 27 de los 355 electores. Sin duda ganó las elecciones.
Y es que mira que son malos los vascos que no leen a Savater.
ah! por cierto, la web del gobierno vasco y la del ministerio del interior también tiene todos los resultados, desglosados.
RMF: ¿Por qué será que en política no hay nada más discutido que los datos?
ResponderEliminardiría que es difícil discutir los datos (siempre que se conozcan, claro está). Otra cosa es discutir su traducción en palabras, que en el caso vasco puede ser más de una, y muy legítimas todas, cosa que muchos quieren ignorar.
ResponderEliminarEsa me la sé: porque la mayoría de quienes se dedican a ella son "de letras" :P.
ResponderEliminarEn mis secciones hay estos lemas en el código de las páginas desde hace unos años:
"Pensar con libertad es una cosa buena. Pero pensar bien es algo mejor (Thomas Thorild). Los hechos son sagrados, la opinión es libre (Hubert Beuve-Méry, Charles A. Dana, CP Scott). Primero son las personas (maty)."
Si todos nos lo aplicásemos a la hora de bitacorear/escribir en los periódicos/hablar en público... nos irían mejor las cosas.
PREGUNTA: si se buscan tales lemas en Google, ¿qué página aparece primero? En cambio, casi nadie me reseña en la blogosfera hispana. Va a resultar que un robot es más justo e imparcial que el conjunto de bitacoreros.
Parece que hubiésemos votado y aprobado la Torá, cuyas letras se pueden recombinar eternamente, pero que son inmutables.
ResponderEliminarDigamos que -en un país que no había roto con el régimen dictatorial anterior y que sólo emprendió una reforma- se aprobó un instrumento que en un cierto momento una mayoría de ciudadanos consideró válido (y que probablemente urgía tener, vista la alternativa) y ahí se acaba tanto misticismo e integrismo constitucionalista.
Observo, por cierto, una corriente, que en España encabeza el arriba mencionado Espada y acólitos como maty, de presunto culto sacerdotal a "la verdad" y a "los hechos". (Los hechos son sagrados" y etc.). Aunque supongo que es una reacción a los excesos de la posmodernidad, tiene algo de pose de orgullo herido, de escaso sentido del humor, de altivez destemplada y de proselitismo que hace que me caiga rematadamente mal.
ResponderEliminarY lo peor es que por ese sembrado pasaron en su día Gödel y Wittgenstein.
Además, RMF nos hace una de sus siempre agudas observaciones "diría que es difícil discutir los datos (siempre que se conozcan, claro está). Otra cosa es discutir su traducción en palabras."
Ah, y Alexandre y Fransmestier son el mismo hombre o homínido. Sólo que empieza a confundir su nombre y su correo...
ResponderEliminar@ Alexandre
ResponderEliminarTe equivocas, bebo en otras fuentes: en las del Método Científico. En la medida de lo posible, intento aplicar esa metodología y rigor.
A partir de los datos, de la experimentación, se elaboran hipótesis, teorías y leyes.
En cambio, "los de letras" suelen operare a la inversa, establecen su ley y buscan datos que la corroboren, ahí radica su error mayúsculo, que suele llevar al sectarismo ciego, al negar la realidad.
Por eso, quien manipule los datos, sean cuales sean, debe ser denunciado y señalado públicamente.
Allá cada uno con su interpretación, pero ha de sustentarse en verdades y no en falsedades.
RMF:
ResponderEliminar1) "Diría que es difícil discutir los datos (siempre que se conozcan, claro está)": Lo que ocurre es que el criterio que concede relevancia a un dato sobre otro no se encuentra en el mismo dato, sino en una escala de valoración desde la cual el dato es o no significativo. Yo dudo -y cada vez más- que haya datos puros y neutrales, es decir, que la diferencia entre hechos y valores sea tan clara como pretendía Weber.
2) "... que en el caso vasco puede ser más de una, y muy legítimas todas, cosa que muchos quieren ignorar". Aquí tampoco estamos de acuerdo, R. Para considerar todas las opciones igualmente legítimas deberíamos carecer de convicciones sobre lo bueno y lo malo. Pero es precisamente esto, nuestra diferente -u opuesta- consideración de lo bueno y lo malo lo que nos enfrenta, en el caso vasco y en cualquier otro. Por eso o el criterio común es la legalidad ("de la legalidad a la legalidad pasando por la legalidad" decía don Torcuato Fernández Miranda) o como cada uno se ponga a blandir lo que considera legítimo, estamos perdidos.
Digo todo esto desde la convicción, pero también desde la incapacidad (alguien considerará que cobardía) para imponer a nadie mis convicciones.