martes, 29 de marzo de 2022

Los pedagogos de la LOMLOE

La gran aportación de los pedagogos de la LOMLOE a la historia de la educación es la ignorancia preventiva: como no sabemos qué será útil en el futuro, que nuestros alumnos lleguen a él ligeros de equipaje.

La esperanza del Mesías

Ayer, por segunda vez en mi vida, fui invitado a comer al Palacio Real de Madrid. Y, por supuesto, fui. Viniendo de quien venía, recibir la invitación es un honor y responderla afirmativamente, un deber. Cogí un AVE temprano para husmear un poco en una de mis librerías de viejo preferidas de Madrid y salí de allí con una joya a muy buen precio, "L'angoisse de Pascal", de Maurice Barrès (1923), y una estatuilla del Quijote. El día fue largo y memorable. A Madrid ha llegado la primavera.

Hoy publico en The Objective La esperanza del Mesías.

domingo, 27 de marzo de 2022

Sobre la virtud

He participado en un seminario sobre la educación en virtudes que ha tenido lugar en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid. Lo menos que puedo decir es que ha tenido la virtud de alimentarnos muy bien. Pero, además, había una cordialidad en el ambiente muy notable, que facilitaba mucho los contactos y ya se sabe que lo que ocurre en los pasillos de estos encuentros es tan iportante como lo que ocurre en la tribuna. 

He vuelto a casa con mi moleskine llena de notas que tengo que meditar. Transcribo a continuación alguna de ellas:

1. La virtud, más que la conducta del "vir", del varón, nombra algo que se encuentra en su (supuesta) raíz indoeuropea "-rt-", que ha dado lugar a términos como "orthós" (recto), "arithmós" (número), "ritmo", "arte", etc.

2. La virrtud en su sentido más propio es el desarrollo excelente de una función. No se puede decir de algo o de alguien que es virtuoso si ignoramos respecto a qué. Existen los virtuosos del piano, del balón o de la cocina. Un caballo de carreras que gana carreras es virtuoso en esto. Los griegos hablaban sin reparos de la "virtud del ladrón", porque un ladrón es virtuoso si desarrolla su función de manera excelente (con la mayor eficiencia). ¿Pero cuál es la función del hombre?

3. Volví a oir lo de que "aprender no es simplemente adquirir conocimientos". Obviamente, pregunté: "¿Si no hay un incremento del conocimiento se ha aprendido algo?" ¿Por qué esta reticencia a aceptar lo obvio? ¿No se cuela en nuestros discursos pedagógicos modernos, de manera más o menos subrepticia, un tufillo antintelectualista?

4. Nos olvidamos un poco de la teoría como culminación de las virtudes propiamente humanas. Este olvido fue otro tributo a los tiempos.

5. Los británicos que intervinieron dijeron sin matices algo que nosotros matizaríamos mucho: que los profesores son los representantes de los padres en el aula. ¿Quién tiene razón? Dijeron también -e insistieron en ello- que no existe la neutralidad docente. Pero entonces no son unos prepresentantes meramente vicarios. Y aquí está el problema.

7. Me gustó esto: "La humildad no consiste en quitarnos valor, sino en no quitárselo al otro".

8. Varios conferenciantes resaltaron 3 momentos de la práctica de la virtud en la escuela: la práctica en sí misma (una actividad coherente), la narrativa (propuesta de modelos de excelencia) y las tradiciones (inscripción en una tradición).

9. Una idea rupturista en tiempos innovacionistas: Las prácticas pedagógicas deben crear tradiciones propias.

10. En un seminario como este era inevitable insistir en la educación del carácter y así se hizo. Se señaló que en la escuela para que esta educación sea posible, se requiere un idioma común (en palabras y ejemplos) y se insistió mucho en basar la educación del carácter en determinadas narrativas.

11. Otra idea repetida insistentemente, y que comparto: No es suficiente con que el profesor acompañe al alumno. Ha de educar.

12. Puede ser que a nuestros alumnos les resulte difícil leer a los clásicos, pero el maestro debe estar empado de ellos, de manera que sus discípulos accedan a los clásicos a través de él. Al maestro -se dijo- se le supone la lectura. Lamentablemente solo el 7% de nuestros maestros son lectores habituales.

13. Juan Antonio Granados (director del colegio Stella Maris La Gavia de Madrid), comentando su práctica: "En cada asignatura se lee, se relata y se escribe".

14. Otra idea de Juan Antonio Granados: "El hérore moral vive su vida con el enigma que él mismo es".

15. Y otra más: "El Quijote ha de ser imprescindible en nuestros colegios. Los maestros han de leerlo y los niños han de vivirlo en el maestro".

jueves, 24 de marzo de 2022

Misología y misantropía

El Fedón de Platón y la Primera epístola de Juan tienen algo muy relevante en común: la convicción de que la misología y la misantropía son dos caras de la misma moneda. Donde se da la una, se da la otra.

Ese prefijo "mis-" puede traducirse por repugnancia, enemistad u odio. La misología es, pues, la repugnancia (enemistad u odio) al lenguaje (y al razonamiento, pues el "logos" griego tiene este doble significado).  Su contrario es la filología, que es apetito (amistad o amor) al lenguaje (y al razonamiento).

La misantropía es, pues, la repugnancia (enemistad u odio) hacia el hombre. Su contrario es la filantropía.

En definitiva, los tiempos de pensamiento débil son también tiempos de fidelidades líquidas.

Un aleteo en Pamplona

Poco más de 24 horas en Pamplona, pero muy bien empleadas. Exprimidas, incluso. Llegué el lunes a la hora de la comida y volví el martes después de comer. Me recibió y me despidió una ciudad fría, encogida y cubierta por un mil hojas de nubes con toodos los tonos del gris. El sol era un supuesto metafísico, "epekeina tes ousías", y la luz un intangible, por lo frágil. ¡Pero qué verde, el verde de mi tierra y qué alegre el despuntar de la primavera! ¡Y qué generosísimo derroche de cordialidad y eficiencia por parte de todo el mundo! 

Iba a eso que algunos llaman, pomposamente, "trabajar" y que en realidad fue una continua tertulia entre amigos en la UNAV.  ¡Qué lujo andar discutiendo sobre el debate público en España con gente tan lista y tan acogedora como Daniel Capó, Armando Zerolo, Pablo de Lora, Juan Claudio de Ramón, Helena Herrero-Beaumont, Enrique García-Máiquez, Aurora Nacarino-Brabo, Juan Meseguer, José María Torralba, Ricardo Calleja, Alberto Nahum, María Guibert y Santiago Fernández-Gubieda. 

¡Y qué  alegría, volver a encontrarme con el sabio bueno Ricardo Piñero, al que en cuanto se descuida le aletean las alas, que me regaló tres libros con estas dedicatorias enlazadas: (1) "Querido Gregorio: te dedico esta 'Trilogía de la prudencia'... porque tu amistad me acogió con dulzura", (2) "porque tu palabra siempre es el eco de lo hermoso, que es lo auténtico..." y (3) "porque siempre es un placer compartir los sueños con otros aventureros de la verdad, el bien y la belleza". Obviamente traigo aquí estas palabras como homenaje a su generosidad... un tanto desmedida.

lunes, 21 de marzo de 2022

Las 6:00

Son las 6 de la mañana y llevo un rato sentado en mi sofá, con un libro en las manos y cubierto con mi manta preferida. Tener la manta adecuada ayuda mucho a proporcionarte el ambiente que necesitas para concentrarte.

Me gustan estas horas tan silenciosas, donde todo es calma y aún no ha asomado el alba por el horizonte marítimo. Se lee de otra manera.

Con frecuencia me preguntan cómo es que publico tantas cosas. Efectivamente, estoy publicando un par de libros al año, sin contar las colaboracones en libros grupales. No es moco de pavo. Pero es que es fácil madrugar cuando con cinco horas de sueño tienes suficiente (a veces completadas con una siesta), apenas ves la televisión y no lees la prensa. Eso sí, de vez en cuando vengo al ordenador a recoger una frase, apuntar una idea, o a escribir esto.

viernes, 18 de marzo de 2022

Madrid

Tres días intensos en Madrid llenos de conocimientos, personas nuevas y cordialidad. 

Llegué a Madrid el lunes por la tarde y me dirigí directamente al Recuerdo, el colegio que los jesuitas tienen en Chamartín con más de 2.500 alumnos. Más que colegio, es una ciudad en la que, por cierto, no se ve ni un papel en el suelo ni una raya en las paredes. Mantuve un diálogo muy ameno con los padres, cené con los jesuitas y dormí en sus habitaciones. Vi mucho, escuché mucho; aprendí mucho. Conocí a Carlos Mulas Diego.

El martes el día estuvo dedicado a las buenas gentes del San Pablo-CEU. Comencé con un encuentro con los alumnos de Grados de Educación en el Colegio Montepríncipe y seguí con un desayuno con el Consejo de Dirección de este mismo Colegio; después, en la Universidad, un acto de CEU Talks y comida con profesores universitarios. Tarde de larga siesta, paseos lentos y placidez bajo un cielo inquietante, anaranjado, envuelto en una atmósfera de calima.

El miérdoles, en Torrejón de Ardoz estuve defendiendo a las familias sensatamente imperfectas y sostuve que sabes que eres querido cuando puedes ser transparente para otro con la seguridad de que este sólo utilizará la información que le prestas para herirte levemente de vez en cuando. Tuvo este acto, organizado por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Torrejón algo especial. Fue muy intenso y emotivo y acabó, cosa nada frecuente, entre abrazos. Volveremos a vernos... en Alcalá.

lunes, 14 de marzo de 2022

Derechos animales y deberes humanos

 En El Español

El invierno se va despidiendo

Estos días de finales de invierno son siempre revoltosos. Al invierno le gusta despedirse con algún portazo.  Es su naturaleza desabrida. Más de una vez, cuando creemos que ya se ha ido, regresa súbitamente con una nevada y arroja sobre nosotros el frío que se ahorró en enero. Durante el fin de semana nos ha regalado un epílogo de nubes densas y bajas, lloviznas caprichosas, intérvalos de chaparrones furiosos y unas esporádicas ráfagas de viento que, tal como ahora mismo estoy viendo, parecen empeñadas en arrancar de sus pinzas las ropas puestas a secar y convertirla en cometas del caos. Pero el espectáculo verdadero está en el mar, en esas olas blanquísimas que rompen en espumas dehiscentes, en ese horizonte remoto que se diluye en el cielo, en esos grises plateados que las olas le arrancan al agua. Son días estos para mirar por la ventana, con la nariz pegada al cristal, observando embobado lo indefinido y perdiéndose en vaguedades mientras el cristal se va empañando con tu aliento. En ese gesto vuelve también un poco el niño que fui, que sale de su escondite a acompañarme un rato.

viernes, 11 de marzo de 2022

Sor María de Ágreda

Llovizna y yo estoy perezoso, preso de una de esas perezas gelatinosas que te llevan de libro en libro y no pasas en ninguno de media página de confusa lectura. Dejo mi estudio, enciendo la tele, voy de aquí para allá, miro por la ventana, bebo agua, como un par de almendras y vuelvo a mi estudio. Arrastro, es cierto, el peso ligero de una mala conciencia de andar por casa, una cosa leve, pero murmuradora, que no me quita la mandra. De hecho, un poco de mala conciencia es como la salmodia que acompaña a la galbana. Tengo sobre la mesa, abiertos, cuatro libros sobre sor María de Ágreda. Conozco bastante bien lo que dijo esta mujer en las cartas conservadas de ella, pero sigo sin saber quién fue esta monja, quizás la mujer más activa de su tiempo, a pesar de no haber salido de su convento. Ante la duda, le concedo el prejuicio de la honestidad y entonces su figura se me agiganta. Pienso en ella a retazos en mis idas y venidas desnortadas por la casa. Admirar a Sor María de Ágresa debe ser una de afecciones menos modernas que se pueden padecer hoy en día.

jueves, 10 de marzo de 2022

El eje del mundo

Vuelvo a publicar, aunque corregido y muy ampliado (y esta vez llegará a las librerías), el libro que me encargó la Compañía Nacional de Teatro Clásico sobre el Siglo de oro. Se tituló El recogimiento y llevaba como subtítulo La aventura del yo. Ahora lo publicará la Editorial Rosamerón con el título de El eje del mundo y el subtítulo de La conquista del yo. El mes que viene estará en las librerías. Un adelanto: Termina con sor María de Ágreda. Hoy me he pasado el día corrigiendo el texto. A estas horas ya puedo decir, con confianza, que todo está en orden.

En la editorial las cosas marchan mucho mejor de lo previsto y para celebrarlo haremos una especie de fiesta inaugural en la Bodega Saltó de Poble Sec (Blesa, 36), el día 30 del presente mes de marzo. Tendrán cumplida información en los próximos días, pero ya les aseguro que están ustedes invitados.

miércoles, 9 de marzo de 2022

Pundonor

Sigo sintiendo la necesidad, casi el imperativo moral, de entregar un artículo o una colaboración periodística varios días antes de la fecha que me han marcado. Y, si puedo, me adelanto varias semanas. La voz de mis padres insistiéndome en no dejar nada para el último momento, sigue viva en mí. Y siento que, con mi anticipo, me concedo a mí mismo un premio y les rindo un pequeño homenaje a ellos. Es un gozo íntimo y gratuito que me temo que no comprenderá mucha gente, pero que es real y se llama pundonor.

martes, 8 de marzo de 2022

Volver

Viaje ayer por la tarde a Santpedor, al norte de Manresa, a pasar un rato con un grupo de profesores en la escuela Llissachs que acabó con una cena serena y cordial. Mucho podría hablar de estos docentes, pero lo que quiero resaltar es el texto que me encontré sobre la puerta de entrada: "Para alcanzar la verdad es necesario hablar bien y razonar correctamente". Efectivamente son cosas elementales como estas las que hoy es imprescindible recordar. Un consejero de educación me pidió recientemente mi opinión sobre lo que debería de hacerse en las escuelas. "Back to basics", le respondí.

Al terminar la cena eché una mirada al móvil. Tenía un mensaje de José Ángel González Sainz. Ya les decía ayer que a Soria siempre se vuelve. Entre otras cosas me decía: "Hablamos de tu, nuestra, Sor María de Agreda. Si te apeteciera, estaría encantado de poder contar contigo para un LEER a Sor María de Agreda".

lunes, 7 de marzo de 2022

Encuentro en Castellóm

Es posible dudar de  muchas cosas. De hecho la historia de Europa es (también) la de la metamorfosis de sus dudas, de Pirrón para aquí; pero es difícil negar que estás a gusto en la compañía de alguien cuando la buscas precisamente por el bienestar que te proporciona. Con la edad vas descubriendo que merece la pena seguir el rastro de las personas luminosas tanto por lo que te iluminan por sí mismas como por la luz que reflejan de otras personas luminosas con las que te ponen en contacto. En definitiva, que si los amigos de Encuentro Castellón me dicen "Ven", lo dejo todo. Sé que volveré a casa con las alforjas a rebosar de buenos recuerdos.

 

Llegué a Castellón, con retraso, el sábado a las 16:15 de la tarde y ya me estaba esperando un coche que me llevó al casino, donde Ferran Riera, en la puerta, mostraba impaciencia por mi tardanza. Mantuvimos los dos un diálogo muy cordial y creo que honesto ante una audiencia que, por su atención, se merecía alguien con más carisma que nosotros que les multiplicase el pan y los peces de la caridad. Nosostros solo pudimos darles un bocadillo de mortadela.

¡Qué gente más admirable! Tras el diálogo, una entrevista y cena en Benicasim, en una casa situada cerca del que, para mí, es uno de los hoteles más bonitos del mundo, el Voramar. Llegué a mi hotel en Castellón, muy tarde. Me costó dormirme y me desperté muy pronto. En el restaurante del hotel me encontré con  J. A. González Sainz, que estuvo hablando en Encuentro de su admirable libro La vida pequeña. Congeniamos pronto y quedamos en que, tarde o temprano, iría a Soria (a Soria siempre se vuelve) a hablar de la correspondencia entre sor María de Ágreda y Felipe IV. Volví a casa a mediodía, con el tiempo justo para despedirme de mi mujer que partía a Pamplona.

sábado, 5 de marzo de 2022

Ciudadanía mundial

En la inefable LOMLOE se estableece (articulo 10, punto 3) que en educación primaria se impartirán a los alumnos "contenidos referidos a la ciudadanía mundial". Me pregunto cómo demonios debemos interpretar hoy esto.

viernes, 4 de marzo de 2022

Montando el pisito

Comida cordialísima en el antiguo restaurante Rilke, que ahora tiene un nombre del que no quiero acordarme. ¡Ojalá sean así todas las comidas de empresa! Estamos viviendo un momento dulce y es hermoso paladearlo. Las ventas van muy bien, el nombre de la editorial se va haciendo un hueco y nos llegan manuscritos muy interesantes hasta de México. Tenemos buenas perspectivas para los próximos meses y vemos con orgullo de padres primerizos cómo el proyecto va tomando cuerpo. Queremos ser, sin embargo, sumamente realistas e incluso un poco conservadores. Me imagino que esto es como los primeros meses de vida en común de unos recién casados que han entrado a vivir en un piso sin muebles y poco a poco van comprando sus primeras sillas, su primera mesa, su primer colchón de espuma, sus primeros cubiertos... En los momentos fundacionales no hay tiempo para las rutinas. Somos a la vez humildes y ambiciosos. Humildes porque sabemos dónde estamos, pero ambiciosos porque sabemos cuáles son nuestros puntos fuertes y qué es lo que debemos hacer.

jueves, 3 de marzo de 2022

Sobre la amistad

Hoy me preguntaba si la amistad es un bien moral. 
 
Lo primer que me he respondido es que hay amistades con fines innobles.
 
Lo segundo -y aquí estoy en deuda con Alexander Nehamas- es que, si fuera un bien moral en cierta manera estaría obligado moralmente a ser amigo de todos, ya que la moralidad nos anima a no ser morales fragmentariamente. 
 
Pero la amistad nos empuja a la proximidad con ciertos seres humanos en los que valoramos sobre todo aquello que los escolásticos denominaban su “haecceitas”: lo que descubrimos en ellos de singular y diferente. La amistad no es ni imparcial ni universal. Es sesgada, preferencial y concreta, individual; es una lealtad muy selectiva. 
 
Moral es la caridad y el mandamiento cristiano de amar a los enemigos. Pero la amistad es otra cosa. Puedo ser un gran filántropo y ayudar generosamente a los demás, pero al círculo de mi intimidad sólo dejo paso a mis amigos, que siempre son pocos.

miércoles, 2 de marzo de 2022

La praxis

Tras una serie de llamadas telefónicas de gente con altas responsabilidades en el mundo educativo, cada una más estrafalaria que la anterior, he llegado a la conclusión de que nuestra educación se sostiene gracias a que en realidad nadie hace lo que le mandan y la mayor parte de los que mandan, lo saben.

Miradas

A veces se necesita la contundencia de un enemigo para saber quiénes somos y, sobre todo, quiénes tenemos que ser. La mirada de enemistad, como la mirada erótica, tiene la capacidad de dotarnos de una figura concreta. Son acicates del autoconocimiento, porque nos fuerzan a preguntarnos qué tengo yo que me hace objeto de semejante mirada.

En ambos casos me pregunto también qué tengo en mí para corresponder a quien me mira y, sobre todo, qué debo tener para o merecer el amor o protegerme contra la enemistad. 

Sí, efectivamente, estoy pensando en la Unión Europea, Ucrania y Rusia.

martes, 1 de marzo de 2022

Los getas

 En El Subjetivo

Competencias e incompetentes

Uno de los fenómenos más curiosos de nuestro tiempo es el de los muchos notarios que han viajado al futuro y han vuelto para decirnos qué competencias se necesitarán en el 2030, en el 2050 o no importa en qué año. El caso más notable de estos viajeros del tiempo es el de la Agenda 2030.

En educación, las llamadas competencias son cajas de muñecas en las que debemos encajar la escuela presente para que dé de sí, bien moldeados, a los alumnos del futuro. Lo que no cabe en esas cajas, se considera irrelevante, porque los futurólogos no es que hayan visto el futuro, sino que han visto, sobre todo, lo que realmente importará en el futuro. La LOMLOE es, fundamentalmente, la obra de estos visionarios. Por supueesto, los argumentos que usan para convencernos de la inmaculada bondad de las competencias que ellos han seleccionado como pertinentes, no es que sean buenas en sí mismas, sino que si no nos amoldamos a ellas, nos quedaremos anticuados.

El caso es que los viajeros al futuro muy perspicaces no se mostraron con respecto a la Covid, y no se puede decir que haya sido un acontecimiento menor. Y ni tan siquiera han sido capaces de prever la chulería guerrera de Putin, que parece estar a punto de introducir la competencia ofensiva como competencia elemental del siglo XXI.

No me molestan las nuevas tecnologías. Al contrario, me gustan. Y me gusta también que mis nietos se familiaricen con ellas. Al fin y al cabo son solo cacharros que nos sirven como prótesis antropológicas. Lo que me inquieta es la mentalidad tecnológica que se cree capaz de derivar de una determinada y muy sesgada visión del futuro, el orden geométrico que debe regular nuestra educación presente.

El guionista caprichoso

 I A eso de las cuatro de la tarde ha sonado el teléfono. Era una de esas llamadas que esperas que nunca lleguen y que cuando llegan, siempr...