sábado, 7 de julio de 2007

Las prótesis del animal desnaturalizado

Ya recordaréis que dejé el otro día en el aire la pregunta de si el hombre, en lugar de ser un dios con prótesis, como decía Freud, era un tonto con prótesis, tal como sospechaba yo después de que mi caída en el incomparable marco de la terraza de la Pedrera (que sin duda, como me dice Pedro Azara, no fue pensado para ser convertido en tobogán de audiciones imposibles) me tenga sujeto a un par de muletas.

Yves Michaud escribía no hace mucho (Humain, inhumain, trop humain, 2002) que tal como van las cosas de la planificación familiar, los padres ya pueden decir a sus hijos que han sido queridos. Antes –digo yo- nos contentábamos con llegar con un pan bajo el brazo sin pretender tanto. Pero, la verdad sea dicha, aunque no estamos seguros de haber sido buscados, no tenemos dudas (al menos eso es lo que ocurre entre la gente que conozco) de que fuimos queridos. Pero esto no se acaba aquí, ya que muy pronto, gracias al progreso de la genética y al nuevo eugenismo que este progreso hace posible, los hijos no solamente serán queridos, sino que habrán sido elegidos para ser queridos tal y como son. Serán, podríamos decir, hijos de muestrario.

De esta forma la eugenesia que en sus orígenes fue un asunto público, e incluso estatal, se está privatizando. Me imagino que pronto entrará a formar parte de los nuevos derechos.

Sobre esta cuestión Peter Sloterdijk escandalizó a medio mundo el año 1999 con una conferencia titulada "Reglas para el parque humano". Partiendo de la “Carta sobre el humanismo” de Heidegger, Sloterdijk se plantea abierta y desvergonzadamente esta cuestión: ¿Qué es lo que aún domestica al ser humano, visto que el humanismo ha fracasado en esta empresa?

El hombre, según Sloterdjk no llega al mundo ni como hombre ni como animal sino, más bien, como un animal desnaturalizado. Para devenir humano debe domesticarse, es decir, alejarse de su condición potencialmente animal. Esta era tradicionalmente la empresa del humanismo. Pero el humanismo creía que era posible partir de algo ya humano en el hombre y agregarle la educación para humanizarlo completamente. En realidad, dice Sloterdijk, la educación es una transformación del animal desnaturalizado en humano o en inhumano

El hombre, como domesticador del hombre es una fuerza que opera sobre el mismo hombre por medio de tecnologías antropológicas. Un ejemplo de estas tecnologías son las prótesis (recordad que actualmente camino con muletas), que primero han completado y posteriormente van reemplazando y expandiendo las estructuras naturales del hombre. Las posibilidades orgánicas son progresivamente desarrolladas y, sobre todo, transformadas, en posibilidades no orgánicas al mismo tiempo que un amplio abanico de nuevos materiales artificiales va reemplazado los caducos materiales orgánicos. Evidentemente también podríamos hablar de cómo la energía orgánica está siendo completada por energías de laboratorio.

Por primera vez en la historia de la humanidad comenzamos a comprender la posibilidad científica de una transmigración del yo desde el cuerpo natural orgánico hacia el cuerpo de expansión tecnológica. Cuando tal proyecto sea completamente posible habrá nacido la utero-tecnología.

Todo esto significaría el fin del ser humano tal como lo ha concebido tradicionalmente el humanismo para pasar a entenderlo de acuerdo con su disposición natural para recibir prótesis es decir, para recibir un ser contra-natura.

8 comentarios:

  1. Morfeo:Vd se cae al bajar de la Pedrera,yo me caigo al subir a los Caidos.El cosmos anda alborotado.Qué tal le sientan las muletas al Bacallá?noaxggz

    ResponderEliminar
  2. Querida Maga: La vida se ha complicado súbitamente en todos los frentes posibles. Guillem se ha ido a Pamplona y nos ha traspasado a Pancho. Como sabes, Bacallà Salat no soporta a Pancho, absolutamente celosa de todos los rincones de la casa. Pancho, a su vez, no soporta mis muletas. Yo no soporto las escaleras de casa ni ellas me soportan a mi. Esta casa es una sinfonía disarmónica de maullidos, ladridos, ayes y un permanente tic-tac muletil.
    ¡Ah, cómo envidio la integridad y entereza de Long John Silver!
    ¿Se solucionaría todo con un loro en mi hombro?

    ResponderEliminar
  3. Don gregorio; lo siento ... yo lo imaginaba en Pamplona estos dias, debatiendo sobre toros, cazuelas, vinos y canciones inapropiadas y ahora me encuentro, con el inicio de un nuevo hombre, el hombre biotico!!!! Tranquilicese, las posibilidades de protesis son multiples y no se nota nada.....todo es empezar, de todas formas el resto de hueso, lo tiene usted muy bien ( no por la edad que tiene)sino morfologicamente, asi que esto se arregla seguro!!!!
    Me acabo de perder, la sardinada????
    Un abrazo Glauka

    ResponderEliminar
  4. Lo que todas estas transformaciones (que casi aparecen como amenazas) no nos aseguran es que no nos daremos un batacazo en cualquier momento. Quizá en ese batacazo esté recuido lo que aún tengamos de humanos. Besos, querido amigo y recupérate pronto y bien.

    ResponderEliminar
  5. Mientras no le guarde rencor, dedicando toda su vida cual capitán Ahab a la destrucción de la Pedrera...
    ¡Oh, por ahí resoplaaaaa!

    ResponderEliminar
  6. Muy buenas, te leo a menudo pero nunca me atrevo a comentar. Hoy me he animado.
    Siempre que pienso en la teoría de Freud sobre las prótesis me acuerdo de la película Ghost in the shell. Cabe pensar qué parte de nuestro espíritu quedará en el caparazón de prótesis con el que nos recubriremos. Siempre existe ese miedo, pero al menos la prótesis ayuda un poco a Gregorio a caminar. Aún así, no se han inventado prótesis artificiales para los sentimientos humanos.

    Espero que te mejores, Gregorio. Prueba a ponerte un parche en el ojo y así completas la estampa.

    Un abrazo desde Sevilla.

    ResponderEliminar
  7. Manuman: Bien venido al Café de Ocata. Y, por supuesto, agradeceré tus comentarios. Me he pasado por tu blog, que me parece magnífico, pero no he podido subscribirlo a mi bloglines.

    ResponderEliminar
  8. Muchísimas gracias Gregorio por el elogio, pero un blog para que sea bueno de verdad hay que actualizarlo al nivel que tu actualizas el tuyo.

    Es cierto que tengo problemas con el rss de las entradas, voy a ver si lo soluciono.

    ResponderEliminar

La Isla de Siltolá

 I Finalmente, después de varios intentos fallidos, el mensajero nos ha encontrado en casa y me ha entregado los ejemplares de Una triste bú...