No es fácil interpretar esta fotografía. ¿Quizá una invitación a comer? O tal vez cobran por cada bocadito. Mi madre me cuenta que, cuando ella era pequeña (tiene ahora 85 años), iba un hombre por las casas llevando un hueso de jamón colgando de un hilo y que, por unos céntimos, lo metía durante un rato en el puchero para dar gusto al caldo. La miseria no se acaba nunca. Saludos.
Bueno... Isabel, en realidad sólo pretendía dirigir un guiño a los futboleros. Pero, como ocurre siempre, los propósitos dejan de ser de uno en cuanto se ponen en circulación. Las imágenes son, siempre de quien las interpreta. E interpretamos con todo nuestro pasado leyendo la imagen por encima de nuestros hombros. Pasando a otra cosa: ¿Viste la exposición sobre los tracios en el Museo Pio V?
No es fácil interpretar esta fotografía. ¿Quizá una invitación a comer? O tal vez cobran por cada bocadito. Mi madre me cuenta que, cuando ella era pequeña (tiene ahora 85 años), iba un hombre por las casas llevando un hueso de jamón colgando de un hilo y que, por unos céntimos, lo metía durante un rato en el puchero para dar gusto al caldo. La miseria no se acaba nunca. Saludos.
ResponderEliminarBueno... Isabel, en realidad sólo pretendía dirigir un guiño a los futboleros. Pero, como ocurre siempre, los propósitos dejan de ser de uno en cuanto se ponen en circulación. Las imágenes son, siempre de quien las interpreta. E interpretamos con todo nuestro pasado leyendo la imagen por encima de nuestros hombros.
ResponderEliminarPasando a otra cosa: ¿Viste la exposición sobre los tracios en el Museo Pio V?
a mi mas me parece "evas" amontonadas
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