Lo que hemos querido olvidar es que la Ley es tan implacable y perfecta como la Naturaleza o el Número.
Sí, la naturaleza siempre gana, es verdad, como en el verso viejo: ...tamen usque recurret. ¿Pero ahora quién para este saber? Demasiado Dostoievski; poca Mary Austen... ¿No queríamos modernidad y revolución?
I Día larguísimo el de ayer. Los relojes adquirieron una consistencia daliniana y se independizaron de la aritmética. II Me levanté con un...
Lo que hemos querido olvidar es que la Ley es tan implacable y perfecta como la Naturaleza o el Número.
ResponderEliminarSí, la naturaleza siempre gana, es verdad, como en el verso viejo: ...tamen usque recurret. ¿Pero ahora quién para este saber? Demasiado Dostoievski; poca Mary Austen... ¿No queríamos modernidad y revolución?
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