miércoles, 29 de abril de 2020

Días de coronavirus, 65. Nueva normalidad.

No recuerdo qué actor era el que decía que "como fuera de casa, en ningún sitio". No es mi caso, aunque echo mucho en falta mi terraza del Petit Café, pero, por lo que veo, no son pocos los que por muy grande que sea su hogar, a los cuatro días del confinamiento comenzaron a sentirse como personas sin techo, "homeless".

"Aquel que quisiera aprender a volar", dice Zaratustra, "debe primero aprender a caminar y a correr". El gobierno parece haber seguido las instrucciones de Nietzsche para llevarnos al tiempo prometido de "la nueva normalidad". 

Ya hay fechas para imaginar el futuro. Parece que el 11 de mayo se reabrirán las terrazas y que a finales de junio se podrá ir a la playa. En la repetición cotidiana de lo mismo no había futuro, sino un presente indefinido. 

Me entero de que la mortalitad per covid-19 es más del doble en hombres que en mujeres. Siempre he sostenido que el masculino es el sexo débil. 

Acabo de leer un artículo en The New Yorker que me ha provocado una especial desazón. Este es su titular: "Deaf-Blind People Fear That Doctors Won’t Save Them from the Coronavirus". Por lo visto, los americanos ciegos y sordos están siendo olvidados en la pandemia.

Walter Mehring, La biblioteca perdida (Die verlorene Bibliothek): “Cervantes no me abandonaba nunca. Era para mí el primero de los socorros, un bálsamo consolador capaz de sanar todas las locuras que herían mi corazón". 

Mail de B.: "Ce matin, je suis passée place des Vosges en allant faire mes courses. Je n’ai pu résister à l’envie de faire une photo de cette galerie actuellement déserte et morte. C’est à l’endroit où nous nous sommes arrêtés et où je vous ai parlé de Victor Hugo et de DSK (page 193 de El Cielo... ). Votre légère ironie au sujet de cette conversation me fait sourire, rétrospectivement".

Hay también pequeñas pero entrañables utopías en el pasado, que hemos decidido dejar atrás como fortalezas sin conquistar, para que nuestro avance en el tiempo no nos haga insensibles a sus incursiones melancólicas por la retaguardia.

4 comentarios:

  1. The ‘new normal’ and the indefinite present is definitely taking a toll on most of us, if not for everyone. Hope this global scare come to an end quickly and return us the old ‘normal’.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Yes, New normal days begin during corona pandemic period, hope our prayers will make the thing happen soon.

    ResponderEliminar
  4. Work from Home and Back pains are the welcome changes in the new normal but one also has to also consider the increasing sedentary lifestyle and consequences of health issues especially spine and back pain and a visit to Back Pain Doctor In Chennai
    becomes a part of the new normal too

    ResponderEliminar

Tracios, iberos y partos

I Cada vez que me encuentro con piezas ibéricas relevantes, como el sábado en el Museo de Albacete, le envío imágenes de las mismas a mi ami...