Resulta que el Islám del futuro ya existe, entre algunos.Por ahora es evidente que no tienen demasiada fuerza, pero no deja de ser una alegría escuchar a estos musulmanes.Un abrazo, Gregorio.
Me parece un gesto de una valentía digna de ser muy tenida en cuenta. Y, desde luego, no creo que debamos condenarla al silencio.
I Esta mañana ha merecido la pena. He llegado a la estación de Atocha a las 10:02. Al salir del tren me ha recibido ese huraño frío mesetar...
Resulta que el Islám del futuro ya existe, entre algunos.
ResponderEliminarPor ahora es evidente que no tienen demasiada fuerza, pero no deja de ser una alegría escuchar a estos musulmanes.
Un abrazo, Gregorio.
Me parece un gesto de una valentía digna de ser muy tenida en cuenta. Y, desde luego, no creo que debamos condenarla al silencio.
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