Agostino Ramelli era un humanista que, haciendo honor a su condición, estaba profundamente preocupado por la difusión de las letras. Así que puso todo su empeño en la invención de un artilugio que facilitara la tarea lectora al máximo. Tras mucho cavilar dio finalmente, en 1588, con esta ingeniosa solución:
Como podéis ver, permite leer al mismo tiempo una gran cantidad de libros sin necesidad de desplazarse de aquí para allá. Me podréis objetar, quizás, que si el progreso de la lectura depende de la difusión de inventos de este tipo, las modernas condiciones de habitabilidad no lo ponen nada fácil. Bueno, pero podríamos pedir a los poderes públicos que habilitasen espacios adecuados. Súbal: ¿Qué te parece?
La máquina apareció en Los tres mosqueteros, de Richard Lester (de 1974) y está descrita en Una historia de la lectura de Alberto Manguel.
Los libros, que se leen palabra por palabra, y página a página, son la mejor evidencia material de que sus lectores somos seres finitos y limitados (por si no nos habíamos enterado). Imaginarse una biblioteca infinita (Borges) carece de todo sentido, aunque está muy bien como juego intelectual y literario.
ResponderEliminarClaudio.
ResponderEliminarViene a ser como un google a pedales.
Desde luego el invento traería esperanza a muchos padres de jóvenes lectores. No hay nada peor que la habitación de un pájaro de estos.
ResponderEliminarPor cierto -aunque no sé si viene del todo a cuento-. ¿Alguien me puede explicar por qué un mail que me llega con este prometedor encabezamiento "Aristotelian V. Microphones" resulta al abrirlo un mero spam anunciando viagra?"
ResponderEliminar¿Y todo esto sólo por no levantarse a coger un libro de la estantería? Una buena forma de criar michelines, desde luego.
ResponderEliminarAdemás, con el tiempo empleado en inventar ese trasto, seguro que podía haber leído un montón.
Saludos somnolientos.
Pues a mí don Gregorio la máquineja me parece un ingenioso avance de nuestro (mío no) ya tan acostumbrado zapping. Lo mismo que un mando a distancia pero en tiempos en los que no había tele ;)
ResponderEliminarBesos
Lo que no inventen los de la viagra para tocar todas las clavijas :)
ResponderEliminarnos espían, gregorio. cuando haces búsquedas sobre un tema cualqiera, al minuto tienes un correo viagra de asunto relacionado con ese tema. ¡ya están aquí, y están entre nosotros! aaagggg
ResponderEliminarPerdón que llegue tarde a su llamada, señor Luri. Me parece un invento extraordinario, un protobloglines, o un protogoogle, como apuntan los compañeros.
ResponderEliminarEn fin, ver para creer!
sembra precorrere la lettura ipertestuale!
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