Parece que vuelve la polémica sobre el proyecto póstumo de Eduardo Chillida de crear un cubo de 50 metros de lado en el interior de la montaña de Tindaya, en Fuerteventura. Que conste que no tengo una opinión formada sobre esta cuestión. No sé cómo afecta esta obra a una zona que está considerada monumento natural, aunque dudo que visitar una “gran escultura para la tolerancia”, que era lo que pretendía hacer Chillida nos haga más tolerantes. Incluso dudo de que la tolerancia pueda elevarse a principio moral. No sé tampoco si los ecologistas que se oponen al proyecto son, como los calificó el artista, un “un coñazo espantoso”, aunque me imagino que lo serán, como es la obligación de todo ecologista militante. Lo que sí sé es que el argumento de que lo único que movió a Chillida fueron sus ansias de perpetuarse en el tiempo y de dejar una obra para la eternidad en un ataque de egolatría, no vale un céntimo de euro. Gracias a que han existido artistas ególatras dispuestos a perpetuarse en el tiempo pese a quien pese, disponemos de eso que se llama “historia del arte”. Walter Benjamín decía que no hay un monumento de civilización que no sea también un monumento de barbarie.
Buenos días, Gregorio!
ResponderEliminarPor ser el gremio en el que he pastado (al menos desde el ribazo) y la latitud desde la que vengo rumiando los últimos 7 años, tengo una opinión bastante formada y documentada sobre el tema -pero sólo es mi visión-. Exponerlo aquí me haría extenderme demasiado -mejor en torno a un café-. En Agosto merodeé por la Montaña. En ella confluyen desde restos arqueológicos de gran valor hasta la especulación más descarada de unos organismos públicos amalgamados con caciques locales - cosecha Gran Reserva, los de La Oliva, que darían para culebrones "estilo venezolano" a granel-, todo ello aliñado por las ansias legítimas, de algunos sectores de la población de tener su "hito artificioso", espejismo de progreso y turistas, que tan buenos rendimientos ha dado en Lanzarote, Bilbao y otros contextos en el proceso de reinvención de su modelo de desarrollo.
Lo que generalmente suele estar más oculto a la opinión pública, es todo un thriller administrativo de licencias y concesiones en torno a las antiguas canteras de extracción de piedra de la zona. Es de lo más interesante tirar del hilo en este sentido.
En este melodrama, tan importante como el VACÍO ensalzado por el difunto levitante, es el LLENO de los miles de m3 de piedra golosa que se extraerían y que servirían para enmendar algunas de las cuestiones administrativas apuntadas en el párrafo anterior.
La génesis de todo esto, sintetizada, se parecería mucho a la página de contactos de un periódico gratuíto: por un lado: "artista busca montaña para saciar utopías personales" y por otro: "equipo de paisajistas bienintencionados, busca intervención singular de mano divina para pagar -con el material extraído- el plan de protección de la Montaña".
A partir de aquí comenzó todo un trasiego de celestinos y coristas de diverso pelaje que aún perdura, y lo seguirá haciendo muucho tiempo...
Bueno, después de toda esta letanía, supongo que se abre la veda. Espero perdigones.
Salud.
Carlos
A nosotras es que no nos gustan sus obras de arte. Y no nos convencen los argumentos (si los hay) de los críticos para que nos tengan que gustar.
ResponderEliminarPero sí le doy la razón al señor Luri: todo acto artístico es ególatra, si no lo fuera estaría en el fondo de un cajón para siempre o en un estercolero. ¿A qué artista no le gusta comunicarse con alguien, que alguien entienda su obra, que la lea o que la mire? Vamos, que se pueden tener las más buenas intenciones pero no deja de ser un grito de atención: "Eh! Fijaos en mi! Mirad qué bien lo hago! Y los demás regocijamos nuestra inteligencia a través de la que el artista nos ofrece.
Claro que, si no hay intercambio de inteligencia en una obra de arte, ¿qué clase de grito es?
No lo veré, pero creo que algún día mucho arte moderno se considerarà una tomadura de pelo. El concepto de artista creador y todo eso también es bastante 'moderno' por cierto...
ResponderEliminarDesde que supe de este proyecto, que me tiene fascinado. Sé que se "inspiró" en las viviendas-burbuja que ha formado la lava bajo tierra, pero poco más.
ResponderEliminarLo que sí sé es que -y esto es una opinión personal- el arte, para que sea tal, debe transmitir algo, ya sea un escalofrío, simpatía o rechazo. No estamos hablando de belleza, eso es otra cosa. E intento imaginarme ahí dentro, en un cubo de 50 metros, un vacío ahí dentro de una montaña, sintiendo vértigo y la certeza de ser insignificante... Entiendo que esa sensación es la que nos puede hacer más tolerantes. El saber que, en realidad, no somos nada.
Vaya, que me parece brillante.
A veces, el inconsciente uterino de los artistas sale a flor de piel, bueno mejor dicho entra a flor de montaña.
ResponderEliminarEnrri (y Taliesin, porque noto su presencia): Pero el útero artístico es como un anuncio o una premonición del nacimiento. Arrebatos lo ha visto bien. En este sentido el arte es todo él político, porque sirve para ocultar que en el útero de la polis sólo es útero. No hay más allá. No hay nacimiento.
ResponderEliminarArte -areté -arithmós... tienen su origen en la raiz indoeuropea "rt-" (que ha dado el sánscrito "rita"): tdo son ensoñaciones de orden.
Carlos: Buenas tardes. ¡No sabes lo que me alegra verte por aquí! Así que ahora mismo decreto un VEDADO DE CAZA.
ResponderEliminarMaules: Ha habido grandes artistas que han sido inmensos misántropos. No comparto vuestra opinión de Chillida. Os animo a visitar Chillidaleku, su museo en Guipuzcoa. Estoy seguro de que cambiaréis de opinión. O no. Que las gatas sois muy vuestras.
ResponderEliminarJúlia: Llegará el día que toda capital de comarca tendrá su museo de arte moderno, más que nada para sentirse moderna. Es lo que tiene el arte moderno, que hay que lucirlo para sentirse uno de su tiempo.
ResponderEliminarProfesor, lamento no estás de acuerdo con su enunciado.
ResponderEliminarCuando dice que "no hay más allá", el lenguaje vuelve a oscurecer el sentido mucho más. Como cuando los posmodernos dicen que no hay espacio de representación en su filosofía.
Si se refiere, a que no hay "trascendencia" estaría de acuerdo si se concreta mucho más, lo que entonces hay. Porque indudablemente hay algo, aunque no sea más alla, sino más acá.
Y sabe por qué, porqué usted mismo en la frase siguiente, identifica el "mas alla" con el "nacimiento".
Cuando habla de que el "No hay más allá, no hay nacimiento".
Y no estoy conforme, porque precisamente el artista lo es, porque su agonía es haber nacido. Como Artaud.
Cuando Chillida, imagina un cubo dentro de la montaña, imagina un "volver al útero materno". Ya que es precisamente un CUBO, porque lo quiere es INCUBARSE dentro de la Barriga-Montaña.
ResponderEliminarAl igual que Dalí quería incubarse dentro del huevo de Leda, o Cage incubarse dentro de la cámara anecoica, o Artaud, o...todo el arte posmoderno.
(Por cierto, no se quién es Taliesin?)
Enrri: Recuerde que desde Heráclito sabemos que la misma justicia es polémica.
ResponderEliminarLo que quiero decir es que la imaginación del nacimiento es la noble mentira del arte. A los artistas les ayuda a ser artistas, y a los ciudadanos, religiosos.
"La imaginacion del nacimiento es la noble mentira del arte".
ResponderEliminarMe hubiera gustado haberla escrito yo. Pero el término "noble mentira" me resuena a Strauss. Entonces, ¿es la misma noble mentira de la polis?.
(Este concepto de "noble mentira" ¡es que me cuesta de comprender!, quizás sea el culpable de mi incapacidad para comprender sus planteamientos).
Enrri: Tienes razón en que con cada palabra arrastramos una tonelada de presupuestos. Cuando hablo de "noble mentira" estoy pensando en Platón, tal como la plantea en la República, y, sobre todo, en la Segunda Consideración Intempestiva de Nietzsche. Hay verdades que infectan el alma y mentiras que la mantienen oreada y sana. Por ejemplo toda afirmación de una copertenencia (a una patria, a una amistad, a un amor...). Buena parte de la actividad filosófica consiste, en mi opinión, en discernir esas "pia dogmata". Curiosamente el concepto de "pia fraus" sirve para unir con un nexo consistente a Spinoza y Nietzsche.
ResponderEliminarLa defensa noble de la noble mentira es también para mi la única puerta que nos permite salir del laberinto heideggeriano.
tienen su origen en la raiz indoeuropea "rt-"
ResponderEliminar... que en iranio produce "arta", como en Artajerjes y D'Artacán.
A mi también me parece una brillante idea .Crear una obra en el interior de la Montaña , inmiscuirse en la Tierra , vaciarla , que nos acoja , mi asociación de ideas me lleva hasta los túmulos funerarios celtas tipo Newgrange ...volvemos al Neolitico ? , quizas sean añoranzas de comunicacion entre el hombre y la madre tierra ...todo es posible en este arte contemporaneo
ResponderEliminarHummm, para ser sinceros, si en algún momento pierdo el norte y decido adorar a algún dios, preferiría que fuese, más bien, una diosa. Lo digo en serio, por una vez...
ResponderEliminarSeñor Luri: no discutiremos sobre Chillida que al final nos iba a convencer con ese arte que tiene. Pero esto de la noble mentira nos obsesiona. ¿Platón ya habló de ello? Estamos buscando bibliografía y lo más lejos a que hemos llegado es a Kant y a Montaigne...
ResponderEliminarPeggy: La imagino a usted paseado por el interior del cubo con sus zapatos de tacón de aguja... las inmensas paredes recogen, amplifican y devuelven el sonido del tic-tac de sus pasos en un crescendo que hace finalmente explotar toda la montaña. Por su culpa dejaríamos de ser tolerantes.
ResponderEliminarFreman: Es usted un genio. De aquí en adelante contemplaré en D'Artacan de manera bien diferente.
ResponderEliminarQueridas Gatas Maulas: Comiencen ustedes por la Segunda Consideración Intempestiva de Nietzsche...y Después pásense a Platón (República 414 d y ss.). Y ya hablaremos.
ResponderEliminar“En el útero de la polis se dan solo ensoñaciones de orden”… de hecho, las fundaciones de las ciudades se hacían en torno a un centro (hoyo) creciendo con una estructura cuaternaria que iba configurando un mandala, que es el máximo orden.
ResponderEliminarEl útero artístico es una premonición de nacimiento, sí. Pero toda promonición de nacimiento implica ya el nacimiento. Otra cosa es la realidad sustancial que le atribuyamos.
¿La noble mentira de Tindalla es imaginada como una fundación de una polis (el hoyo, la estructura cuaternaria del cubo) cuyo valor supremo es la tolencia?
Lo chocante es que se realiza en una montaña, justo donde habitan los dioses. ¿Es pues la obra de Chillida un proyecto ateo? ¿Sugiere acaso que en el ateismo se encuentra la solución al problema de la intolerancia?
Yo creo que la sensación de vértigo e insignificancia nos puede hacer más tolerantes o emprender una cruzada para evitar el horror vacui. Y es que invocados o no invocados los dioses están siempre presentes.
De aquí en adelante contemplaré en D'Artacan de manera bien diferente.
ResponderEliminarNo creas: según parece, el perro es un animal muy bien considerado por el zoroastrismo, y según Ibn Warraq, es muy probable que el infame trato que los árabes dispensan a los perros sea una forma heredada de escarnio contra los parsis, mayormente canófilos.
Gracias por la cita!
ResponderEliminarYa di mi opinión en el blog, pero resumiento no me gustan ni las obras póstumas, ni los deseos de perpetuarse en el tiempo y CHillida tampoco mucho jeje