A María Zambrano le gustaba recordar aquella frase de Santa Teresa, “me paso mucho tiempo contemplando cómo es el agua” y la siguiente estrofa del "Cántico Espiritual de San Juan de
¡Oh cristalina fuente,
si en esos tus semblantes plateados
formases de repente
los ojos deseados
que tengo en mis entrañas dibuxados!
La ciencia y la razón pura tienden a ser ciegas respecto al mero fluir del agua, como tienen querencia por la fórmula, prefieren estudiar la manera de convertir el agua en fuerza motriz. Por eso tiene razón Zambrano cuando advierte que “la razón pura es la pura monotonía”. Para la razón pura el tiempo es una mera función de la velocidad y el espacio. Para liberar la densidad del tiempo de la prisión del cronómetro, Zambrano dedicará todo su esfuerzo filosófico a imaginar una razón poética en la que tenga cabida la esperanza como la dimensión esencial del tiempo humano, porque es la esperanza la que “sostiene todo acto de vida”
La ciencia y la razón pura tienden a ser ciegas respecto al mero fluir del agua, como tienen querencia por la fórmula, prefieren estudiar la manera de convertir el agua en fuerza motriz.
ResponderEliminarDiscrepo vehemente de esa distorsión de la percepción de la ciencia, que la confunde interesadamente con la técnica (una de sus legítimas hijas).
Dígame si prefiere pensar en que dos electrones se repelen por una mística "virtud repulsiva", o por un intercambio cuántico de fotones, como sostiene la electrodinámica cuántica... o si prefiere no pensar en ello.
Si elige la tercera opción, reconozca que está perdiéndose un espectáculo tan hermoso como el fluir del agua y que es la base del fluir del agua y de la agitación de los electrones que hacen posible este blog.
Freman: ¿No me acepta usted ni la "tendencia"? "Tienden a ser ciegas", he escrito, sin duda pensando sobre todo en Galileo y Newton; pero si no he dicho que "son" ciegas es porque soy consciente de que la ciencia hoy es extraordinariamente compleja. ¿Pero aún así, no le parece a usted que lo individual sólo es interesante para la ciencia en tanto que singularidad, es decir, en tanto que aberración?
ResponderEliminarRespecto a la técnica, la entiendo más bien como el supermercado de la ciencia.
Pero vaya... bienvenida sea su vehemente discrepancia.
Yo no la acepto, la discrepancia: "un espectáculo tan hermoso como" sigue remitiendo, y "ad infinitum", a una razón poética (llámese como se quiera) no reductible a la razón científica.
ResponderEliminarLola
¿No me acepta usted ni la "tendencia"?
ResponderEliminar:) Por supuesto que la acepto. A usted. Estas batallitas no suelen ser personales.
Y si la razón que me da es la tensión entre la ley general y lo individual, lo acepto aún con más razón (perdón).
Es sólo que la exposición a Agapito Maestre me ha terminado provocando alergia a la Zambrano. Me la mencionan, me entra la rinitis y lo pongo todo perdido de mocos.
¡Pobre Zambrano! Tiene muchos más monaguillos que críticos. La verdad es que su filosofía ya es de por sí bastante beata (además de, en mi opinión, poco original), le gusta demasiado refugiarse en fórmulas edulcoradas que, con frecuencia, provienen de autores a los que no cita.
ResponderEliminarEl que sea mujer, filósofa y española no le añade nada de valor a su filosofía.
El post era -pretendía ser- una loa de lo científicamente intrascendente... y el agua que fluye me ha parecido una imagen exacta.
Creo que aquí s’ están mezclando coles con caracoles. Dejemos a la poesía lo que le pertenece: enigmas, multiciplidad de interpretaciones, etc. Y a la ciencia lo que pretende, que es justamente lo antagónico: descifrar enigmas.
ResponderEliminarNada Asensi, que no nos hacen ni caso. Ellos, a lo suyo.
ResponderEliminarLola
LOla, Asensi: ¿Lo que decís ha de interpretarse científica o poéticamente?
ResponderEliminarAsensi: Por cierto, la mezcla de coles con caracoles es altamente beneficiosa para los caracoles. Pero no he acabado de entender si los caracoles son la ciencia o la poesía.
ResponderEliminarFreman: ¡Contésteles ahora mismo! ¡Ar! (¡Qué poesía la del sargento chusquero!)
ResponderEliminarEs posible que la esperanza sea una "dimensión esencial del tiempo humano", pero no que la esperanza "sostenga todo acto de vida" no se si esto es de la SR Zambrano o del SR Gregorio.La vida hay que vivirla a cada momento, la esperanza es una falacia,si esperamos, es posible que desesperemos y la vida se puede hacer insoportable asi que a mi me parece mas razonable vivir el momento a cada minuto, que por otra parte no se si es el tiempo real o el que paso hace millones de años y esto es solo una instantanea!!!. ¿NO vemos ahora la luz de una estrella como se apago hace millones de años, y parece presente? Porque no, alguien desde otro punto del universo, no puede estar viendo nuestras vidas dentro de 25 años o hace 25 años?. Necesito la esperanza para engañarme a mi misma, pero no hay esperanza...y a pesar de ello sigo viviendo.
ResponderEliminarQueridisima Glauka: Lo sostengo, la esperanza y (ahora añado) la memoria nos acompañan en cada instante. La diferencia entre una y otra es que la esperanza es con frecuencia ciega (y con frecuencia, también, debemos agradecer que así sea), la memoria no; la memoria, puñetera, es muy clarividente (aunque no siempre certera).
ResponderEliminarSe lo voy a poner en plan trágico, a lo Iván Ilich: Imagínese usted la vida como una caída inevitable contra el suelo. La memoria y la esperanza son la fuerza de la gravedad.
Ahora sí que me he perdido. ¿o no?
ResponderEliminarLola
Lamento, Asensi, haberte puesto en tal tesitura, oye.
ResponderEliminarLola
¡Ay! ¡Que igual estoy desvariando!
ResponderEliminarMi capacidad de resilencia (palabra que acabo de aprender) está por los suelos.
No Don Gregorio, la caida es la fuerza de gravedad, si tuvieramos memoria quiza no caeriamos, pero y la esperanza...... es que el tortazo no sea demasiado fuerte, pero nada mas. No esperemos vivamos!!!!!!!!
ResponderEliminarGlauka:
ResponderEliminarSólo podríamos vivir sin esperanza si olvidásemos inmediatamente cada instante vivido.
En todo caso, para usted (y sin segundas, créame):
Esperanza, Esperanza
sólo sabes bailar cha cha cha
Esperanza, Esperanza
sólo sabes bailar cha cha cha
Te conocí, y te enamoré
y me ilusioné
y ahora todo se acabó
al conocer
tu fingido amor
que causó dolor
a mi pobre corazón
De nada valen
los abriles que he vivido
si de mujeres, nunca se sabe
la que no es mala
lo aparenta muchas veces
y la que es buena, no lo parece
Ay qué pena me das
Esperanza por Dios
tan graciosa pero
no eres buena
Ay qué pena me das
Esperanza por Dios
tan graciosa
Y sin corazón!
Esperanza, Esperanza
sólo sabes bailar cha cha cha
Esperanza, Esperanza
sólo sabes bailar cha cha cha
Freman: ¡Contésteles ahora mismo!
ResponderEliminar¡A la orden!
Y a la ciencia lo que pretende, que es justamente lo antagónico: descifrar enigmas.
La verdad es que las "religiones científicas" suelen resultar bastante ridículas... y hablo de religiones porque la religión, cuando no es de la viña mala, es una forma más de poesía.
Por cierto, tenéis frente a vosotros al primer y último panenteísta ciberspinozista. Prometo no hacer proselitismo.
¡Eh! ¡Freman! ¡No vale eso de enseñar el caramelo y después no darlo porque provoca caries! Usted haga proselitismo, que nosotros ya decidiremos por nuestra cuenta si lo seguimos o no.
ResponderEliminarEl "ciberspinozismo" suena de maravilla.