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viernes, 29 de junio de 2012

Barcelona

"Barcelona ha adquirido un aspecto serio, burgués. Pero algo bulle en su seno. En una enorme sala, ante millares de ávidos oyentes, el viejo y medio ciego poeta León Felipe, filósofo místico, lanza un apasionado llamamiento:
- ¡Necesitamos una dictadura! ¡ Sí! ¡Dictadura de todos! ¡Dictadura para todos! ¡La dictadura de las estrellas! ¡La dictadura del ensueño!
A muchos les brillan los ojos. Nadie sabe qué es eso de la dictadura de las estrellas. Probablemente algo bueno. A  pocos interesan las noticias del frente. Barcelona vive entre el cielo y la tierra, entre el infierno y el paraíso. Dictadura del ensueño..."

Mijail Koltsov, Diario de la guerra. El texto recoge parte de la anotación del 2 de abril de 1937.

Koltsov fue el corresponsal de Pravda en la guerra civil española. Estaba considerado como el hombre de Stalin en Madrid, consideración altamente preocupante, puesto que no le impidió ser fusilado en la URSS de Stalin. Era judío.

12 comentarios:

  1. Me sorprende que todavía exista quin se exalte ante determinadas retóricas de nuestro tiempo viendo como terminaron la mayoría. Quizá ha de ser así.

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    1. Llevamos la retórica en la sangre, tanto que, muy a menudo, la usamos para derramarla... Gustavo Bueno, que parece haber nacido para monologar, tiene un texto excelente sobre el aforismo (así lo califica él) "hablando se entiende la gente". En esa prolija interpretación -Bueno es enemigo del laconismo- llega a la conclusión justamente de lo contrario: hablamos para no entendernos. Y bien mirado, no le falta razón al emérito y benémerito. ¡Hay tanto de opacidad ensimismada en la retórica! La retórica del "hombre nuevo", del "¡No pasarán!", del "pueblo unido jamás será vencido" y otras tantas miserias intelectuales no llevan sino al avieso propósito de secuazarnos, por eso es mala prosa y deleznable poesía, porque prosa viene de prosequor..., y hemos olvidado que poesía viene de poieo, el quehacer artesano, porque la obra de las manos no engaña.

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    2. Quizás en el fondo seamos sólo retórica... y la poiesis consista en ocultarlo.

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  2. El gato de Schrödinger12:07 a. m., junio 30, 2012

    La retórica: cantos de sirena para espíritus sugestionables.

    En una versión moderna de la Odisea, Ulises se haría atar al mástil de su nave para sustraerse al efecto de la retórica que incita a tomar partido por alguna causa o afiliarse a alguna organización. Para mí que Ulises, hombre astuto y práctico, poco sugestionable, no necesitaría de esa estratagema, pero hombre precavido vale por dos.


    El texto de Gustavo Bueno no lo he leído, pero se me ocurre un asunto en el que las palabras, con facilidad, pueden resultar contraproducentes para una buena comunicación, precisamente ese asunto que ha tenido tan ocupados a los poetas desde Catulo hasta Cernuda.

    ......

    Por cierto, muy bien escogido el fragmento: es la apoteosis de la irracionalidad. Imaginándolo en su contexto, produce una impresión como de delirio regado de absenta.

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    1. Kafka decía que cuando vieron que Ulises se les acercaba y que el resto de los marineros tenían los oídos tapados, decidieron fingir que cantaban, pero sólo movieron los labios.

      El libro de Koltsov es terrible. NO pudo publicarlo al volver a la URSS y de hecho no llegó a verlo publicado. La sensación que me produce leerlo es que los republicanos no se creyeron que podían perder la guerra hasta que ya la tuvieron perdida. Luchaban con más retórica que balas.

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  3. El gato de Schrödinger12:14 a. m., junio 30, 2012

    Sr. Luri:

    Aunque no venga a cuento y no tenga relación con el tema de esta entrada, antes de que se me olvide quiero traerle aquí un delicioso epigrama sobre la filosofía. Su autor, la madre de Bertrand Russell:

    "What is mind? No matter.
    What is matter? Never mind."


    Fuente: "Portraits from Memory", de B. Russell. Leído en "De jardines ajenos", de A. Bioy Casares.

    No me diga que no es encantador. Como para ponerlo en la cabecera de un blog sobre filosofía.

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  4. Encantador sin duda, aunque viniendo del inmenso Bioy Casares, me parece que es lícito dudar de su autoría.

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  5. Ncesitaríamos de un Platón expulsando a poetas.
    Sin embargo, tengo fe en las palabras, a veces, muy pocas veces, pero menudo milagro la comunicación

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    1. Me parece que para que la palabra no derive en palabrazo algo previo a la palabra debe estar ya dado. El diálogo tiene lugar en un contexto de expectativas que el diálogo no ha creado.
      El diálogo tiende a acabar mal.

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  6. Sí, la propia humanidad como lo previo. Me refería a algo más sencillo que el diálogo que tiende a un fin que raramente alcanza, como demuestra Platón. Por ejemplo, la risa de dos personas que, a lo mejor, ni se conocen ante un juego de palabras irónico. Qué maravilla.

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  7. Sí, tienes razón... De hecho, seguimos leyendo a Homero y emocionándonos con Safo.

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  8. Por qué los filósofos de ahora no hacen gestos? Como Heráclito comiendo alfalfa en la asamblea, tantas anécdotas zen o Diógenes soltando un pollo desplumado en la Academia.
    Es más con Internet, móviles , etc., y eligiendo lugares estratégicos, creo que tendrían un éxito espectacular, que esta época lo tiene a huevo para hacer "practical words". Ese gesto "en toda la diana" es la perfección de la palabra, los discursos son una birria, hasta el más perfecto.

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