jAl parecer la mejor forma de viajar sin exceso de peso es en vehículos de dos ruedas (si por supuesto dejamos como punto y aparte los trenes de la India). Me quedo con dos imágenes, el hombre-matorral a pedales, quizá una forma de luchar contra el cambio climático y las mujeres enjauladas, quizá pensaron que cacareaban en exceso. Siempre es un placer asomarse a sus descubrimientos. Gracias por compartirlos.
vaya, me he acordado del día que mi madre compró una alfombra en Ikea y llegamos al parking (después de perdernos numerosas veces) y comprobamos con horror, que el monovolumen era pequeño para transporatarla.
Celia: Creo que están estudiando quitar puntos en el carnet de circulación a los que compran en Ikea, directamente, sin necesidad de pruebas complementarias.
No me habrás reconocido, claro, porque voy tapadita, pero soy la que va dentro del ataúd blanco metido de cualquier manera en la trasera del coche. Y fíjate si soy sufrida, que ni me he quejado. Besotes.
Viendo estas imágenes, Luri, reconozco que soy un inútil.
ResponderEliminarjAl parecer la mejor forma de viajar sin exceso de peso es en vehículos de dos ruedas (si por supuesto dejamos como punto y aparte los trenes de la India). Me quedo con dos imágenes, el hombre-matorral a pedales, quizá una forma de luchar contra el cambio climático y las mujeres enjauladas, quizá pensaron que cacareaban en exceso.
ResponderEliminarSiempre es un placer asomarse a sus descubrimientos.
Gracias por compartirlos.
vaya, me he acordado del día que mi madre compró una alfombra en Ikea y llegamos al parking (después de perdernos numerosas veces) y comprobamos con horror, que el monovolumen era pequeño para transporatarla.
ResponderEliminarLuis: Serçia a esto a lo que se refería D’Annunzio con su vivere pericolosamente"?
ResponderEliminarIsa: El hombre matorral, es efectivamente, una aportación impagable al diseño contemporáneo.
ResponderEliminarCelia: Creo que están estudiando quitar puntos en el carnet de circulación a los que compran en Ikea, directamente, sin necesidad de pruebas complementarias.
ResponderEliminarNo me habrás reconocido, claro, porque voy tapadita, pero soy la que va dentro del ataúd blanco metido de cualquier manera en la trasera del coche. Y fíjate si soy sufrida, que ni me he quejado. Besotes.
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