Siempre quize ver un cuento "a la antigua" rescatado del olvido, tan crudo como los que escribían antes. Es esa forma de mostrar la muerte y la mezcla de inseguridad/fantasía que se declara en ellos, una característica de los cuentos de culturas jóvenes, de las tribus, de los hombres de antes; quienes no padecían los mismos males que hoy abundan, no había en ellos problemas "del pensamiento" en lo que a sexualidad se refiere, ni depresiones así como las de ahora... y hay quien dijo una vez que si a los jóvenes se les dejase ver la muerte, el sexo y el nacimiento como algo completamente común y natural (y presenciarlos), estos tendrían la salud con la fortaleza de la gente antigua, pues es el quitarle un trozo al mundo lo que crea una imagen falsa, lo que entrega la impresión de vivir en un mundo irreal, absurdo y con falta de sentido. Si bien estos cuentos eran bastante fantasticos, no le quitaban ningún trozo a la realidad (solo añadian)...
Interesante reflexión, Alejandro. Pero quizás "antes" no había niños, sino "aún no adultos", que es distinto. El niño es, básicamente, un fenómeno reciente, con un gran componente comercial. No anterior al siglo XIX, en cualquier caso.
Y los niños están hasta el gorro de serlo. Aburridos, están. Ayer vi "300" (para mayores de 18 años, la reservan) con mi hijo de 13. Salía entusiasmado, ya anda buscando bibliografía sobre los griegos, los persas, Leónidas, Jerjes...
Lola: Vi "300" y me gustó. Además me pareció, en lo esencial muy griega. ¿Quién se atrevería en nuestro tiempo a ensalzar la "andreia" sin ser inmediatamente criticado de machista? Es sobre todo instructivo comparar a los espartanos con los soldados británicos apresados por los iraníes.
Estuve a punto de escribir un post sobre la película. Pero no me atreví a decir que ese canto a la "andreia" sólo lo mantenían en nuestros días los gays. De hecho la estética de la película tiene más de una lectura.
Coincido. Mientras la estaba viendo, pensé en cómo iban a disfrutar los gays con esta película. Y esta asociación da para mucho, eh, con respecto a nuestra época. Tiene enjundia.
Siempre quize ver un cuento "a la antigua" rescatado del olvido, tan crudo como los que escribían antes. Es esa forma de mostrar la muerte y la mezcla de inseguridad/fantasía que se declara en ellos, una característica de los cuentos de culturas jóvenes, de las tribus, de los hombres de antes; quienes no padecían los mismos males que hoy abundan, no había en ellos problemas "del pensamiento" en lo que a sexualidad se refiere, ni depresiones así como las de ahora... y hay quien dijo una vez que si a los jóvenes se les dejase ver la muerte, el sexo y el nacimiento como algo completamente común y natural (y presenciarlos), estos tendrían la salud con la fortaleza de la gente antigua, pues es el quitarle un trozo al mundo lo que crea una imagen falsa, lo que entrega la impresión de vivir en un mundo irreal, absurdo y con falta de sentido. Si bien estos cuentos eran bastante fantasticos, no le quitaban ningún trozo a la realidad (solo añadian)...
ResponderEliminarInteresante reflexión, Alejandro. Pero quizás "antes" no había niños, sino "aún no adultos", que es distinto. El niño es, básicamente, un fenómeno reciente, con un gran componente comercial. No anterior al siglo XIX, en cualquier caso.
ResponderEliminarY los niños están hasta el gorro de serlo. Aburridos, están.
ResponderEliminarAyer vi "300" (para mayores de 18 años, la reservan) con mi hijo de 13. Salía entusiasmado, ya anda buscando bibliografía sobre los griegos, los persas, Leónidas, Jerjes...
Lola
Lola: Vi "300" y me gustó. Además me pareció, en lo esencial muy griega. ¿Quién se atrevería en nuestro tiempo a ensalzar la "andreia" sin ser inmediatamente criticado de machista? Es sobre todo instructivo comparar a los espartanos con los soldados británicos apresados por los iraníes.
ResponderEliminarEstuve a punto de escribir un post sobre la película. Pero no me atreví a decir que ese canto a la "andreia" sólo lo mantenían en nuestros días los gays. De hecho la estética de la película tiene más de una lectura.
Coincido. Mientras la estaba viendo, pensé en cómo iban a disfrutar los gays con esta película. Y esta asociación da para mucho, eh, con respecto a nuestra época. Tiene enjundia.
ResponderEliminarLola