domingo, 2 de noviembre de 2025

Sobre la excelencia

Siempre me han resultado irresistibles las invitaciones a hacer algo que no he hecho nunca. Entendámonos, no se trata de lanzarme al vacío empujado por una pulsión suicida, sino de explorar vías que hasta ese momento estaban muy lejos de mi horizonte de intereses. Nunca he sentido miedo al decir que sí a una invitación arriesgada, sino emoción y unas ganas enormes de leer todo lo que pudiera sobre el asunto y de preguntar a los que saben. Lo último: Una empresa multinacional me pide que dé una charla a sus empleados sobre la excelencia. Y, por supuesto, ya estoy en máquinas, descubriendo mundos, preguntándome qué queda de la areté griega o de la virtus romana; cuál es la diferencia entre la excelencia artística y la tecnológica; por qué hemos abandonado la excelencia moral en los tiempos del «emotional turn»... Y lo más importante: ¿es la mediocridad un capital ignorado de potencial excelencia?  La jubilación está siendo para mí más emocionante, en muchos aspectos, que la juventud. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Sobre la excelencia

Siempre me han resultado irresistibles las invitaciones a hacer algo que no he hecho nunca. Entendámonos, no se trata de lanzarme al vacío e...