Transcribo íntegro un excelente artículo de Florentino Felgueroso y Luis Garicano, titulado "Alerta Roja Generación Ni-Ni: 750.000 jóvenes ni estudian ni trabajan". No creo que se pueda ni resumir ni tocar una coma. Lo que cuentan debería provocar inmediatamente una sacudida social de tal envergadura que decretáramos unánimemente el estado de emergencia nacional. Pero, ¡quiá! Si quieren que les diga la verdad, no tengo muchas esperanzas. Ha llovido tanto que nos hemos acostumbrado a vivir enfangados en este humedal. Hemos ido creando un sistema educativo profundamente clasista, que arroja a amplísimas capas de jóvenes al limbo de la indigencia intelectual y profesional en medio del cinismo colectivo. ¿Qué demonios nos pasa? Básicamente nos pasa que estamos prisioneros de nuestras buenas intenciones, porque el sistema educativo español es la única insitución que se evalúa por sus pretensiones y no por sus resultados. Y no hay institución en el mundo con más beatos por metro cuadrado que nuestra escuela. Miren los datos despacio y háganlo -es sólo un consejo- con la sospecha de que quizás de aquí a cinco años los recordaremos con nostalgia.
Alerta Roja Generación Ni-Ni: 750,000 jóvenes ni estudian ni trabajan
En un mundo dominado por las tecnologías de la información y en el que muchos procesos productivos menos avanzados se deslocalizarán hacia países en desarrollo, la formación adquiere cada día más importancia. Pues bien, de acuerdo con datos recientes de Eurostat, uno de cada tres jóvenes españoles de 18 a 24 años abandona el sistema educativo sin conseguir un título de enseñanza secundaria post-obligatoria, es decir, 1 millón de jóvenes. De los 33 países de EU y candidatos, sólo Turquía y Malta tenían una mayor proporción de jóvenes sin estudios secundarios y fuera del sistema educativo (ver Figura 1).
1. La evolución de estos datos no ha sufrido ningún avance hasta 2009
Los datos no han mejorado en 15 años: ya a mediados de los 90, una tercera parte de los jóvenes españoles abandonaba sus estudios. Desde entonces, ninguna mejora. Los demás países europeos han avanzado, y cómo. Las últimas estadísticas, las correspondientes al 2009, muestran que Turquía ha reducido su diferencial con España a la mitad en los últimos 10 años, con lo que si no hacemos algo al respecto en breve habrá convergido y seremos definitivamente los últimos de la clase. Portugal ya nos ha alcanzado cuando al inicio de esta década le sacábamos quince puntos. Más, ya casi doblamos a quienes tenemos por delante y entre los más avanzados, están países como Croacia, Polonia, Eslovaquia, la República Checa.
2. Los malos resultados no se deben al número de emigrantes.
Algunas explicaciones se han apoyado en el efecto de la inmigración, con la llegada de una población extranjera menos formada y con una mayor tasa de abandono. Pero esta no parece ser razón suficiente. Todo lo contrario, es precisamente en este colectivo en el que si se ha observado una reducción mayor del abandono. (Ver el Gráfico 3). Aunque este cambio bien pudiera ser debido simplemente al frenazo en la llegada de inmigrantes o que el retorno se haya concentrado en personas con mayor propensión al abandono o menor nivel educativo.
3. Ni siquiera la crisis, y la falta de perspectivas de los jóvenes, han empujado a los jóvenes a las aulas
Durante la fase expansiva, se le pudo achacar la culpa del abandono escolar al tirón de sectores que tales como la construcción pudieron absorber con salarios atractivos y trabajo a destajo a jóvenes, sin necesidad de iniciación profesional previa. Pero ya han pasado tres años de crisis, y sí, habrá aumentado el número de matriculados, pero no lo suficiente para concluir que, gracias a ésta, se está produciendo un cambio notable de tendencia. Seguimos prácticamente en las mismas (ver el Gráfico 3 arriba).
Hay lugar para cierto optimismo en los datos que ha publicado recientemente el Ministerio de Educación en el avance de los datos del curso escolar. Según estos datos la proporción de estudiantes en Bachillerato ha aumentado en un 1.4% en FP de grado medio en un 6.4%. Este aumento parece claramente relacionarse con la crisis, pero no es, del orden de magnitud necesario para solucionar el problema.
4. Ni-Ni: 750,000 jóvenes ni estudian ni trabajan
Y no es porque los jóvenes estén trabajando. No. Como el Gráfico 4 muestra, de los 3,5 millones (3.493.992) de jóvenes entre 18 y 24, 750,000 ni estudian ni trabajan, frente a 500,000 en el 2005. El gráfico muestra otra realidad preocupante, que tiene poco que ver con la crisis: la pirámide demográfica invertida muestra sus preocupantes efectos, al pasar los jóvenes de 3,9 millones a 3,5 millones. Juntando los dos efectos, la caida de la participación y la caida demográfica, los jóvenes que estudian o trabajan han caído en 636000 en 5 años.
5. La ESO no es suficiente
Y si, las tasas de matriculación han aumentado, en especial entre los 16-17 años; pero la tasa de abandono entre los 18 y los 24 parece mantenerse prácticamente insensible, sugiriendo que estos estudiantes no vuelven a la escuela. Así, la crisis multiplica el tamaño del grupo de jóvenes sin estudios secundarios post-obligatorios que NI estudian NI trabajan. Esta proporción ya alcanza el 30% entre los jóvenes de 18 a 20 años y el 40% entre los de 21-24 años con este nivel de estudios. Quizás sea uno de los indicadores más alarmantes de esta crisis, señal de que poquito están cambiando las cosas, de que el “cambio de modelo productivo” va para largo.
La población 18 a 24 años que no han conseguido o no ha ido más allá del título de Enseñanza Secundaria Obligatoria va a encontrar difícil adaptarse a la economía del conocimiento. Este grupo se compone de 1,6m de personas, de los cuales 1 m no está estudiando, y de estos 540,000 ni estudian ni trabajan. Del millón que no estudian sólo el 52% tiene el título de ESO y sólo un 1.7% ha recibido una iniciación de formación para una profesión (ya sea vía Garantía social, Programas de iniciación profesional u otros programas de inserción profesional no reglada). Los datos también ponen en evidencia lo exigua que es la formación no reglada, principalmente la formación ocupacional: sólo asisten a la misma el 10% de este colectivo.
6. Conclusión: La FP, el reto eterno del nuevo modelo económico.
En definitiva, los datos asustan, por su magnitud, y sobre todo por sus implicaciones para la economía española. Con el sistema educativo actual, la mayor parte de los “drop-out”, no han recibido educación reglada para ejercer una profesión. Muchos, un 85.2%, tienen una experiencia laboral, probablemente recibida en sectores, como la construcción, que no requieren de preparación inicial, al poder adquirirse con la práctica en el puesto de trabajo. Esta formación no será suficiente para que se puedan mover laboralmente pasado este período de crisis. Podrán tener capital humano específico de sectores o empresas ya caducos, pero no es suficiente, y, difícilmente podrán adaptarse a unas nuevas tecnologías que no dejan de ser complementarias de la educación.
Menos aún llegarán a técnicos y profesionales y podrán ayudar a cubrir nuestro déficit de en estas ocupaciones en comparación con la mayoría de los países europeos, déficit que se puede cifrar entre unos 3 y 5 millones si nos comparamos con Francia para arriba.
Aún así, una de las principales razones para el abandono, incluso en estos momentos de crisis, muy probablemente no sea la búsqueda de empleo. Según la Encuesta de transición educativo formativa e inserción laboral , realizada para el período 2001-2005, en época de bonanza, sólo un 8% de los abandonos se debía al hecho de haber encontrado trabajo y un 21% por preferir buscar trabajo en lugar de seguir estudiando. Bastante menos que la suma de otros motivos relacionados con la falta de motivación o la obtención de malos resultados escolares.
La mayoría de los drop-outs no tienen una mínima formación profesional porque el actual sistema lo ha dejado para los estudios intermedios o superiores. Pero además, a pesar de la mayor demanda registrada en los últimos años, le dedicamos aún escasos recursos. En el Education at the Glance de la OCDE del año 2008, quedó claro que la proporción de alumnos de FP en los niveles intermedios, aunque haya aumentado en la última década, sigue siendo sensiblemente inferior a la mayoría de los países de la OCDE, más aún si la ponderamos por la tasa de abandono. No puede ser sólo un problema de demanda cuando, en este mismo curso, 40.000 alumnos pueden quedarse sin realizar estudios de FP por escasez de oferta. Por otra parte, este mismo estudio de la OCDE también nos dejaba en muy mal lugar en relación con la implantación de la formación dual, indicador de las implicación de las empresas en el sistema de formación profesional
En definitiva. Lo más grave de esta situación es el estancamiento. Es difícil entender cómo la Reforma Educativa, en particular, la de la FP, cuyo primer objetivo debería ser centrar los esfuerzos en reducir el abandono escolar, se puede quedar empantanada, y, alargarse tan eternamente.
Para llorar. El encefalograma plano del gráfico 3 se las trae. Te enlazo, mal que bien.
ResponderEliminarTodo el mundo se escandaliza cuando se percata de los pesimos resultados escolares de los ni-ni, pero nadie apunta ni motivos ni soluciones. En realidad se acepta la situacion y ya esta.
ResponderEliminarPor cierto, que hay de clasista en todo esto? La enseñanza publica en España tiene mas medios, o al menos mayor coste, que la privada mas empingorotada, asi que no se ha escatimada nada a los ni-nis. Donde esta el clasismo?
Con permiso voy a enlazar esto que creo que no se le está dando la importancia que tiene y, sobre todo, tendrá en el futuro.
ResponderEliminarUn saludo
(creo que ya vine y ya lo pregunté ¿?. ¿Sois de Ocata de El Masnou? o nada que ver)
Carlos: Ocatí... propugnando la integración de Ocata (que pasaría a denominarse Okata) en el Reyno de Navarra.
ResponderEliminarRamon: En los resultados
ResponderEliminarTras referenciarlo en Nauscopio, he escrito:
ResponderEliminar[ Desde el año 1997 el abandono escolar no baja, siendo el 30% el suelo.
Pregunta: ¿Quiénes gobernaban y gobiernan en esos años? PP de Aznar y PSOE de Zapatero, sin olvidar a los nacionalistas. ]
Próximamente tendremos elecciones autonómicas en Cataluña. ¿Alguien votará teniendo en cuenta lo aquí explicado? Pues eso, el mal radica en la sociedad al no exigir a sus representantes. Es lo que sucede cuando se antepone el sectarismo a cualquier otra consideración.
Gracias por el dato (solo chafardeo y curiosidad) voy a buscaros y enterarme un poco.
ResponderEliminarLuis Garicano siempre es de lectura obligatoria.
ResponderEliminarSin desmerecer los problemas del sistema educatorio, habria que preguntarse que es lo que realmente hacen los ni-ni. No nos olvidemos que vivimos en un pais con una saludable economia sumergida...
La gestion de un problema, como el de los ni-nis, puede ser clasista, pero el resultado es solo una cifra. Creo que hay ni-nis por una razon mas fácil: en España sobran trabajadores, y esta sensacion va bajando por la escalera de edades: quien tiene un hermano de 25 años licenciado y en el paro, y un primo de 30, que hizo FP pero tambien en paro, se pregunta para que va a licenciarse o a sacar un titulo de FP. El drama español es que sobra gente. Y porque sobra gente? Pues segun los que saben de eso, sobra gente porque una estructura productiva ineficaz hace que sea mas barato importar que producir. Se parece mucho a lo que pasó en Argentina en los primeros años 2000s. Volviendo al tema del clasismo, me estoy encontrando con ni-nis entre gentes de la mas variada condicion, no son todos ni casi todos residentes en barrios populares, tampoco en barrios de mala nota. Hay de todo. El ni-nismo es un fenomeno interclasista.
ResponderEliminarAixò ens hauria de fer reaccionar a tots, però, com diu el Ramon, ens escandalitzem i ens limitem a no fer res.
ResponderEliminarEn resposta a rA i per amics i amigues que tenen fills ni-ni: o jeuen o es passen el dia rondant per qui sap on o fan feinetes en museus municipals en programes educatius simplement amb l'ESO i no els interessa fer res més. Això sí, aquests són fills de famílies estructurades. ´
Ramon: Cuando hablo de clasismo me refiero básicamente a la incapacidad del sistema escolar para dotar a los alumnos de las clases bajas de las mínimas herramientas de subsistencia intelectual. Estadíticamente la cosa está bastante clara: podemos prever quienes se sacarán el título de la ESO simplemente teniendo en cuenta el número de libros (libros leídos, claro) que hay en una casa. En vez de exigencia les damos paternalismo light.
ResponderEliminarEl sistema educativo español es sexista y clasista y además tiene unos indices de fracaso y abandono de los más altos del mundo. Que, tanto el Gobierno como las fuerzas políticas y sindicales no hayan reconocido la gravedad del problema es una muestra más de la distancia existente entre la ciudadanía y quienes dicen representarnos.
ResponderEliminarLa escuela en este sentido no está mejor que el mercado de trabajo donde hay 4.500.000 de parados. La comparación no es ociosa porque finalmente una cosa y la otra están relacionadas y ambas dejan al descubierto sobre qué bases más endebles pretendían algunos construir la imagen de España como la sociedad más moderna del mundo mundial.
Muy interesante Sr. Luri. Me lo llevo para facebook.
ResponderEliminarUn saludo
Muy mal lo estamos haciendo si la mayoría abandonan por falta de motivación o malas notas. Y también, muy mal lo estamos haciendo si la mayoría de los que estan en el sistema prefieren un trabajo de funcionario ( creo que que alguna encuesta los cifraba en un 60% ). Aplastamos sus aspiraciones.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con el autor sobre la necesidad de prestigiar y invertir en los Ciclos Formativos. Hay algunos buenísimos ( como los sanitarios, laboratorio o los de comercio) y ajustados a las necesidades del mercado laboral. Esto ayudaría a disminuir en parte los NI-NI.