¡Bueno! ¡Esto es de lo más inesperado!
¡Brillante!Debería ilustrarnos más a menudo.Claro que entonces ya no sería un regalo.Ay.
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Hasta el muy socarrón Voltaire tiene sus momentos de ternura. Aparecen en los pasajes más insospechados de su obra. Por ejemplo en el Diccio...
¡Bueno! ¡Esto es de lo más inesperado!
ResponderEliminar¡Brillante!
ResponderEliminarDebería ilustrarnos más a menudo.
Claro que entonces ya no sería un regalo.
Ay.