Así como entre los judíos no es nada raro encontrarse con ateos lealmente judíos, entre los cristianos, lo habitual es que el ateo se dedique a militar activamente contra el cristianismo, y normalmente lo haga con un celo católico y una probidad que para sí quisieran muchos misioneros cristianos. Tengo con frecuencia la impresión de que los ateos poscristianos llevan su militancia prometeica hasta el extremo de que si Dios existiera no descansarían hasta matarlo. Lo digo de otra manera: El ateo poscristiano no es que niegue a Dios, es que se llevaría un disgustazo si Dios existiera.
Yo me considero un ateo cristiano. Me gusta mi tradición cultural. Me gustan los Cristos románicos, las vírgenes góticas, los ángeles barrocos. Me gusta enterrar a los míos en un camposanto con un ritual religioso. Me gusta la Navidad y la Semana Santa, hasta el miércoles de ceniza. Me emociona profundamente El crucificado que le grita al cielo ese descarnado “¿Por qué me has abandonado?” que hace del cristianismo más una religión de la duda que de la fe ciega. Entre los cristianos el primero en dudar de sí mismo fue su fundador.
Hay una experiencia específica del cristiano que se encuentra en el gesto de arrodillarse a orar a un Dios coronado de espinas, que me parece de una profundidad filosóficamente sagrada. Así, arrodillado, establece el cristiano una relación con el infinito que no está mediada por una orden, como en el judaísmo o el Islam, ni por la lógica del pensamiento, como en la filosofía; sino por un gesto absoluto de amor. El cristiano que se arrodilla se ennoblece.
Todo esto viene a cuento del libro –del librito- que devoré ayer por la noche, “La feliz desesperanza”, de André Comte-Sponville, donde encontré a un hermano en el Señor.
Gregorio: Un apunte interesantísimo. No puedo estar más de acuerdo, y tampoco puedo más que alegrarme de haber encontrado un título que nunca había sabido hallar. Sin ser cristiano, sin creer en la doctrina, me siento absolutamente extraño a las invectivas parroquiales de lo que hoy denominan ambiguamente "laicismo" (cuando en realidad quieren decir: anticristianismo). Soy también un "ateo cristiano", y suscribo totalmente todo lo que para usted el cristianismo manifiesta. Me resulta embaucadora y confusa la actual manía de hablar de´"la religión", sin más, cuando existen diferencias empíricas y de sentido tan acusadas entre unas religiones y otras. Frente al uso metafísifco del genérico, creo que existen "religiones", y no todas manifiestan lo mismo ni son equiparables.
ResponderEliminarEn cuanto a las razones de ese ateísmo anticristiano militante, no sé encontrarle otra motivación que la de sustituir una iglesia por otra: el fenómeno moderno de transferir la sacralidad del ámbito religioso al político lleva a querer eliminar el cristianismo para poner en su lugar una nueva religión llamada "política" ;una nueva religión dotada de nuevas ceremonias y rituales, nuevas promesas y nuevos dioses y objetos sagrados: Igualdad, Ciudadanía, Nación, Revolución, Proletariado, y, sobre todo, Estado.
Precisamente, hace dos semanas publiqué en el "Diario de Feacia" una entrada tratando el asunto de la nueva religión anticristiana. Allí citaba un pequeño texto de Burke sobre el asunto que usted trata y que no me resisto a transcribir (pidiendo perdón por la extensión de este comentario):
"La camarilla literaria había formado hace algunos años algo semejante a un plan oficial para la destrucción de la religión cristiana. Persiguieron ese objetivo con un celo como el que sólo habían mostrado hasta entonces los propagadores de algún sistema de creencias. Estaban poseídos por un espíritu de proselitismo de la más fanática condición, y a partir de eso, mediante un fácil proceso, con un ánimo de persecución acorde con sus medios. (...) Estos padres ateos tienen un fanatismo propio y han aprendido a hablar contra los frailes con el talante de los frailes. Pero en algunas cosas son hombres de mundo. Acuden a los recursos de la intriga para suplir las deficiencias de la argumentación y del ingenio. A este sistema de monopolio literario se unió una industria incansable dedicada a boicotear y desacreditar en todos los sentidos y por todos los medios a aquellos que no se adhiriesen a su actuación. Para los que han observado el espíritu que anima su conducta hace mucho que está claro que lo único que querían era el poder para convertir la intolerancia de la lengua y de la pluma en una persecución que afectaría a la propiedad, la libertad y la vida".
Citado en Michael Burleigh, Poder terrenal; Taurus , 2005
Borja: Resulta altamente instructivo analizar el vocabulario polémico que Thomas Paine emplea en su crítica a Burke. Es, básicamente, un vocabulario cristiano. Entre nosotros, me parece a mi, el ateísmo tiene la forma de una desacralización del vocabulario cristiano y, en primer lugar, del propio concepto de verdad.
ResponderEliminarEl exceso de claridad mental del apostolado ateo tiene algo de místico.
Quedémonos, pues, en la penumbra del ateísmo cristiano, Borja, en un lugar acogedor. Y tiene la enorme ventaja de que no nos anima a ser misioneros.
Pues creo que me uno al clan, don Gregorio.
ResponderEliminarPero que conste, ya que hablaba usted de la cultura hace nada... que el arte, el imaginario, y el ritual es cultural, porque circula por la sangre. Ya sabe usted... ese fluido que transporta oxígeno y demás al cerebro para que éste siga funcionando. Y allí mora la memoria y se tiene que ''re-sentir''de algún modo.
En un tiempo fui una atea ignorante (mi ignorancia sólo ha mejorado en el sentido del respeto por la libertad de creencias del otro) y obcecada como aquella con la que tuve ocasión de discutir hace poco... ¡No sé qué les molesta tanto de la fe! No sé qué me molestaba a mí tanto antes. Pero qué absurdo cuando se escucha en otra boca que repite los argumentos de los dieciséis... Por ahí me da que van los tiros, un poco también
En fin, apurada. Que ha venido, por fin, mi amiga María y llevo muuuucho tiempo sin verla... le dejo, ya.
Besos
KSNDR
Aunque con ciertas reservas menores, que ni merece la pena señalar en estos momentos, me aproximo bastante a esta postura.
ResponderEliminarY un apunte:
http://www.economist.com/displaystory.cfm?story_id=10875666
Destaco el último párrafo:
That quip, though, makes an intriguing point. Evolutionary biologists tend to be atheists, and most would be surprised if the scientific investigation of religion did not end up supporting their point of view. But if a propensity to religious behaviour really is an evolved trait, then they have talked themselves into a position where they cannot benefit from it, much as a sceptic cannot benefit from the placebo effect of homeopathy. Maybe, therefore, it is God who will have the last laugh after all—whether He actually exists or not.
Saludos cordiales
Doña Kasandra: Mientras podamos aprender, no hemos dicho la última palabra sobre nuestras convicciones. ¿No es eso fantástico?
ResponderEliminarRecuerdos a su amiga.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarESTE es el artículo que propone Antonio
ResponderEliminarAntonio: Los intentos de naturalizar por completo la vida humana dan por supuesto que el mundo de las cosas humanas es idéntico al de las cosas no humanas y que, por lo tanto debe ser estudiado de la misma manera. Pero en realidad quienes esto proponen en lugar de ser coherentes con sus propósitos se dedican a descalificar a diestro y a siniestro en cuanto entran en el tema.
ResponderEliminarQuizás la única postura científica seria respecto a las cuestiones humanas sea la aceptación de que forman una parte del Todo que no es reducible al Todo. El Todo no tiene por qué ser noéticamente homogéneo.
Bueno, Gregorio, pero es que para que la comparación entre ateos judíos y cristianos tuviera validez igual había que analizar las distintas relaciones de cada religión y del clero con el poder temporal.
ResponderEliminarJ: entiendo lo que quieres decir, pero me parece que las tres religiones se definen básicamente por su origen. En el Islam y en el judaísmo hay una entrega cerrada de la ley y esta entrega está hecha para que no se pueda modificar ni una coma de la misma. En el cristianismo propiamente hablando no hay ley. Me puedes decir que no han faltado en el cristianismo guardianes dogmáticos de la ley, cosa que es obvia, pero eso no el quita peso al argumento fundador. La "reductio ad hominem" tiene el valor que tiene, peor no más.
ResponderEliminarFalso. Pero por no corregir la frase, mejor la expresaré en el sentido opuesto.
ResponderEliminarLos intentos de no naturalizar por completo la vida humana dan por supuesto que el mundo de las cosas humanas es de alguna forma "esencialmente" distinto al de las cosas no humanas y que, por lo tanto debe ser estudiado incorporando algún que otro elemento "trascendentalista".
(more or less)
Lo que comparto es la crítica a este "laicismo radical" que se quiere naturalista y traiciona sus propios presupuestos.
Saludos cordiales.
¿Y no hay un puerto intermedio entre el «ateísmo cristinano» y el «militante»? Ambos me son conocidos y en ambos me siento a gusto. Son como «papá y mamá».
ResponderEliminarJ... con el Judas, eso es hablar como así habló Zaratustra. Don Gregorio. Eso es fantástico no del todo. Eso es sublime. Un abrazo.
ResponderEliminarKSNDR
¡Ah, por cierto! Le explico por qué siempre le firmo anónimo... porque hay mucho anónimo sucio y yo quiero ser una anónima limpia. Es para dar ejemplo, en el Café. Para que vea que ya me estoy corrigiendo y ya no insulto.
Le voy a hacer una pregunta sobre lo que me dijo... pero la estoy pensando. Sobre lo de la fuente más ''fidedigna sobre la Atlántida (acercada)''. Yo lo que quiero saber es por ejemplo si es de esos filósofos como ¿Strauss? que le harían la cama a alguien a sus espaldas... Porque si fuera así... yo necesito saberlo.
Y no me diga que no le busque tres pies al gato... porque es mucho peor... lo que estoy buscando son las siete vidas... ¿o eran nueve?
ResponderEliminarKSNDR
¡No sé qué les molesta tanto de la fe! No sé qué me molestaba a mí tanto antes.
ResponderEliminarLa sinceridad de este "no sé" es encantadora. Yo tampoco lo sé.
Antonio: Le acepto en parte la enmienda. Sólo en parte. La naturalización completa de la vida humana debería aceptar que la vida humana es una vida contra natura.
ResponderEliminarIrich: Me uno a sus palabras sobre doña Kasandra.
ResponderEliminar"la vida humana es una vida contra natura"
ResponderEliminarLa suya es, sin duda, una filosofía contra natura.
Nada de que extrañarse, por otra parte. Usted mismo reconoce que lo suyo es superficialidad.
Lo encuentro coherente al menos.
Antonio se refiere a un comentario de un post anterior que tenía como destinatario a L. de A. Lo transcribo y que cada quien juzgue lo que crea vonveniente:
ResponderEliminar"Al Geist pongo por testigo, Señor L. de A., que todo lo que pretendo filosóficamente en este momento de mi vida es aprender a ver lo que hay en la superficie de las cosas. La verdad (la physis), como el alma, es una cuestión de epidermis, lo cual obviamente, no le resta profundidad a la verdad ni, mucho menos, al alma".
Eso es. Creo que se entiende perfectamente pero se puede apuntalar con esto otro:
ResponderEliminarYo, ingenuo de mi, creo que en los asuntos humanos la descripción fenomenológica es la más científica, porque nos muestra con precisión todo cuanto se encuentra en la superficie. ¿Cómo entender, si no, lo distinta que es una vaca en la India y en el Asador Donostiarra?
Respecto a la democracia y los poltologos, creo que la gente corriente tiene toda la razón cuando define a los unos y a la otra a partir de lo que cree que son.
¿Y qué pasa si dos personas, de entre la gente corriente, tiene opiniones distintas sobre esas u otras cuestiones?
Pues que todos tienen "su" razón. ¡Y tan panchos!
Por supuesto, no es con este tipo de filosofía ("natural", desde luego, como cuando uno piensa en algo "espontáneo") con la que el ser humano ha logrado ciertos conocimientos objetivos sobre la realidad del mundo.
Esta respuesta de Eduardo puede valer.
No voy a ser yo la que critique la tradición cultural cristiana que me parece riquisima y de una plástica muy hermosa , me pilla embobada con el cristo Velazqueño en pleno Barroco , pero mi espíritu escéptico se inclina analizar las relaciones del poder civil y religioso cristiano de una manera aséptica , fuera de los "dominios de la fe ".Creo que el problema es tan solo de regulación" moral " de la sociedad , una competición entre el poder político y el religioso , algo de lo que apunta Borja en su comentario, al fin y el cabo ambos ordenamientos solo son meras reglas de convivencia , eso si con poderes coercitivos diferentes
ResponderEliminarAntonio: ¿De verdad cree usted que las opiniones no tienen relevancia en política?
ResponderEliminarMe resulta absolutamente incomprensible que se pueda pretender hacer un análisis serio de lo político despreciando las opiniones que no tengan consistencia científica.
Peggy: Pero fue Cristo quien habló de dar al César lo que es del César.
ResponderEliminarPor supuesto creo que en política las opiniones, sobre todo las de algunas personas, son relevantes.
ResponderEliminarY es un medio en el que pueden prosperar opiniones perfectamente anticientíficas. También fenomenológicas.
Eso no implica que "la verdad sea una cuestión de epidermis".
Estoy de acuerdo con Peggy (si la he entendido bien).
ResponderEliminarLa enseñanza en valores morales no debería quedar al cargo de una única fuente, ya sea religiosa o laica, de obligado suministro para todo el mundo.
Si hemos invertido tanto tiempo y esfuerzo en retirar la obligatoriedad de recibir la educación moral de la Iglesia a través del sistema público de enseñanza ahora no vamos a permitir pasivamente que la vacante sea ocupada por una especie de Nueva Iglesia Laica, con sus propios dogmas.
No hay horror vacui.
Mi tesis es que no se entiende bien qué puede significar eso de la separación Iglesia-Estado sin que implique complicaciones e incluso contradicciones. En muchas discusiones lo habitual es interpretar la consigna en su sentido literal (nada extraño, por otra parte), esto es, echar fuera a la Iglesia Católica pero sin preocuparse por impedir su sustitución por un poder equivalente siempre que sea laico. Una masonería podría valer.
Yo digo que el mensaje
— Dad al césar lo que es del césar y a Dios lo que es de Dios (Mt 22, 21; Mc 12, 17; Lc 20, 25)
a día de hoy no sirve en esta forma ya anticuada.
Su reformulación actual, y que sirve igualmente para los tiempos de Jesús, es que hay que prohibir al Estado impartir valores morales a los ciudadanos. Es la separación Estado-moral lo que cuenta.
Otra forma de enfocar la cuestión, lo más indicado en mi opinión, sería liberalizar el sector. Así podría reintroducirse (o no) sin rechazo social la educación en valores desde la propia escuela. Distintos modelos en distintos centros según demanda de los interesados. Por ejemplo en unos centros la moral católica y en otros la «salsa marinera».
¿A qué le tienen miedo? ¿A que los padres no sepan hacerlo igual de bien, o incluso mejor, que un grupo de funcionarios del Estado y pedagogos contratados discrecionalmente?
Eso respetaría tanto el art. 16.3 de nuestra Constitución como el 14.
Pero claro, haría falta un Estado con poderes claramente limitados. Mucho más de lo que están en la actualidad.
Respecto a este “laicismo radical” tan de moda últimamente
http://www.outono.net/elentir/?p=2372
sólo quiero señalar que su supuesta “radicalidad” se interrumpe bruscamente a la hora de recaudar impuestos.
Porque, vamos a ver, si se trata de expulsar a la Iglesia del Estado ra-di-cal-men-te…. lo propio sería suprimir todo tipo de subvenciones y de recaudaciones, digo yo.
Ya , Gregorio , y España constitucionalmente es un estado aconfesional y ya ve , cuantas intersecciones y conflictos se generan
ResponderEliminarHombre, yo estaba hablando de la vivencia personal de un mensaje de un señor realmente singular del siglo I de nuestra era llamado Jesús.
ResponderEliminarPero si tenemos que traer la cuestión hasta el presente, me temo que también vamos a divergir aquí. Me parece claro que no hay estado que no disponga de una mitología nacional. Para empezar el propio concepto de identidad nacional es un mito no menos sorprendente que el de la Inmaculada Concepción.
Aceptar la política es aceptar mitos fundadores.
Podemos decidir que la religión ha perdido verosimilitud como mito fundador de la copertenencia política. Si es así, hay que andar con cuidado, conviene tener a mano algún sustituto.
Antonio: Respecto al valor de las opiniones en política: Su peso no viene determinado por su consistencia lógica, sino por el hecho de que haya alguien dispuesto a dar su vida por ella.
ResponderEliminarY normalmente quienes actúan así son poco sensibles a los argumentos lógicos.
Este es un hecho que se encuentra en la superficie de la política. Y no es nada trivial.
Mire usted: Yo le doy tanta relevancia a las opiniones que creo que, como sostenía Platón, la ciudad es la caverna.
Lo cual, obviamente, creo que es algo más que una mera opinión.
Otra cosa más: Cuanbdo hablo de "fenomenología" política no me refiero a ninguna metodología paracientífica, sino a la capacidad de atender a las cosas tal y como funcionan en el día a día, es decir, en la superficie, sin despreciar los hechos condenable por el mero hecho de que a mi me parezcan condenables. El terrorismo islámico me parece absolutamente condenable, pero también un hecho a estudiar con la mayor objetividad posible.
ResponderEliminarYo, desde luego, no busco ningún mito fundador ni rellenar de contenido la tan manida cuestión de la "identidad nacional".
ResponderEliminarLo único que pretendo la política permita un espacio de desenvolvimiento individual lo más amplio posible.
“Si a mí me unen el nacimiento y la libre decisión con un Estado, a cuyas bienhechoras leyes me someto, leyes que no sustraen de mi libertad más de lo que es necesario para el bien de todos, entonces yo llamo a ese Estado mi patria”
- Thomas Abbt (1738-1766)
De momento, bien que la considero una "herramienta" claramente mejorable, con bastantes defectos, tenemos nuestra Constitución. Para empezar.
Usted hablaba de "la verdad" y de la "filosofía" en general. No sólo en política. A menos que ahora me quiera venir usted con eso de que "todo es política".
ResponderEliminarMire, su postura me parece perfectamente legítima, por baja que sea su productividad. Quédese con ella, si tanto le satisface (fenomenológicamente hablando).
No pretendo porfiar con usted.
Saludos cordiales.
Brillante post, Gregorio
ResponderEliminarPese al libro, dice este mismo autor en una entrevista:
ResponderEliminar“Después de la vida no hay ‘na-da’. O sea, lo mismo que antes del nacimiento. A nadie le da miedo pensar qué era antes de ser concebido”.
Ya se sabe que en las entrevistas inofensivas sube a la superfície lo que no se deja salir en los libros. Esto, que es dicho en una entrevista no en un libro, coloca a este filosofín directamente hacia el universo de Artaud.
Curiosamente hace un momento rocé este tema en mi blog...
ResponderEliminarEl trato del "ateísmo militante" hacia el cristianismo se debe a que considera la religión como un simple mal gusto. Si hablan de la religión en términos generales es por que hablar de todas a la vez con los detalles de cada una es una tarea monumental y excesiva.
Comparto sin duda que la imagen que proyecta este ateísmo es algo agresiva, pero solo será así mientras la religión no se considere un simple tema de sobremesa y un gusto personal.
Sobre la legislación, bueno, la educación es cosa de la democracia ; un ciudadano puede discutir ya sea cristiano o ateo y eso no cuenta, por ende, el ateísmo no debe considerarse un partido político y si algunos inescrupulosos quieren fundamentar un partido en el ateísmo es solo una maniobra barata.
Saludos.
Antonio: ¡Qué orgullosamente ignorante es usted! Debería darse una vuelta por las universidades norteamericanas.
ResponderEliminarPau: Gracias. Lo curioso es que un post como este, que sólo pretende ser una manifestación pública del impacto de una lectura, sea capaz de cabrear a los levantiscos.
ResponderEliminarEnrri: Esa es exactamente la postura de Comte-Sponville. De ahí que la palabra "desesperanza" aparezca el título de su libro. Es un ateo. Pero es un ateo cristiano que no tiene intención de utilizar el ateísmo para rebajar la densidad de la vida.
ResponderEliminarAlejandro: Dice usted que "el trato del "ateísmo militante" hacia el cristianismo se debe a que considera la religión como un simple mal gusto". No creo que sea así. Más bien me parece que lo que no acepta es que ofrezca una doctrina reconfortante. El ateísmo militante quiere la exclusiva de la oferta de consuelo y desconsuelo. No es un ateísmo teórico, sino terapéutico.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDe mal en peor, don Gregorio. Y ya es la segunda vez que me insulta en su blog.
ResponderEliminarPierde usted la compostura fácilmente.
Verá, no es que conozca las universidades americanas sólo de oídas, investigué en una de ellas iniciando mi tesis doctoral.
¿Quién es aquí el ignorante y el orgulloso?
No digamos levantisco.
Venga, respire hondo y tranquilícese. Que no es para tanto.
Don Antonio: Líbreme Dios de pretender insultarlo. Sólo me limitaba a definirlo.
ResponderEliminarPues ya ve lo mal que lo hace.
ResponderEliminarPero, y volvemos al tema ya recurrente, es bien normal siendo usted tan "epidérmico".
Se queda en lo superficial, y además se complace en ello.
Normal que se equivoque en sus "definiciones" y caiga usted en el insulto fácil e intempestivo.
Saludos cordiales y repito estar básicamente de acuerdo con usted en el tema objeto de este post, salvadas ciertas diferencias menores.
Lo que sí es digno de estudio es porqué el aquí llamado ateísmo militante anticristiano es luego menos ateísmo y menos militante respecto al islam.
ResponderEliminarSinceramente Don gregorio, el ateísmo militante es la respuesta al religioso militante. Usted recuerde las tantas "cositas" que resultan un poquito molestas de la religión. Vea usted que la misma palabra a-teo lo dice.
ResponderEliminarSaludos.
!!!!!!!!!!
ResponderEliminarMagnífico post y brillante polémica posterior.
ResponderEliminarQuiero solo decir algo acerca del inductor del post. Lo tengo por una especia de hermano epsiritual: Compte Sponville, desde su Diccionanrio Filosófico, es pata mi un excelente amigo con el que me entiendo muy a menudo y muy bien.
¿Te imaginas una larga tertulia con Comte-Sponville y Lucrecio? Intuyo que también tienes a ambos por "hermanos en el Señor".
ResponderEliminarMe incorporo tarde a un tema que me interesa mucho. Aunque entiendo y valoro estéticamente la postura de don Gregorio (por lo mismo que me deleito en leer a Chesterton o a Cristina Campo), me encuentro más a gusto con el ateísmo del iracundo Ferlosio, ferviente blasfemador que se niega a dejarle la figura del Cristo a los creyentes y que observa, en un omento de excepcional lucidez, cómo los teólogos fingen encarnizarse en la defensa de la existencia de Dios para no tener que discutir la cuestión mucho más grave de Su bondad.
ResponderEliminarCreo con F que la idea de un dios personal es maligna antes de ser verdadera o falsa, y que se la debe combatir con saña intelectual (no reñida, claro está, con el respeto y blabla).
Ahora bien, de acuerdo en rechazar a los ateos de campanario, tristes y aburridos como curas (como curas tristes y aburridos).
ResponderEliminarIgnacio: A mi en realidad los que me dan miendo no son en si mismos ni los creyentes ni los ateos, sino los que empeñan en convertirnos o bien a una fe religosa (muchos cristianos han expandido la fe a cristazo limpio) o bien la fe en el ateísmo (estará usted conmigo que no han faltado los dispuestos a usar el procedimiento de eliminación pura y simple de los religiosos).
ResponderEliminarLo que me pregunto es si, sea la que sea la postura de los cristianos (que, por cierto, me parece muy diversa) se puede mantener una relación de estima atea hacia Cristo.
Eso es, creo entender, lo que pedía Ferlosio a voces: "¡cómo que no me vais a dejar tocar al Cristo, en nombre de qué os arrogáis la exclusiva!"
ResponderEliminarA mí más que Cristo (que si en algo me genera desacuerdo es en la idea del perdón universal, que me parece no está hecho para el ser humano) me preocupa Dios. La noción de un padre todopoderoso que tiene plena consciencia de lo que hace y siente y padece la encuentro intelectualmente obscena por contradictoria y absurda, y por otro lado su figura me invalida cualquier acuerdo moral que pueda tener con los cristianos: el fundamento de su moral es la voluntad divina, y el de la mía una trabajosa indagación colectiva, un proceso interminable de prueba y error.
Lo que pasa es que el pensamiento cristiano está hecho en gran parte por hombres buenos e inteligentes, de ahí los subterfugios tipo "Dios no puede querer el mal", que en el fondo sirven para traer a los creyentes a un punto más cercano al de los ateos, a elaborar la moral con los recursos que hay y después adjudicársela graciosamente a voluntad divina.
¿Tertulia a cuatro? Luri, Comte, Lucrecio y un servidor y cerramos el café.
ResponderEliminarIgnacio: Tertuliano decía en "De Carne Christi": "Natus est Dei Filius; non pudet, quia pudendum est: et mortuus est Dei Filius; prorsus credibile est, quia ineptum est: et sepultus resurrexit; certum est, quia impossibile."
ResponderEliminarNada hay más absurdo que el cristianismo. Así que los que andan con triquiñuelas me parece que quieren hacer de Cristo un profesor de lógica. Y no lo fue, en modo alguno.
Luis: Claro, claro.
ResponderEliminarDon Gregorio me ha encantado su artículo. Más allá del análisis del porqué de la inquina de algunos ateos, me parece que las reflexiones sobre la oración agónica y el abandono que sintió el Cristo son aptas para todos los públicos. Luego los creyentes creeremos también en su resurrección... En nuestras cortas vidas nos decimos situados a uno u otro lado de la frontera: yo creo, yo no. ¿Y dentro? Dentro casi siempre la duda, cuando el ateo duda y cuando yo dudo ¿no estamos en el mismo lugar, espaldas mojadas braceando en el rio Grande?
ResponderEliminarFrancamente,no creo que exista ningun ateo cristiano. Me gustaría puntualizar por qué. En todo caso lo que hay son ateos CATÓLICOS. Tendríamos que diferenciar lo que se supone que predicaba Cristo (ya que los mandamientos quedaron reducidos a 2y uno de ellos era "amarás al prójimo como a ti mismo")es decir, que si amas a tu prójimo, no le robas, no le mientes, etc... y además insataba a compartir. ¿De veras creeis que alguien estaría en contra de esos principios si realmente fueran posibles? sin envidias, sin daños, sin pobreza... yo creo que no. Otra cosa muy pero que muy distinta es la aplicación o mejor dicho la interpretación de la iglesia católica a los principios Cristianos. Y a eso si creo que hay millones de detractores. Claro que esto es una puntualización personal...
ResponderEliminarViejocon: Hay, hasta donde se me alcanza a ver, dos tipos de argumentos críticos con la religión. Uno es el que le echa en cara su poder atemorizante. Es la crítica de Epicuro y Lucrecio, que en gran medida comparto.
ResponderEliminarPero con el racionalismo, y más en concreto a partir de Spinoza, comenzó a criticarse a la religión por lo contrario: por su capacidad para proporcionar consuelo. Y esta crítica es la que me deja perplejo. ¿Por qué algunos ateos se creen autorizados a poseer la exclusiva de la expedición del consuelo legítimo?
¿No le parece esta actitud digna de estudio?
Respecto a la figura de Cristo, lo evidente es que desde los años ochenta estamos asistiendo a una nueva ola de estudios históricos que algo pone de manifiesto.
Por otra parte se me antoja sintomático de un profundo snobismo prestar atención a todo mito exótico y remoto mientras el cristianismo nos propone el mito más grande jamás contado. Aunque sólo fuera por su valor como mito el cristianismo debería ser profundamente estimado. Vamos, digo yo.
Uff qué complejo... no estoy demasiado de acuerdo. Sentir respeto por unas creencias o por una doctrina, me parece bién, pero el lo que vosotros calificais como mito que debería ser estimado, engloba muchas cosas que no comparto. Desde figuras adornadas con oro que valen 100 vedes mas que el sueldo de un obrero hasta la prohibiciónsobre las mujeres para ocupar un alto cargo eclesiastico. No es solo que me guste o no la Navidad. Es simplemente que todo ese despliegue de ostentación y desfachatez, no me merece ninguna estima, máxime cuando esas creencias se han utilizado para dominar, acojonar e incluso ser la excusa para matar, quemar y emprender guerra. Todo ese conjuto me inspira rechazo. Dios dijo: ganarás el pan con el sudor de tu frente, no con el sudor del de enfrente. Si es que cada vez son más los sacerdotes y demas parentela que viven del cuento, y toooodo eso forma parte del catolocismo, nos guste o no.
ResponderEliminarDiz don Gregorio:
ResponderEliminar"Pero con el racionalismo, y más en concreto a partir de Spinoza, comenzó a criticarse a la religión por lo contrario: por su capacidad para proporcionar consuelo. Y esta crítica es la que me deja perplejo. ¿Por qué algunos ateos se creen autorizados a poseer la exclusiva de la expedición del consuelo legítimo? "
Me pilla un poco lejos ese ateísmo. El mío es más de que no hay consuelo y de que es mejor construir a partir de la desesperanza basada en la verdad que en cualquier esperanza mentirosa.
Otro desacuerdo: el valor que otorga el cristianismo al sacrificio doloroso y gratuito. No compro, no me parece un ideal humano. No agradezco el desgarramiento de la carne ajena para mi salvación, ni ofrecería el desgarro de la mía por la salvación de otros.
Ignacio: En el Prometeo encadenado de Esquilo se lee que el mejor regalo de este titán filántropo y enemigo de los dioses a los humanos fue "la esperanza ciega".
ResponderEliminarRespecto al dolor, ¿no es un dato de la vida?
Pero quizás tengas razón y el debate último (el del último hombre nietzscheano)sea el de cristianismo o prozac.
Ignacio: el Cristianismo adora la verdad "la verdad os hará libres". Piense que es Vd. el que prejuzga como mentiroso el consuelo y como verdadera la desesperanza.
ResponderEliminarRespecto al valor del sacrificio le confieso que es uno de mis problemas actuales, me paso los días diciéndole a Cristo que yo no le mandé morir por mí, supongo que me cuesta asumir esa responsabilidad. Al final el poder seductor del Cristianismo está en esa mezcla de lo que se entiende muy bien y lo rematadamente ininteligible. Es la religión más jodidamente humana.
Judith: He oído muchas veces esa crítica y antes la intentaba rebatir. Ahora estoy más en la onda de Gregorio, incluso un querido compañero de debates me acusa de ser un católico absolutamente superficial, fascinado únicamente por el admirable bagaje cultural de la Iglesia. ¡Quién sabe! Los caminos del Señor son inexcrutables.
Gregorio: totalmente de acuerdo. El hombre actual valora sobre todo la seguridad y cree que la ciencia es el único proveedor válido de la misma. Las amenazas de antaño son simples problemas que, en el peor de los casos, los sabios aún no han alcanzado a resolver. Así se prefiere la seguridad de la nada -en tanto no quede resuelto ese pequeño engorro de la muerte- a enfrentarse con una opción vital que supone una lucha constante y un juicio final.
En cuanto a la puesta en valor del mito forastero en demérito del propio, se dice que la confianza da asco, pues eso. Qué cabe esperar cuando las ideologías dominantes en la segunda mitad del siglo XX han sido anticristianas por ser, en realidad, las penúltimas herejías cristianas.
Viejocon: es claro que tomo una postura respecto a la verdad o mentira de las teorías, pero eso no es necesariamente prejuzgar. Digamos que le dediqué en su día el esfuerzo necesario de reflexión y me quedó la razonable certeza de que no hay supervivencia posible del yo.
ResponderEliminarGregorio: construir a partir de la desesperanza no es tan diferente de la esperanza ciega. Es la fábula lo que me molesta, la encuentro innecesaria y empobrecedora.
Por otro lado, y para completar la combinatoria, tenemos un ateísmo que estima de la religión precisamente su capacidad de consuelo. Me refiero a una corriente científica que está valorando la religión como rasgo evolutivo: surgió como otros muchos y ha sido seleccionada porque ayudaba a la supervivencia.
Ignacio: quítale al término prejuzgar la connotación peyorativa, no lo utilizo en el sentido de juicio previo infundado, no creo que tu juicio previo sea infundado, pero sí es un juicio previo.
ResponderEliminarTu optas por ese lado de la raya y yo por el otro. Nos encontraremos en nuestros momentos de duda. Leí recientemente un escrito del Papa en el que venía a decir que el silencio de Dios y la sequía del alma adquieren sentido en la medida en que nos acercan a los no creyentes.
El cristianismo es inisociable de "la noche oscura del alma".
ResponderEliminarCon respecto a la relación entre evolución y religión, me parece muy interesante porque entonces estaría justificada con la misma autoridad que, por ejemplo, la postura erguida o la lógica. Esto último, obviamente, pretende ser sólo una amable ironía.
Supongo que podríamos decir que entre ustedes y yo hay dos lineas totalmente distintas de enfocar la cuestión. Entiendo que lo que hacen es valorar lo que se puede obtener de la religión (como consuelo, o esperanza) mientras que yo aplico sus comentarios y podría rebatirlos con pasajes biblicos que la Iglesia acomoda e interpreta a su santo antojo. Por eso, me parece increible que alguien fundamente su fe sobre embustes. Veamos, en principio él estandarte de la religión es la Biblia, correcto?, Podrían decirme cuantos cristianos (entre los que les incluyo a ustedes) la conoce?, y no se trata de leerla, a mi me costó tres años entenderla, y ademas con dos puntos de vista opuestos. Podría ponerles un par de ejemplos: Cuando Jesus llega con su madre a las bodas de Caanan, entran solos, y al momento Jesus le pide a su madre que salga fuera a buscar a sus hermanos y hermanas... Tenía 14. Y aunque suene irreverente, en aquellos tiempos no había tele y María "fue virgen" solo hasta el nacimiento de su primer hijo. Cómo interpreta la iglesia esto? No pueden reconocer que María tuvo más hijos, porque entonces no tendría validez el voto de castida de las religiosas, no creen? Pues bién, la iglesia dice que "todos somos hermanos y hermanas", entonces, ¿lo que le pidió Jesus a su madre que fue? ¿que entrara todo el pueblo de Caanan y alrededores a la boda?. Históricamente esas bodas tuvieron lugar. Y por nombrar otro mas, diria que Cuando Jesus ve que mercaderes estan comerciando en el templo de su padre, entra en furia, se saca el cinturón y los echa a latigazo limpio. Dónde queda entonces el poner la otra mejilla?. No es que quiera darles una clase sobre pasajes bíblicos pero no he encontrado otra forma de hacerles entender mi punto de vista. Me resulta increible fundamentar mi esperanza en una serie de anécdotas que un montón de caballeros en nombre de Diós han modificado asu antojo. Por eso me gustaría preguntarles en qué consiste esa evolución, en adaptar la religión a los tiempos según nos convenga? y otra cosa que no acabo de entender es como se puede obviar todo lo relacionado con la Iglesia que es deplorable y quedarse solo con ideales fundados en la farsa más grande de la historia. Fijense que el "consuelo" que ofrece la iglesia ante la perdida de un ser querido es: es voluntad de Dios. Y un cuerno. Si alguien se tomara la molestia de leer los capítulos del Génesis, se daría cuenta que Ante la desobediencia de Adan y Eva y ante la insolencia de que se pueden gobernar ellos solos, Dios les da un tiempo finito, en los que No intervendrá (de ahí que la fecha del apocalipsis esté fijada desde el comienzo) y ademas advierte del hambre, las envidias y de todo lo demas. Por tanto, si creemos, creemos. Y Dios no interviene en nada hasta Armagedon. Se dan cuenta de la Sarta de mentiras que esgrimen?
ResponderEliminarJudith: Creo que soy el único comentarista que se ha declarado creyente ¿En algún momento ha sentido Vd. que yo la he intentado convencer de algo? Si así fuera no ha sido mi intención. ¿Pero se da cuenta como al final Vd. sí nos intenta convencer a los demás?
ResponderEliminarEse es, justamente, el punto de partida de todo este debate.
Si no se ha fijado en mi exposición, prácticamente todas las posturas que defiendo empiezan con un : lo que no entiendo... Eso sin contar que en mi alegación formulo un montón de preguntas que invitan al debat y a rebatirme con argumentos válidos. He tratado con ejemplos (correctos o no) de intetar explicar el porqué de mi postura puesto que de eso se trata. En su respuesta , no esgrime usted ni un solo argumento válido que rebata mis alegaciones excepto que se declara usted creyente. En ningun momento, repito en ningun mometo, me he declarado no creyente. Creo en algo más, pero le aseguro que es algo no es la iglesia católica. Lamento profundamente que mis explicaciones le hayan parecido un ataque a sus creencias en un intento por cambiarlas. No se sienta aludido. Si lo que expuse le ofende, desde aqui mis disculpas, pero repito, no me ha rebatido usted ni una sola de mis alusiones.Mi punto de vista, tiene argumentos más sólidos que la fe.
ResponderEliminarY para teminar, caballero, le diría que a mi trataron de convencerme durante 11 años de mi vida, pero repito lo de dije anteriormente, NO ENTIENDO como alguien puede creer solo en la parte que mas le gusta obviando todo lo demás. Y en ese no entiendo invito a cualquiera a que me enseñe otro punto de vista. Esto no és una batalla dialéctica para ver quien tiene razó, porque todos tenemos nuestras razones. Para mí, es una exposición de diferentes ideas con la posibilidad de debatirlas.
Judith: si te parece, en lo sucesivo te tuteo, resultará más natural. Yo no me he sentido atacado y no debes disculparte.
ResponderEliminarMe invitas a argumentar ¿para qué? No creo que en un comentario de veinte lineas vaya a conseguir lo que otros mejor organizados no lograron en once años.
Por no resultar descortés te diré lo que pienso de alguno de tus argumentos. Declaración previa: creo en un Dios que llama a cada uno de manera personal y quizás la que a ti conviene sea la que expresas. O quizás no estás tan segura y por eso inquieres. O quizás te hicieron mucho daño. Lo que sea será, solo Dios basta.
Prescindiendo de analizar cada ejemplo por separado creo que planteas seis cuestiones fundamentales:
1.- Si el Cristianismo es una religión basada en un libro.
2.- Si Jesús tuvo hermanos.
3.- Las incoherencias en los Evangelios.
4- Qué consuelo da la Iglesia.
5.- Si Dios interviene o no desde lo de la manzana.
6.- ¿Se puede coger de la Iglesia solo lo que te guste?
Van mis opiniones:
1.- No solo, ni principalmente. El Espíritu actúa continuamente y por muchos medios. La tradición apostólica es muy importante y creemos en un Dios vivo, resucitado y presente.
2.- Los católicos salimos de ese atolladero como dices, no todos los cristianos creen en la virginidad de Maria. El voto de castidad viene más bien de las recomendaciones de San Pablo, que -por célibe- valoraba el celibato como situación más favorable para estar cerca de Cristo.
3.- Las incoherencias de los Evangelios se transforman muy fácilmente en argumento a favor de su validez histórica. Si todo fueran patrañas ¿No se habrían cuidado mucho de no incurrir en esas contradicciones? ¿No habrían presentado un Jesús siempre "correcto" y no un tipo a veces desabrido y en la ocasión que citas colérico?
4.- No es el "lo ha querido Dios", es "Cristo ha vencido a la muerte", la separación que la muerte supone es solo temporal.
5.- El Cristianismo cree que no solo no nos ha abandonado sino que se ha hecho hombre por nosotros.
6.- ¿Quién te lo va a impedir?
P.D: Ya he escrito "inescrutable" 100 veces.
Sr.Luri, y cuando uno-a no sabe qué es qué pasa o qué se ha de hacer?.Yo me encuentro en ese trecho del camino.De otros temas no pregunto ,pues con las soluciones que sé ,las que me imagino ,las que invento ,las que uso y las que desecho, me encuentro fantástica... o no tanto,o,tal vez más..Igual ,ni es necesario saber qué es uno-a...
ResponderEliminarSr.Luri,¿le gusta responder? Pues,venga,respóndame (le ruego),y gracias ,eh?Saludos de Laura.
Doña Laura: ¿Y yo quién soy para responderle? Además: ¿Por qué ha de tener una respuesta lo que le pasa?
ResponderEliminarVaya risas sanas que me ha provocado,Sr,Luri.Y vaya rapidez en atender mi consulta.Estic aclaparada,de veritat.Muchas gracias por ambas cosas.Continuaré con mi sistema de ver las cosas,inventando posibles o reales soluciones,pero que no me han fallado demasiado hasta ahora.al fin y al cabo,es lo que me parece leer ,entre líneas , de su amable y rápida respuesta.Tiene mucha razón.Una altra vegada li dic:moltes gràcies,Sr Luri. Laura.
ResponderEliminarLa majoria d'edat no és una garantia contra l'equivocació, sinó la disposició a prendre's la pròpia fragilitat amb una certa lleugeresa. Ningú no ens evitarà prendre'n mal, però podem aprendre a no recarregar el mal inevitable amb lamentacions evitables.
ResponderEliminarO al menys això és el que jo intento (no sempre amb èxit).
Aquesta vegada ,no sé si les seves paraules les ha escrit per a mi,ja que sóc persona de poques lamentacions.Malgrat això,les tindré en compte,ja que són molt encertades i certes, i les puc aplicar a la meva persona:sóc major d'edat,m'equivoco,alguna vegada em prenc la meva fragilitat amb una certa lleugeresa,i no vull mai recarregar cap cosa perque les conseqüències són obvies...En fi,Sr.Luri,totes les línies han estat molt maques i li agraeixo molt.Veig que sense saber molt bé qué sóc ,visc i per viure he de treballar , que és el que m'en vaig a fer.Té una conversa admirable que m'ha agradat compartir.Espero poder tenir-ne alguna més ,pel bonic motiu de parlar per parlar perque parlar sempre porta a la reflexió .Si més no,a mi.I les conclusions que agafo normalment em són profitoses.Gràcies,Sr.Luri.Laura.
ResponderEliminarPero,Sr.Luri,por Dios...ah que es ateo i no hay Dios,pues uso otra expresión, sólo es una forma de hablar cuando se siente extrañeza por algo:Da lo mismo.Que hay que saber encajar las ideas ajenas.Y no enojarse o parecer enojado,por una idea que no se circunscriba a sus entornos idearios.Así,tiene la sartén por el mango siempre.Si no le gusta un escrito lo anula y listo...Que capto que es un blog moderno y liberal el suyo, pero después deja entrever por finas espilleras que si algo no le gusta lo liquida y asunto concluido.Lo puede concluir de manera más eficaz,puesto que ud tiene casi todos los recursos del mundo afortunadamente .No recurra a una ciber-censura,por favor ,pues es una paradoja,no?No me encuentro con la seguridad a mi lado así.Si algo no gusta de lo que se nos escribe lo podemos lidiar de otra manera.Hay muchas suertes,no de toreo sino en el tema ciber para hacerlo.Qué le voy a decir yo a un filósofo que él no sepa en estos asuntos? Una cosa es que alguien modere o instruya y otra es una ciber-censura,de la cual ya nadie habla.La única ventaja de la que disponemos los que entramos a su blog es la de no entrar si olemos que alguna palabra empleada le va a caer menos bien.Dígame que estoy equivocada y que no hay ninguna adhesión entre lo que acabo de escribir y su respetable persona.Y si no me lo quiere decir,está en su derecho,claro.Me voy a quedar inmensamente más tranquila.Hago,acto seguido la lógica reflexión de qué harán otros si en este blog se echa mano a la anulación de un comentario? Continúo omitiendo mi nombre porque tengo miedo a ser quemadacomo Ingrid-Bergman-Joana de Arco.
ResponderEliminarDoña anónima: En primer lugar no deja de ser irónico que una anónima me pida aclaraciones. La ironía se torna un poco amarga si me pide que le justifique mi inocencia, pues no habrá manera de concencerla. Pero en fin: no tengo por costumbre eliminar comentarios, excepto si me parecen de mal gusto o insultantes. Lo que sí me reservo es el derecho o el antojo, como usted quiera, a responderlos.
ResponderEliminarHola Sr.Luri,pero si apenas hay ironía en el escrito.Además ud la usa constantemente y a mí me encanta.No sobrecargando tintas en la ironía hasta resulta hermosa en lo que de hermoso tiene una conversación distendida , no agobiante y no jerárquica.Su casi roce amistoso con la transgresión fascina, de aquí mi extrañeza en algunos modos catonianos suyos.Pero mi escrito ha sido un simple escrito;para los que gozamos escribiendo y leyendo,sin rencores,sin pretender enseñar caminos a nadie ni menos a ud.Pero entienda,por favor,que la ironía dosificada me gusta a mí y a todo el mundo,no es privativa de ud.Pero ...si lo entiende perfectamente,venga y sabe quién soy(pero con poquísimas referencias,la verdad,pero ya no le soy anónima)a mí también me gusta rozar la ironía y lo he hecho.Gracias por entender que las personas necesitamos,a veces ,de otras que sean como ud,aunque estén un poco enojadas o parezcan estarlo.Naturalmente que puede anular un comentario si no lo encuentra digno.Tiene más vista de ello que yo puesto que no he visto ninguno que no lo sea.Aguzaré mis ojos a ver si le doy la razón convencida totalmente.Gràcies Sr.Luri.Si és molt maca la seva xarrada,home.....
ResponderEliminarMuy certera observación sobre el ateísmo más anticatólico.
ResponderEliminarYo soy católica, con mis dudas, muchas, pero con fe y amor a Cristo, y con mis muchos pecados a cuestas.
No quiero odios, ¡ ateos, por favor, no nos despreciéis !
Podría ser sólo porque saber lo que a uno le pasa,dicen ,que da alivio ,pero como no es éste mi caso,era por saber una opinión de peso específico,ya que a mí me parece que las suyas lo son.L-BCN
ResponderEliminarOstrasssss!!!! Vaya cantidad de palabras...Me quedo casi sin respiraciónnnnnnnnn.¿Y a qué conclusión se llegó?
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