Cuando en la vida en pareja está activo el deseo, éste une y traba todo tipo de caracteres, mientras que una convivencia saciada y carente de deseo conduce a la separación de las parejas a causa de una hartura desmedida.
Como dice usted, los filósofos somos bastante raros (que esto yo se lo he leído). Yo estaba esta mañana tempranito buscando las veces que aparece la palabra "plêsmonê" (plenitud, hartura, saciedad) en Platón y he descubierto que entre los autores del siglo IV es utilizada especialmente por los socráticos. Ya ve, con esto no se come, pero el descubrimiento me ha hecho tan feliz. Y lleno de felicidad me he encontrado con este texto de "Las Leyes". Lo que traduzco como "hartura desmedida" Platón lo llama "hyperbolaîs plêsmonês", o sea, un hartazgo del copón (en nuestra tierra dirían que eso pasa cuando uno está 'templau' a reventar).
Las cosas son (y eran) asín. Y punto.
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ResponderEliminarComo dice usted, los filósofos somos bastante raros (que esto yo se lo he leído). Yo estaba esta mañana tempranito buscando las veces que aparece la palabra "plêsmonê" (plenitud, hartura, saciedad) en Platón y he descubierto que entre los autores del siglo IV es utilizada especialmente por los socráticos. Ya ve, con esto no se come, pero el descubrimiento me ha hecho tan feliz. Y lleno de felicidad me he encontrado con este texto de "Las Leyes". Lo que traduzco como "hartura desmedida" Platón lo llama "hyperbolaîs plêsmonês", o sea, un hartazgo del copón (en nuestra tierra dirían que eso pasa cuando uno está 'templau' a reventar).
ResponderEliminar"Al hambre llamamos amor", decía el poeta.
El hartazgo sigue vigente, sin duda alguna. Abrazos.
ResponderEliminarAmén.
ResponderEliminarSiempre me sorprenden sus frases Gregorio , That's the Way Life Is...:)
ResponderEliminarAhora sé porque la quiero tanto. :)
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