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domingo, 25 de febrero de 2007

El discreto encanto de la falacia "ad hominem"

Me ha parecido muy instructiva la entrevista que Nuria Escur realiza a Ayaan Hirsi Ali en el Magazine de La Vanguardia. Me imagino que recordáis a Ayaan, que en poco tiempo ha pasado de parlamentaria holandesa a emigrante en los Estados Unidos.

- Algunos sectores políticos -afirma la periodista- lamentan que usted se haya desplazado hacia postulados propios de la derecha.

- Yo les diría -contesta la entrevistada- que las personas que se consideran de izquierda hoy en día hace muchos años que han dejado de ser progresistas. La izquierda, salvo honrosas excepciones, se ha convertido en un sector reaccionario. La propia izquierda se cuestiona por qué se están escindiendo. ¿Es progresista decir que "todas las culturas son iguales"? No. ¿Es progresista decirle a una mujer que ha huido de una situación de abuso que llamarás a un mediador para que la devuelva al infierno de su marido? No. ¿Es progresista defender una religión que es contraria a la vida, que trata a las mujeres peor que a animales domésticos, amenaza la vida de los homosexuales y no separa Iglesia y Estado?... ¿Eso es progresista? ¡No eso es reaccionario!

La respuesta es clara. Meridianamente clara y la periodista podría haber sacado buena tajada de ella. Sin embargo decide optar por el malabarismo ideológico con un comentario dirigido en exclusiva al lector, y por lo tanto hurtado a la entrevistada, que no tiene desperdicio:
"Me dice eso, pero no puedo evitar verle un gesto a lo Condoleezza Rice. No sé si es ese cuello de camisa almidonado o el reflejo frío de las perlas, pinchando entre frase y frase, pero reconozco que su discurso "neocon", en ella, me desasosiega."
¡Qué joya! Yo la pondría en una antología de la falacia. Digas lo que digas, si tienes un aire a lo Condoleezza Rice, eres neoconservadora. Y, por lo tanto, sospechosa. ¡Y no digamos nada si me siento herido por el reflejo frío de tus perlas! La venerable retórica reservaba un nombre preciso para esta singular manera de razonar: el de falacia "ad hominem". Se trata de un razonamiento sesgado y tendencioso que tiene, básicamente, esta estructura:
1. Alguien -llamémosle "A"- afirma algo que no me gusta.
2. No puedo o no quiero cuestionar lo que dice "A" pero puedo extender una sombra de sospecha acerca de él.
3. Conclusión: Conviene no fiarse de lo que dice "A" porque su lógica puede estar contaminada por su sombra.
La conclusión de la entrevista es doble:
1. El hábito no hace al político, excepto en el caso de los neocón.
2. Las conductas definen a los políticos, excepto en el caso de los progres.

25 comentarios:

  1. No se olvide de la falacia inversa, Don Gregorio, que también está muy en voga :
    1. A dice una barbaridad
    2. Como es imposible no cuestionarla, y A es de o mi amiguete o de mi equipo, proclamo su santidad y su impecable carrera.
    3. Conclusión : la barbaridad se convierte en juicio atinado y certero por obra y gracia de A.
    Mueran las ideas! Viva A!

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  2. Joseph: Efectivamente, es muy común. Se trata de la degradación (porque hasta las falacias pueden degradarse) de la falacia "ad verecundiam". Pero en el uso al que usted se refiere la autoridad del que defiende el argumento se soporta no tanto en sus obras como en el hecho de ser mi amigo o, más frecuentemente, "uno de los nuestros".

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  3. Claudio.

    O cuando te sueltan: "Dices lo mismo que la derecha".
    De verdad que te lo presentan como un argumento.

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  4. Realmente es para la antología; la degeneración del socioanálisis, que por cierto también critica Popper.

    Quizás habría que parafrasear al romano: "No basta con ser de izquierdas, también tienes que aparentarlo".

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  5. Claudio: Esa es una interesante muestra de la falacia de afirmación del consecuente (la derecha dice "X", tu dices "X", luego eres de derechas) que además traslada el peso de la prueba al acusado (y esta conducta es, a su vez, una variante del "argumentum ad ignorantiam").

    ¡Hay que ver lo que dan de si las falacias!

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  6. Eduardo: Y aparentárselo al periodista de turno, porque te va a exigir apariencia.

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  7. y si hubiera llevado chaquetilla de pana a lo González Marquez?
    o el pelo teñido en tecnicolor a lo Carmen Alborch?

    me acuerdo de la ministra Isabel Tozino, ministra de medio ambiente, creo recordar, que se presentaba en el congreso o en el parlamento, visitendo mono de piel, pelo lacado, y moto superguays que te cagas (de esas que beben petroleo)

    ...
    luri, un chocolatito que hace un frío de repente...

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  8. Doña Celia: ¿Pero de dónde vuelve usted, que trae tantísima hambre?
    Te pondré el chocolate con unas gotas de calvados y para untar, carquinyolis.

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  9. Tremendo, sí. Un cero a la periodista.

    Sobre lo de "decir lo mismo que", le oí una vez a Savater que contaba que no sé quién decía "Franco y yo pensamos que 2 y 2 son 4, y eso no me hace franquista". Lo cual es muy gracioso, pero, ojo, obviamente no vale para cualquier discurso.

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  10. Y ahora lo verdaderamente importante: ¿qué es escorpora?, ¿y qué los carquinyolis?

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  11. He estado en Kyoto una semanita, con mi Flor.
    En plan:

    Ka macu!
    M'ho imaginava mes gran.

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  12. Portorosa: Estoy completamente de acuerdo con usted en que lo importante es lo importante:

    1) La escórpora: también conocida como cabracho Scorpaena scrofa): Es muy común en el Mediterráneo pero desconozco si tiene querencia por las intemperies atlánticas. Tiene una carne sabrosísima y hace, para mi gusto, el mejor caldo de pescado.
    Puede ver una imagen aquí: http://marenostrum.org/vidamarina/animalia/peces/mediterraneo/escorpora/

    2) Los carquinyolis: Es un dulce típicamente catalán que viene a ser un mazapán duro con almendras tostadas. aquí tiene la receta:http://mujer.terra.es/muj/cocina/recetas/receta.cfm?ID=1555

    He observado que no me ha preguntado usted por el calvados. De donde deduzco (sin duda falaciosamente) que no le resulta ajeno.

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  13. Celia: Ya sabe que hoy ando liado con falacias. ¿Se imagina usted de cuántas maneras se pueden interpretar estas expresiones suyas, que siguen a su declaración de que ha estado en Kyoto con su Flor:

    "Ka macu!
    M'ho imaginava mes gran"?

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  14. Aclararé, antes de que el periodista me mal interprete, que los comentarios no se referían a mi Flor,
    jejejejeje

    Luri, me acordé mucho de usted, porque me estaba leyendo un libro en el que hablaban de la filia prusiana de los japoneses. (ale, a ver que falacias se pueden sacar de la anterior frase)

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  15. Pues todo aclarado.

    Sí es cierto, una cierte elite japonesa se occidentalizó siguiendo el modelo prusiano. Francis Fukuyama cuenta por algún lugar que su abuelo materno, que puso en marcha el Departamento de Economía de la Universidad de Kyoto, formó parte de la generación de japoneses educada en Alemania antes de la primera guerra mundial. Por este motivo pudo heredar la primera edición del "Capital" de Marx. Cuenta también que su madre creció escuchando a Beethoven.
    Tampoco me parece una causalidad que los japoneses hayan prestado tanta atención a Heidegger.

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  16. si si, si a eso venía
    por la vez que hablamos de Heidegger y los japoneses

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  17. Está bien... seré yo quien pregunte que demonios son esos "calvados" en vez de arrojarme sobre google. Mejor la respuesta de Luri.

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  18. DON ANDRÉS: A partir de este momento rompo cualquier tipo de relación con usted. Si bien es verdad que debemos alguna fidelidad a nuestros principios, lo que deben ser intocables son nuestros prejuicios. No, no se arroje sobre el Google, arréglese usted de forma adecuada y vaya hasta el bar decente más próximo que encuentre y
    pida con gesto grave un Calvados, de no menos de seis años, por favor. Y disfrútelo usted despacio. Sólo si cumple esta dorada penitencia estaré dispuesto a recondiderar mi postura.

    Para el resto, voy a permitirme un gesto iconoclasta y voy a invitaros a un "Calvados long drink": 3/10 de Calvados por 7/10 de agua tónica

    ¿Qué tal?

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  19. Estando años ha en Gijón, recuerdo haber disfrutado de un delicioso tapeo de pastel de cabracho regado con sidra, para quien guste saber. Y siguiendo por la ruta de la sidra, me acerco a la Bretaña francesa o a Normandia para degustar un atracón de mejillones y ostras, para terminar con un excelente calvados de 8 años.

    Parafraseando a ese par de genios, la próxima semana hablaremos de política.

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  20. Arrenatos: Pase, pase usted, hasta la barra. Siéntese usted bien cómodo, pídame lo que se le antoje, que la casa invita, y cuénteme. No hay prisa.

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  21. Gracias, Gregorio.
    Iba a decir yo lo mismo que lo de Asturias, que aquí lo más habitual es el pastel de cabracho (que, precisamente, yo hacía plato asturiano).

    Lo del Calvados, pura teoría...

    Abrazos.

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  22. Primemro y lo más importante: quiero declarar mi envidia más rabiosa y patética por la visita de Celia a Kioto. prometo estar allí en los próximos meses. Para mi la expresión, hoy por hoy es, "ver Kyoto y volver", pero aún no se a donde.

    La gran falacia de la izquierda durante los últimos años, en Europa, ha sido en monopolio del concepto "progreso". Afirmación que es absurda en su mismo enunciado, ya que siempre se progresa, incluso cuando llegan los nazis al poder. El problema es definir el tipo de progreso. Progreso es básicamente cambiar de una situación a otra en el tiempo, realmente ir hacia delante.

    La periodista hace un prodigioso ejercicio de manipulación desde su frágil ideología, y digo frágil porque nandie inteligente utilizaría esa absurda argumentación de tildar de no progresista a una persona a través del cuello de su ropa.

    Conviene recordar a los mayores aquellas entrevistas que hacía Porcel en Destino, en las que entre resumen de parlamento del entrevistado y resumen, porcel establecía largos párrafos de su visión personal, pura psicología del entrevistado.

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  23. Luis: Claro, un progreso real sería aquel que no ha exigido ninguna pérdida. Agnes Heller, que no es una santa de mi especial devoción, ponía como ejemplos de progresos sin pérdidas al feminismo y a la ecología. Yo no soy tan optimista.

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  24. Totalmente de acuerdo. Me desagradó el tono entre disimuladamente insultante y superioridad de la periodista, sin duda gran experta en mutilación genital femenina (y, lógicamente gran efensora de esta práctica "cultural"), etc. Por lo que parece, las perlas le disgustan. ¿Vestirse como Condolezza Rice -¿cuál es el problema?- conlleva la identificación con las ideas? ¿El hábito hace el monje? ¿Cómo viste por cierto la periodista?

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