La primera vez que formé parte de un tribunal de una tesis doctoral, me encontré con un memo de presidente
En otra ocasión fue el tutor del doctorando el que, en su intervención, se dedicó a dejar claro que a él el tema de la tesis doctoral que libremente había dirigido le importaba un bledo. Él se dedicaba a cosas serias. En una universidad que de verdad fuera seria lo hubiesen despedido inmediatamente, pero en la nuestra, que no tiene la seriedad entre sus preferencias, se puede ser un cínico y un inepto sin que pase absolutamente nada.
Hoy he asistido a otro tribunal de una facultad muy ajena a la filosofía. Pero me he encontrado con los mismos gestos y las mismas actitudes.
El tiempo pasa, las circunstancias varían, pero sea cual sea la facultad, los peores permanecen en sus puestos, impasible el ademán.
Aaaaaaahhhh... las maravillas de los tribunales de tesis. Deberiamos hacer una catalogacion zoologica de los tipos de tribunos existentes. Para dar ejemplo, empiezo por dos, uno de cal y otro de arena:
ResponderEliminar1) El vacilon o aquel al que le gusta oirse. Dicese de aquel que ejerce de tribuno con la unica intencion de mostrar al mundo lo mucho que sabe y lo mucho que ha publicado sobre algo... que no necesariamente tiene que ver con el tema de la tesis en cuestion.
2) El ingenuo o lo que todo tribuno deberia ser. Aquel que tiene la genuina intencion de aportar reflexiones al trabajo realizado e intenta averiguar el dominio del doctorando sobre su trabajo.
Por cierto, si quiere usted diversion, maestro Luri, deberia usted presentarse voluntario mas a menudo a otro tipo de tribunales: los de las plazas permanentes.
Jordi: Sé de esos otros tribunales lo suficiente como para escribir un tratado. Pero destilaría demasiada amargura.
ResponderEliminarYo sólo tengo clara una cosa: NO quiero doctorarme en Pedagogía y menos en mi universidad (en caso de que alguna vez pueda plantearme un doctorado). (Me encanta estudiar pero tengo que comer y vivir bajo un techo).
ResponderEliminarNo voy a dar ninguna opinión sobre los pocos personajes que conozco que andan por los tribunales de doctorado (y de cátedra). Me impongo silencio; o me expedientarían también a mí por decir lo que pienso estando sólo en segundo. (He tenido suficiente con cursar primero para ver de qué van las cosas).
Vaya un torpedo a la zona de flotacion, viniendo de usted, que al menos por mi parte y fueraparte de discrepancias merece toda la credibilidad
ResponderEliminarMis felicitaciones más sinceras por ser tan claro y crítico con el propio gremio. Y además por decirlo en el blog, que probablemente puedan leer, y no a hurtadillas com es lo propio de este país cerril y lleno de sicofantes.
ResponderEliminarEncantado de leerle.
Mi parte racional me decía "déjalos, pobres indocumentados, lo único que están haciendo es alejar el tema que ignoran hacia otro en el que se sienten cómodos: el color del hormigón, el tipo de bombilla...", pero la parte animal me martilleaba la cabeza, repitiéndome que saliera a abofetearlos.
ResponderEliminarPor cierto Don Gregorio, mañana vamos a Ocata a celebrarlo con una comida en el insigne Mas Vell. ¿Tomamos un vermú antes? ¿Nos vemos para los cafés y la copa de calvados? O incluso ¿compartimos mesa?
ResponderEliminarPermitame Don Gregorio, algo parecido pero referido a la clase politica, con el titulo el efecto etileno, hace un par de meses lo refleje en mi blog, dejeme celebrar que coincido con UD.
ResponderEliminarhttp://desdemiventana-ruben.blogspot.com/2008/09/el-efecto-etileno.html
"Sé de esos otros tribunales lo suficiente como para escribir un tratado. Pero destilaría demasiada amargura."
ResponderEliminarMe lo temia, ciertamente... mi total solidaridad por tener que pasar tamanyo trago. Si sirve de consuelo, conozco a un punyao mas que tambien destilan amargura por ese mismo fenomeno. Quizas deberian asegurarse de que todos coinciden en el mismo tribunal alguna vez, aunque las disciplinas no coincidan. Al menos, el "aftermath" seria mas placentero y pacifico.
Buen fin de semana!
Arrebatos: Mañana tengo un día un pelín complicado para compartir mesa, pero espero que en cuanto lleguen ustedes a Ocata me lo hagan saber.
ResponderEliminarY cuán medran estos malditos!
ResponderEliminarEs increíble la universalidad de esas conductas.
ResponderEliminarPS: hora perfecta la de su post.
Entonces: ¿las habas también se dan bien por esos lados?
ResponderEliminarPamela: Efectivamente, en todas partes cuecen habas.
ResponderEliminarNo sé a quién se lo escuché una vez, pero cada vez me cuesta menos creerlo (y lo que és peor, confirmarlo!!):
ResponderEliminar"La imecilidad está perfecta (y equitativamente) repartida en todos y cada uno de los estados de la sociedad".
Felicidades a la arquitecta, que es lo que queda.
Es que el respeto es una cosa fea también. Ese señor no tenía consideración y le sobraba respeto, creo.
ResponderEliminarDeles duro, don Gregorio, Usted puede :))===
un abrazo, ya me tengo que ri a estudiar.
Anda, demet es la palabra que dice que escriba en el cajetín. Pero no le falta la er?
Si no le importa yo me quedo por aquí ahora :)