domingo, 29 de abril de 2012

Obviedades

Me gusta la carne. Soy un gran carnívoro. Pero el hecho de que Hitler fuera vegetariano no le añade a mi pierna de cordero ningún condimento moral.

7 comentarios:

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    1. Lo que no le añade (ni le quita) ningún condimento moral al vegetarianismo es que Hitler fuese (o no) vegetariano. De hecho, esta cantinela sobre el (supuesto) vegearianismo de ese sujeto, se repite para desprestigio del vegetarianismo (la de veces que la he tenido que aguantar! Aunque uno ya tiene su respuesta, nada pacifista, a punto para la ocasión). No he oido en mi vida vegetariana, y van para las tres décadas, ningun comentario negativo sobre una dieta omnívora por el hecho que la practicase ningún otro genocida. Mención a parte la frivolidad de juzgar una dieta comparándola con ese demente. Comprenderà que uno esté hasta los cataplines del comentario de marras.

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    2. Efectivamente, la lectura es una de las bellas artes.

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    3. Y la relectura...
      Ya lo dice el dicho: La H de ayer guárdala para la de Hecho.
      Lo del vegearianismo de ese sujeto, sin embargo, me ha parecido, dado el sujeto, un no tan desacertado error.
      De uno que dice etxo.

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  2. Qué finuras de hierba, don Gregorio.Ni se la quita tampoco.

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  3. Otra Reductio ad Hitlerum pero calma que también Mahatma Gandhi era vegetariano.

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  4. Hagamos pues una encuesta entre los vegetales y los corderos, que su opinión también cuenta (no es lo mismo comerse un cordero o un pimiento sabiendo lo que opina de estos asuntos que comérselo sin más, sin charla preliminar)

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