Buscar este blog

domingo, 1 de abril de 2012

La violencia estructural

Ha llegado la hora fatal de los sociólogos de baratillo. Tras los hechos periféricos de la manifestación del jueves, la escandalera informativa y, ahora, los sociólogos.

Vamos por partes.

Me temo que voy a decepcionar a alguno de los clientes de este café, pero mi agente provocador y yo asistimos a la manifestación del pasado jueves. Les ahorraré los argumentos que me animaron a ir, pero se los puedo resumir con la expresión latina "in dubio, pro reo". Hicimos el recorrido siguiendo a pocos metros a los líderes de los sindicatos convocantes. Dicho sea de paso: yo creo que este país tiene un chollo con los sindicatos que tiene y que el juego tan de moda del tiro dialéctico al sindicalista le hace un flaquísimo favor a la democracia, pero este es otro tema. La manifestación, ¿qué quieren que les diga?, me pareció bastante sosa, por no decir aburrida. Eché en falta un poco de inspiración en las consignas (que por cierto, los manifestantes seguían con una tibieza evidente). Ya no se grita con gracia y eso desmoviliza mucho, lo cual es letal para cualquier manifa. Además los líderes sindicales, al menos los catalanes, no están para competir por un premio de retórica. ¿Es mucho pedir que digan tres frases sin colar un anacoluto? Fíjense ustedes cuál sería mi estado que hasta recordé con melancolía aquella manifestación contracultural del primero de mayo del 79 en que asistí pasmado, recién llegado de Pamplona, al espectáculo de unos manifestantes muy serios gritando por la calle Aragón "Juan Carlos, escucha, Sofía está en la ducha" y cosas de tono más procaz en las que se le advertía a "Juan Carlos, macho", de lo que Sofía, supuestamente, hacía con Camacho.

Y estando la marcha aburrida a uno se le va mirada del horizonte y se le pierde por cuestiones colaterales. Por eso podíamos ver arder algún contenedor en los cruces de las calles próximas. Era bastante fácil deducir quiénes eran los responsables y qué se proponían. Cuando la manifestación acabó, con la Internacional (yo ya no estoy en condiciones de cantar lo de "famélica legión") y El cant dels Segadors, intentamos alcanzar la Plaza de Cataluña para tomar el tren, pero nos lo impidió una nube de gas lacrimógeno, así que tuvimos que ir dando un rodeo hasta Arco de Triunfo, donde nos enteramos que el último tren ya había salido, así que la manifestación nos costó una pasta de taxi.

Uno que ha visto manifestaciones fuertes por Navarra, ve esto de Barcelona desde una cierta distancia. Y la verdad es que, sin minusvalorar su gravedad, no me parece que merezcan tanto aspaviento. Por supuesto, es condenable el gamberrismo ideológico, pero más que rasgarse las vestiduras delante de las cámaras, lo que hay que hacer es actuar con diligencia, inteligencia y discreción. Que para eso está la policía. La publicidad que se les está regalando a los vándalos es impagable. ¡Mira que se han dicho cosas terribles estos días! Incluso un periodista que personalmente tiene todo mi aprecio llegó a comparar los hechos del jueves con la Semana Trágica. Hombre... entre quemar containers y quemar conventos hay una diferencia notable. Los revolucionarios de hace un siglo querían, de verdad, hacer la revolución, estos muchachos sólo se hacen autopropaganda, a la cual contribuye mucho el escándalo de algunos políticos cuya ineficiencia ya no se puede ocultar más tiempo.

Pero lo más insufrible es que, como las desgracias nunca vienen solas, ahora parece haber llegado la hora de los sociólogos y como, por lo que se ve, la mayoría son muy buena gente, la mar de objetivos y con el corazón "más bien a la izquierda" (expresión que es una de las manifestaciones más cursis de la beatería moderna), después de decir que está muy mal quemar containers y asaltar tiendas, advierten de que no nos hemos de olvidar de "la violencia estructural", que es lo realmente preocupante y la raíz de todo el asunto.

Esto de la violencia estructural a mi me recuerda al "pecado estructural" de los teólogos de la liberación, que es un pecado con un pecador sin rostro. La cosa es paradójica, pero a los teólogos de la liberación la paradoja les resultaba útil para explicar que ellos estaban a favor de las víctimas del pecado estructural. Esto es lo mismo que nos vienen a decir los de la muchachada antisistema barcelonesa, con la diferencia que ahora son ellos los que se presentan como víctimas y, por lo tanto, de acuerdo con la lógica de la razón victimológica, como los cargados de razón. Los sociólogos que aparecen estos días por los medios de comunicación se presentan como los encargados de dar certificados de inocencia a las víctimas. Sí, nos vienen a decir, está mal lo que hacen, pero es que están desesperados. No miréis lo que hacen, mirad lo que padecenpor culpa de la violencia estructural.

Yo no tengo manera de saber lo que padecen, pero sospecho que la condición de víctima es una condición más desgraciada que honorable. Yo, al menos, no la quiero ni para mí ni para los míos. Lo noble, más bien, me parece que es no dejarse atrapar por la razón victimológica. Insisto: No sé cuánto padecen y no tengo por qué dudar de que muchos lo estén pasando muy mal,  pero sí sé, con completa seguridad, que el acto de quemar un container o de asaltar un comercio no es fruto de la violencia estructural, sino de una decisión libre (prefiero no considerar la alternativa de la enajenación mental). Lo hicieron porque quisieron. 

14 comentarios:

  1. Si, cierto, solo cabria preguntarse o al menos pregunto yo, porque la policia, la justicia y los medios no actuan asi contra gente del sistema bancario que roba y estafa a la gente, contra los politicos que mienten y estafan, contra los medios que manipulan y engañan... Podriamos seguir enumerando cosas y ademas sin olvidarnos de recordar la historia de esa cadena de cafeterias y de esos grandes almacenes o de lo que representa las sede de la bolsa de Barcelona. Si hicieramos eso tambien podriamos plantearnos como puede un gobierno ganar unas elecciones y hacer lo contrario de lo que dijo y no pasarle nada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El problema és que sí que actuen així: Tard, malament i a mitges.

      Ara, justificar cremar un establiment perquè és així o aixà per la seva història no fa més que treure raons als sindicats que no ens mereixem, per bons.

      Hi ha reflexions que no passen la més mínima prova d'honestedat intel·lectual i no parlo precisament de l'article que comentem, què és de les poques coses intel·ligents que he llegit sobre el tema.

      Eliminar
  2. Totalmente de acuerdo, la verdad es que tanto sociólogo a vueltas con el pecado estructural me agota y casi me vuelve facha, la verdad, suerte que una tiene sus principios estructurales aunque estén algo decadentes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. lo de los sindicatos es igual por todas partes, pero... es lo que tenemos, mientras no se le invente un sustituto.
      Me haalegrado leer tu punto de vista sobre lo ocurrido en Bcn, porque desde luego comparar lo ocurrido allí con klo de la semana trágica... me parece sacar las cosas de quicio,pero ya se sabe por allí se magnifica mucho.

      Eliminar
  3. Pues estoy muy de acuerdo con todo lo que dice, fíjese usted. Y en sabiendo que lo estaría, servidora se quedó en casita viendo que todo lo que pensaba que pasaría iba pasando. Una manifestación previsible, ¿dónde se ha visto? Qué aburrimiento; ya tiene usted razón, ya...

    ResponderEliminar
  4. Pues yo estuve a un instante de perder el conocimiento, debido a esos los gases que me provocaron casi la asfixia. Además sabía que después de las nueve de la noche, no habría servicios de trenes, (por tanto, permítame decirle, que pagó usted un pastón en taxi porque usted también quiso). Lea mi post "La pimienta no me deja respirar" http://monmayeutica.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  5. Lo de que se fuera usted de paseo no me ha sorprendido. Siempre lo he tenido por bastante conservador. A mí, que soy así como más progre y enemigo de los privilegios aristocráticos, me parece bien el no tener que hipotecar (tanto) la casa para ejercer mi parte de violencia estructural y despedir a alguien.

    ResponderEliminar
  6. Tampoco sabemos el alcance de lo sufrido por quienes ejercen la violencia estructural. Quizá sus actos también deban ser comprendidos, pese a ser censurables, como respuestas a causas ajenas a su voluntad.

    ResponderEliminar
  7. Respecto al "pecado estructural": ¿Cómo estaban tan seguros los téologos de la liberación de que no estaban considerando pecaminosa la misma realidad y, por lo tanto, al obra de Dios?
    Respecto a ka violencia estructural: La estructura no puede ser tan mala si permite que haya quien la denuncia desde una posición de incontaminada pureza. O todos estamos contaminados por el mal estructural (que sería así una reedición del pecado original) o hay que explicar por qué algunos están vacunados contra la infección y otros no y, sobre todo, por qué la vacuna no forma parte de la estructura.

    ResponderEliminar
  8. Las violencia nunca es gratuita ni se produce de una manera espontanea o natural (como las setas), siempre hay algo que mueve a unas personas marginales o marginadas a estas acciones que por otra parte son injustificables.
    Pero tambien habria que hablar de otro tipo de violencia o de injusticia que no produce en los tertulianos, periodistas, etc. el mismo rechazo o indignación, como son el hecho de la explotación obrera, campesina, infantil, etc. que ejercen muchas de estas multinacionales; el mal funcionamiento de la justicia en nuestro pais que permite que personajes como el Millet, Montull, Matas, Camps, etc. se paseen con plena libertad, algunos hasta presumen delante de la televisión, sin que, no solamente no hayan ido a prisión, sino que no han devuelto ni un solo euro de lo que robaron, lo cual si que nos deberia indignar a todos.
    En fin creo que la justicia en nuestro pais es un desastre.
    Bueno, aparte de todo esto, quiero felicitar a Goyo por su blog "El cafe de Ocata", lo suelo leer y estoy bastante de acuerdo con sus comentarios, pero nunca me he atrevido a escribir o comentar sus articulos, pero hoy hemos estado hablando en la comida con nuestro hijo Dani de todo esto y al leerte me he decidido a dejar mi comentario.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Andrés: ¿Y por qué ha de ser la violencia menos natural que la no violencia?

      Eliminar
  9. Les pregunto qué es eso de "lo estructural", nada tiene que ver a "lo estructurado" o por el contrario quieren decir eso mismo. A veces, con ustedes, me pierdo cuando usan términos tan raros...
    "lo XXX+al" parece que ahora todo ha de acabar en el sufijo "-al". Creo que fue un invento del pensamiento francés del segunda mitad del siglo XX, precisamente para evitar "la estructura".

    ResponderEliminar
  10. Gregorio,

    Yo tengo un amigo que es un caso muy curioso, pero no aislado, que todo hay que decirlo. El tiene la conciencia tranquilisima. Nada es nunca culpa suya, la culpa siempre es de los otros; es decir, los burgueses, los ricos, el capitalismo, etc. Te puedo asegurar que el pobre no es, ni muchisimo menos. A mi me parece que su caso es una version moderna y secularizada de la doctria protestante de la salvacion solo por la fe. El siempre ha dicho que su deber es votar a cierto partido (IU) y...ya esta. Se acabo. Finito. Y el, mas tranquilo que otra cosa. Como decia, me parece igual a los protestantes que se creen ya salvos porque han confesado su fe (sola fide) en Jesucristo, nada de obras. No hay nada como ser de izquierdas, y si es de toda la vida, mucho mejor, como aquel cristiano viejo de antanyo. Te lo cuento por aquello de la beateria moderna.
    R.D

    ResponderEliminar
  11. Estoy completamente de acuerdo que cada uno es responsable de sus acciones, pero es perverso echar gasolina a la hoguera.

    Estoy de acuerdo que la mani fue sosa, menos mal que detras de mi habian unos jovenes que nos obsequiaron con un gran sentido de la originalidad.

    ResponderEliminar

Vehemencia

 I Tras tres días sin poder separarme de Benjamin Labatut y su Maniac , pero ya he cerrado la última página. Y como suele ocurrir cuando has...