Aprovecho también para decirte que este 'blog' es una delicia y una oportunidad para nuestros esfuerzos filosóficos.
Perdón si me cuelgo de esta entrada para plantearte una pregunta, pero mi paseopor el café de Ocata se ha convertido en un tránsito por los senderos genuinos de la incertidumbre. En fin. Te planteo una pregunta anacrónica: ¿Y si ante la evidencia de la'gran conversación' y frente al 'cuidado del alma' ; un individuo decide declararse extranjero de su propia cultura, habiendo asimilado la experiencia del humanismo? ¿Cómo interpretarías esa decisión? Pido disculpas antemano por la impertinencia de mi comentario. La maravilla y la extrañeza de tu escritura son las culpables.
Nada de disculpas, porque pocas preguntas hay más pertinentes que esa. 1) La condición del filósofo es la de extranjero. 2) Todo lo que nos impide ser extranjeros es lo que nos impide ser filósofos. 3) Si no podemos ser filósofos, intentemos ser filósofos políticos. 4) Y si ni una cosa i otra, entonces seamos profesores de filosofía.
Cumpledía en "las afueras", el primero desde el que empezará a añorar los de "los adentros", ese celdario paraíso amniótico... ¡Enhorabuena! ¡Y salud para "nurturizarlo"...!
Hay dos clases de filósofos: los astutos y prudentes domésticos/y domesticados que están para cumplir un horario en las aulas y si tienen contactos pasan a formar parte de la família republicana de las Letras; y luego están los salvajes, torpes, toscos, brutos intempestivos..que se vuelven extranjeros hasta para sí mismos. Animus
Felicidades, de hecho el sentido de la vida es eso, nacer, crecer, reproducirse........para perpetuar la especie.
ResponderEliminarFELICITATS, IAIO!!!
ResponderEliminar¡Enhorabuena a toda la familia!
ResponderEliminarEmpezar el día con esta noticia ayuda a que uno mantenga la confianza en el futuro de la tribu.
¡Enhorabuena, Gregorio!
ResponderEliminarEnhorabuena, D, Gregorio.
ResponderEliminarDe este no hemos visto la imagen de la ecografía (...es broma)
ResponderEliminarFelicidades por esta segunda abuelidad
Henri de Wittgenstein
Bien! Muy bien. Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarBien! Muy bien. Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarEnhorabuena. Si el nieto se cuida, podrá llegar a celebrar el año 2100.
ResponderEliminarGabriel, como el arcángel. Bonito nombre.
Feliz cumpleprimerdía para tu sobri!!!
ResponderEliminarUn saludooo
Felicidades a Gabriel y a su orgulloso abuelo
ResponderEliminarGregorio, me sumo a las felicitaciones.
ResponderEliminarAprovecho también para decirte que este 'blog' es una delicia y una oportunidad para nuestros esfuerzos filosóficos.
Perdón si me cuelgo de esta entrada para plantearte una pregunta, pero mi paseopor el café de Ocata se ha convertido en un tránsito por los senderos genuinos de la incertidumbre. En fin. Te planteo una pregunta anacrónica: ¿Y si ante la evidencia de la'gran conversación' y frente al 'cuidado del alma' ; un individuo decide declararse extranjero de su propia cultura, habiendo asimilado la experiencia del humanismo? ¿Cómo interpretarías esa decisión?
Pido disculpas antemano por la impertinencia de mi comentario. La maravilla y la extrañeza de tu escritura son las culpables.
Nada de disculpas, porque pocas preguntas hay más pertinentes que esa.
Eliminar1) La condición del filósofo es la de extranjero.
2) Todo lo que nos impide ser extranjeros es lo que nos impide ser filósofos.
3) Si no podemos ser filósofos, intentemos ser filósofos políticos.
4) Y si ni una cosa i otra, entonces seamos profesores de filosofía.
4) Y si ni una cosa NI otra, entonces...
EliminarCumpledía en "las afueras", el primero desde el que empezará a añorar los de "los adentros", ese celdario paraíso amniótico... ¡Enhorabuena! ¡Y salud para "nurturizarlo"...!
ResponderEliminarHay dos clases de filósofos: los astutos y prudentes domésticos/y domesticados que están para cumplir un horario en las aulas y si tienen contactos pasan a formar parte de la família republicana de las Letras; y luego están los salvajes, torpes, toscos, brutos intempestivos..que se vuelven extranjeros hasta para sí mismos.
ResponderEliminarAnimus
Enhorabuena y felicidades.
ResponderEliminarY larga y fecunda vida a su nieto.
Enhorabuena, don Gregorio. Que crezca sano y feliz.
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