Buscar este blog

lunes, 10 de octubre de 2011

Están ustedes invitados

6 comentarios:

  1. Durante un tiempo en que no me ha sido posible dejar por aquí mis impertinencias (¿o acaso pensaba usted que me había vuelto una persona educada?), que se borraban nada más escribirlas, hasta que hoy he actualizado el Explorer.
    Lo digo por si le pasa lo mismo a alguien más.

    ResponderEliminar
  2. Don Claudio: Sería el mayor de los desastres, que la sal se volviera sosa.

    ResponderEliminar
  3. Bienvenida, doña Lola. Esto estaba desangelado (qué palabra, por cierto).

    ResponderEliminar
  4. Un buen lema: el valor de la escuela. Espero que el fondo valga la pena.

    ResponderEliminar
  5. Desde dentro de ella, sin embargo, lo que decimos es: ¡Hay que tener valor!, y que cada cual lo interprete a su manera.

    ResponderEliminar

Un amor perdurable a fuerza de no serlo

I En las últimas décadas del siglo XIX vivió en Oviedo un hidalgo llamado don Pepito Alegre, considerado unánimemente como «cumplido caballe...