Enhorabuena por la parte que le toca, Don Gregorio. Se ve claramente que apunta maneras y que -esa ce cedilla, la única mayúscula de su texto lo delata- su lengua vehicular será principalmente el catalán.
Ha comenzado a escribir con decisión, a puñetazos, que es la marca del genio literario. Pero pronto se ha cansado (que es la marca del genio literario postmoderno) y ha preferido entretenerse mordisqueando la funda de mis gafas.
Enhorabuena por la parte que le toca, Don Gregorio. Se ve claramente que apunta maneras y que -esa ce cedilla, la única mayúscula de su texto lo delata- su lengua vehicular será principalmente el catalán.
ResponderEliminarEnternecedor. Es casi un microrrelato.
ResponderEliminarUn abrazo, Gregorio
Ha comenzado a escribir con decisión, a puñetazos, que es la marca del genio literario. Pero pronto se ha cansado (que es la marca del genio literario postmoderno) y ha preferido entretenerse mordisqueando la funda de mis gafas.
ResponderEliminar¡Gran post! Mucho mejor que los del abuelo, ¡admítalo!
ResponderEliminarAngel: Lo reconozco, sin resquemor.... o quizás con una miajilla de nada.
ResponderEliminarSencillamente genial.
ResponderEliminarMuy lúcido.
Saludos.
Si ya está al cabo de la calle del valor de la cursiva, su capacidad analítica está fuera de toda duda... ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarSiento la envidia que es la cruz de la admiración. ¡Esto lo tenía que haber escrito mi hija, digo, yo!
ResponderEliminarGracias de todas maneras.
Sobretodo no lo desanimes.
ResponderEliminarImpresionante.
ResponderEliminarHe entrado el texto en el traductor de Google.
ResponderEliminarResultado: ¿Cómo le digo al abuelo que el que a mí me va es Carnap?
Pura lógica
ResponderEliminar