"Una pedagogía que, aún en nuestros días, se considere hija de la Ilustración y fundamente sus recursos educativos en la crítica, la liberación y el culto al 'yo', tal vez logre éxitos retóricos momentáneos, pero su carácter obsoleto es patente."
Naphta, en La Montaña Mágica, publicada en 1924
Esperemos que no nos quede esa salida. El mutis pr el foro que hace Naphta.
ResponderEliminarTe confieso que hay días en que me doy por vencido.
ResponderEliminarMe quedó grabado, más o menos, también de esta novela insondable..., en serio, ¡qué novela!:
ResponderEliminarel error radical de la pedagogía moderna es creer que los jóvenes aman la libertad cuando lo que quieren es la obediencia.
"la crítica, la liberación y el culto al 'yo'..."
ResponderEliminarSeguramente porque me falta el contexto, pero no consigo ver el nexo de unión entre estos tres conceptos... (Y el caso es que tengo un gran respeto por el genio literario de don Thomas Mann).
Lola: ¿Qué novela, efectivamente! ¡Hasta anticipó el debate de Davos Cassirer-Heidegger! Naphta, por su parte, ya veía en la pedagogía moderna el anuncio de las tribus urbanas, entre otras formas contemporáneas de mimetismo al grupo.
ResponderEliminarBrian: El nexo es Nietzsche.
ResponderEliminarSi no recuerdo mal, lo de "obsoleto" tenía mucho que ver con el momento, el del auge "modernísimo" entonces de lo esencial nacional,la voluntad, etc.
ResponderEliminarNos quedan los restos de ambas retóricas.Especialmente en su tierra se pueden ver en vivo y en directo.
Aguien: Me interesa mucho lo que plantea, ¿Cuál es entonces -según usted- el discurso no retórico de la educación que se practica, por lo visto, especialmente fuera de "mi" tierra?
ResponderEliminar