... en todo caso de lo que no tengo dudas es de que hay instituciones educativas privadas con un altísimo sentido del valor de lo público y de la educación republicana, e instituciones educativas mantenidas por el erario público con un alto sentido de la privacidad e inviolabilidad de su territorio. Hay -y no pocas- instituciones educativas sufragadas con los impuestos comunes que no por ello son públicas, y cuando se proclaman como tales parecen guiadas por el propósito de blindar tras ese título sus privilegios corporativos. Y hay -y no pocos- espacios públicos con el acceso restringido, privatizados por los que se proclaman defensores de lo público.
lunes, 20 de abril de 2009
Público vs privado I
... en todo caso de lo que no tengo dudas es de que hay instituciones educativas privadas con un altísimo sentido del valor de lo público y de la educación republicana, e instituciones educativas mantenidas por el erario público con un alto sentido de la privacidad e inviolabilidad de su territorio. Hay -y no pocas- instituciones educativas sufragadas con los impuestos comunes que no por ello son públicas, y cuando se proclaman como tales parecen guiadas por el propósito de blindar tras ese título sus privilegios corporativos. Y hay -y no pocos- espacios públicos con el acceso restringido, privatizados por los que se proclaman defensores de lo público.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Creo que hay que diferenciar entre financiacion y finalidad... algunos proyectos tienen financiacion publica pero nunca tuvieron una finalidad publica (subvenciones agricolas, por ejemplo).
ResponderEliminarLo mas grave son las instituciones cuya finalidad deberia ser publica pero que son, de facto, privadas... y se defienden en nombre de lo publico. Creo que estas ultimas son las que se merecen nuestra indignacion. Y creo que son estas de las que estas hablando.
Absolutamente cierto, y muy triste.
ResponderEliminarEs que pòcas cosas son tan privadas como la gestión de lo público.
ResponderEliminarPodríamos hablar tanto del tema. Lo primero que existe es una falta de corporativismo total, en lo público y en lo privado, pero bueno Gregorio, su entrada lo dice todo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Totalmente cierto: donde muchos dicen "protección de lo público" se ha de leer "blindaje con fondos públicos de intereses privados".
ResponderEliminarrA: Le acepto la enmienda.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, un ejemplo claro, clarísimo, son las escuelas. Son más públicas el Costa i Llobera, de Sarrià, o el Patufet-Sant Jordi de L'Hospitalet-centro que el Vedruna del Raval o los Escolapios de la Ronda???? En el caso de las escuelas, los puntos que se dan por 'vivir en el barrio' me parecen de una inmensa discriminación.
ResponderEliminarCom sempre, Gregorio, ho has clavat. No recordo haver llegit o sentit mai unes paraules que ho expliqués tan bé, en tan poques paraules.
ResponderEliminarJo, que he hagut de treballar al sector privat i concertat, he hagut de suportar -per part dels "mals" defensors del que és públic- com em feien el culpable de tots els mals de tota l'escola en general. I sempre havent-me de mossegar els llavis, pensant això que expresses tan bé.
Anda, yo fui al Costa i Llobera, en los tiempos que no hacia falta vivir en el barrio, y justo cuando la escuela paso de concertada a publica, y se monto un guirigay que aun me acuerdo. Termine en otra escuela (privada).
ResponderEliminarRecuerdo el guirigay, rA, eran los tiempos del CEPEC, una triste historia de nuestra historia (pedagógica).
ResponderEliminar