“¡Rousseau, Rousseau!”, exclama Hume, “¡Qué de cosas podría decir yo de este hombre! ¡Es tan fatuo que prefiere sentirse perseguido que ignorado! ¡Pero no me tiréis de la lengua, que después Voltaire me estira a mí de las orejas y quizás tenga razón al regañarme por haber sido demasiado severo con él! Añadiré sólo una cosa: fue capaz de aparecer en público vestido de armenio para que no lo reconocieran, cuando si de verdad quería ser invisible no tenía más que haber ido de Rousseau”
A Rousseau le caían de ambos lados, un tío interesante, no en vano le interesó tanto a Allan Bloom
ResponderEliminarEs que Rousseau tiene dos alma, una moderna y otra antigua y eso interesaba mucho en Chicago.
EliminarA la vez que criticaba al cristianismo, criticaba a la ilustración y, lo que era peor, a veces por motivos muy similares. En mi opinión, en lo que respecta a la crítica de la Ilustración, el tiempo le ha dado bastante la razón. Fue un ejemplo de pensador totalmente imprudente que se libró del patíbulo y la cárcel.
EliminarTrae usted la opinión de Voltaire sobre Rousseau, como antes la de Sartre sobre Camus. ¿Piensa en unas Vidas Paralelas de filósofos? No habría mejor perspectiva para enjuiciar a un filósofo que la de un colega contemporáneo.
En realidad todo lo que estoy trayendo al Café estos días está motivado por un doble proyecto que no para de enredarse en sí mismo: una serie de 5 conferencias que daré en La Caixa (Girona, Lleida i Tarragona) en otoño sobre los lugares de la filosofía y una relectura del Fedón que de nuevo me vuelve a demostrar que no había entendido casi nada de Platón.
EliminarEspero estar en Tarragona unos días a partir del 17 de Septiembre a un congreso de mi oficio, sería demasiada casualidad...
EliminarNo creo que casi nadie haya entendido casi nada de Platón, pero al menos usted, socráticamente, se da cuenta. Muchos discuten la interpretación de Platón que hacen Strauss y los suyos, pero a mi me parece que le han sacado mucho jugo, les ha llevado muy lejos.
A mi, que necesito muchos bastones (ni sé griego), leerlo, con la ayuda de lo que unos pocos han escrito sobre él, me ayuda a aprender a pensar y a leer. Por ahí tengo el comentario de Jasha Klein sobre el Menón.
Grégory....ud siempre deja la hª a medias, qué rabia da...
ResponderEliminarel traje armenio a qué es debido?
es que uno comienza a pensar mal de ud.... no de Rousseau (por supuesto)
HdW
Eso pregúnteselo usted a Hume.
Eliminaruyyyyyy qué rabia me da cuando echa pelotas fuera....eso me pasa por mi preguntar inocente!
EliminarHdW
Es que Hume es el que nos deja a medias. ¿Por qué Rousseau se vestía de armenio? Esa es uno de los muchos misterios de la historia de la filosofía, como el gallo de Sócrates o el robot femenino que (dicen) acompañaba a Descartes en sus travesías marítimas. Ya ve usted que quiero ser amable... pero esto es lo que hay.
ResponderEliminarRousseau padecía problemas urinarios. La holgada túnica de su vestimenta armenia le facilitaba las cosas, algunos dicen que por tener que orinar con frecuencia; otros, que ocultando catéteres. Cuando Boswell le visitó en Môtiers, le preguntó por el motivo de la vestimenta y Rousseau le mostró un catéter que en aquel tiempo le ayudaba con problemas de retención.
ResponderEliminarPues esto no lo sabía yo. Muchas gracias, don Bacon.
Eliminarsí interesante y demasiado humannno....pero por qué era armenia? y no argelina o tunezina o marroquí? por ejemplo....
ResponderEliminarera un estudioso del armenio?
era un mitólogo del mito de Er?
HdW