martes, 5 de agosto de 2014

¿Cómo sé si soy sabio?

Todo depende de si tengo o no la fuerza suficiente para renunciar.

3 comentarios:

  1. Uno nunca debe ser juez de sí mismo

    ResponderEliminar
  2. La renuncia, ¿no te priva de la experiencia y de la posibilidad de equivocarte, de disfrutar, de sufrir, de decepcionarte o de aprender?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso depende de cómo se quiera vivir la línea, si como una línea o como un zigzagueo constante en un plano.

      Eliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Derechos impostergables del niño

Hoy he estado hablando en Madrid de los derechos del hijo de una familia sensatamente imperfecta, que son, entre otros, los siguientes: Dere...