"Porque nadie es conocido por otro mejor que por sí mismo y, sin embargo, nadie se conoce tan bien a sí mismo que pueda estar seguro de su conducta de mañana".
Qué cierto, y qué olvidado. Pero darse cuenta implicaría dejar de indignarse por lo que otros hacen o dicen en situaciones en las que nunca nos hemos visto, algo que dejaría a los actuales profetas -y sus poetas- sin mucho que decir.
Qué cierto, y qué olvidado. Pero darse cuenta implicaría dejar de indignarse por lo que otros hacen o dicen en situaciones en las que nunca nos hemos visto, algo que dejaría a los actuales profetas -y sus poetas- sin mucho que decir.
ResponderEliminar