Guillaume Courtois (Il Borgognone), Estudio de un pastor, finales del siglo XVII.
La Navidad es, básicamente, la fiesta mayor de los pobres. Pienso en los pastores, que estaban tranquilamente haciendo lo que tenían que hacer, guardar su rebaño esperando que la noche transcurriese con tranquilidad. Fueron ellos los primeros en saber que una pareja recién llegada a Belén, con la intención de cumplir con un acto burocrático, inscribirse en un censo, había tenido un niño a la intemperie. Nada del otro mundo. Pero los pastores fueron capaces de sobreponerse a la rutina y sorprenderse y de repente (exaiphnês, es el adverbio griego que utiliza Lucas) lo que es de este mundo dejó de ser sólo de este mundo.
Feliz navidad, amigos.
De hecho los pastores eran casi unos parias. Hablaban un extraño dialecto y tenían restringidos lo que hoy llamaríamos "derechos civiles".
ResponderEliminarMuchas gracias e igualmente Don Gregorio.
ResponderEliminarA mi lo que más me llama la atención es que todo el mundo está haciendo lo que tiene que hacer. Y lo que tiene que hacer es o papeleo burocrático (José) o trabajar (los pastores). Nadie aparece ni rezando, ni haciendo penitencia, no flagelándose. Es decir el "exaiphnês" sólo es para los que no lo esperan, cosa, por cierto, llena de lógica.
ResponderEliminarFeliz navidad, D. Gregorio, y que el año que entra sea benévolo y propicio.
ResponderEliminarUn abrazo
Para empezar, ya hemos superado -y parece que indemnes- un fin del mundo.
ResponderEliminarA ver a que calendario se agarran ahora para seguir con lo del Fin del Mundo.
ResponderEliminarFeliz Navidad, Sr. Luri.
Me pregunto solo si esa noche tranquila de los pastores, mientras Don José llegaba para realizar su trámite burocrático, sucedió en diciembre. Se dirá que no es importante cuándo, que diciembre vale febrero y que febrero, mayo. Una sorpresa estos cristianos.
ResponderEliminarPues claro, en diciembre o en mayo: feliz navidad, Gregorio.
ResponderEliminarDos curiosidades que quizás les interesen.
ResponderEliminar1) En Lucas leemos que María tuvo que depositar al niño recién nacido en el pesebre de los animales porque no había sitio para ellos en la "katályma.” Esta palabra se suele traducir por "piso de arriba", pensando en un albergue o una posada. Los británicos la traducen por “inn”. Sea como sea, Lucas la utiliza una vez más,y sólo una: Jesús, la víspera de su muerte pregunta por la "katályma" donde comerá el cordero pascual con sus discípulos. Ahora sí tiene sitio. De hecho parece que la ha reservado.
2) Luchas utiliza también dos veces, y sólo dos, el adverbio griego "exaiphnês" (de repente, de pronto, súbitamente). La primera, cuando el ángel se presenta a los pastores. La segunda cuando Pablo, camino de Damasco, cae del caballo cegado por una luz inesperada.
Aquí es donde yo lo venía venir......al exaiphnês claro!
ResponderEliminarConsultando, consultando, me dí cuenta que este vocablo podría estar relacionado no tanto con el instante, el súbito, el de repente, como con el meteoro, cometa, estrella fugaz.
Tengan todos una feliz Navidad.
H. Ambossat
El "exaiphnês" es la oportunidad de la "epopteia"
ResponderEliminar¡Feliz navidad a todos!
ResponderEliminarParece normal que un nacimiento se célebre más en la casa del pobre que del rico. Llegan con pan debajo del brazo.
Un consejo para estas fiestas: si quieren alcanzar la excelencia no sigan al pie de la letra las Escrituras, sepan que el conocimiento está reñido con el amor. http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/12/21/actualidad/1356120041_305501.html
Otra vez la realidad nos supera.
Hombre, el amor adolescente, es decir el amor o ese amor, es un trabajazo.
ResponderEliminarLa idea piloto me parece buena.
Feliz Navidad, Gregorio, porque imagino que desde tu creencia será para ti una conmemoración solemne y entusiasta. Para mí son días excesivos e insoportables, pero en muchas ocasiones me han permitido, sin embargo, disfrutar de la compañía de amigos y familiares, ¡y estoy enormemente agradecido a las vacaciones ecolares, por supuesto!
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