Una defensa crepuscular de la filosofía...
En realidad sólo quería justificarme a mí mismo. Pero acepto sus palabras: el gallo, para los políticos; la lechuza, para nosotros.
Pues bonitos días nos dé Dios.
Tiene que haber gente pa tó, Don Gregorio. Afortunadamente.
I A veces pienso que los que trasteamos con la filosofía tenemos algún trastorno profundo. Lo nuestro no es normal. Lo digo porque escribie...
Una defensa crepuscular de la filosofía...
ResponderEliminarEn realidad sólo quería justificarme a mí mismo. Pero acepto sus palabras: el gallo, para los políticos; la lechuza, para nosotros.
ResponderEliminarPues bonitos días nos dé Dios.
EliminarTiene que haber gente pa tó, Don Gregorio. Afortunadamente.
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