lunes, 19 de noviembre de 2018

En la mágica Baeza

En Baeza. Sospecho que aquí, como en otros muchos lugares de España, hay jubilados que salen de casa con la íntima esperanza de encontrarse con un forastero que les pregunte por una dirección. ¡Y pobre de ti como caigas en sus amabilísimas y prolijas manos!

Si quieres ser flâneur
por estos lares,
no te pares,
viajero,
no te pares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

El pie bueno de un rey malvado

Hasta el muy socarrón Voltaire tiene sus momentos de ternura. Aparecen en los pasajes más insospechados de su obra. Por ejemplo en el Diccio...