"El abuelo de Kazi fue un soldado ruso desertor. El propio Kazi era de mediana estatura, con el rostro picado de viruelas, barba rala, ojos claros y mirada penetrante. A su padre le dio muerte derramándole aceite hirviendo en la boca. Se dedicaba a comerciar con vodka, hasta que se declaró profeta y emprendió la guerra santa... ¡Cuántos bandidos y líderes no están hechos de esta misma pasta!"
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