(¿Cómo estais todos en el Café Ocata? En los U$Adores no hay Café Ocata's: no estan permitidos, porque aqui, "acatas o no acatas, that is the question")
Hombre...muy oportuno. Telepatia... La Nausea...
Que buen tema en éstos tiempos que vivimos.
¿Qué haríamos hoy en día sin ella en éste Barco que cada día se nos mueve más y más, sin puertos, sin tierra, sin que nos podamos bajar, al menos que no nos tiren por la borda a la hora de palmar?
Yo creo que en el entrópico aquelarre actual, ya sin muchas esperanzas que deshojar, la Nausa ha venido en nuestra ayuda como duende alado que de nosotros se ha apiadado al vernos tan tragi-comicamente zozo-brar, o brar-zozo, que es igual.
Porque mediante ella podemos vaciarnos lo que hay que expulsar, arrojar lo que hay que tirar, desembuchar lo que a diario nos hacen embuchar, lo que constantemente nos hacen tragar, y en este sentido la Nausa es la gran medicina que nos restablece el sistema vegetativo en buen lugar para poder asi seguir navegando en éste Barco que cada día se nos mueve más y más, sin puertos, sin tierra, sin que nos podamos bajar...
Porque imaginemosnos marearse en el Barco sin Nausea, sin poder vomitar, aguantando todo el tiempo lo que tenemos que echar...uf...sería una tortura!, ¿no?
"Vomita, hombre, lo que te excede", dice un proverbio hindú. Y es verdad. Y sin la Nausea no podría llevarse a cabo esta terapia tan ancestral.
'Yo soy yo, y mi nausea'. Sin ella no podríamos existir ni seguir achicando agua en éste temporal.
¿Se le olvidaría a don Sartre éste lado 'barquero' del polígono que trató en su libro? No lo creo. Simplemente lo articuló de otra manera. Es que hay muchas formas de decir lo mismo.
Leído en "Izquierda y Derecha": "Yo tengo escrito que hay personas que sólo se sienten morales cuando tienen náuseas. Son las dominadas por la indignación moral, que es, precisamente, la actitud que cree más noble el vómito que el apetito".
Entónces, como de Nausa se trata, tendríamos que aclarar:
No, la Nausa de marras, éste vómito, no tiene nada que ver con la 'moralidad', ni mucho menos con una "actitud que cree más noble el vómito que el apetito" ...¡Por dios y todos los santos del calendario ateo! ...¿Cómo va a ser mas "noble" la expulsión de los olorosos jugos gástricos que el placer de comer? No.
Aqui la Nausea tiene que ver con lo que Wilhelm Reich estipula en su libro "La Función del Orgasmo", dónde establece así la formula del orgasmo en éste motor de cuatro tiempos: TENSIÓN → CARGA → DESCARGA → RELAJACIÓN
Ni que decir tiene que esa DESCARGA reichiana equivale a la susodicha NAUSEA.
Tal vez porque todas las inequidades de la política del 'free world', sus inmoralidades y actitudes innobles, --complicidades consumadas-- no sean más que 'coitus interruptus' dónde el orgasmo nos lo hacen tener afuera del lugar natural dónde debía ocurrir, y ésta 'tensión' y 'carga' la tenemos que solucionar con la extratemporal vomitada descargadora del proverbio hindú del "Vomita, hombre, lo que te excede" Es Eros contra Tanatos. No moralidad contra inmoralidad.
(¿Cómo estais todos en el Café Ocata?
ResponderEliminarEn los U$Adores no hay Café Ocata's:
no estan permitidos, porque aqui,
"acatas o no acatas, that is the question")
Hombre...muy oportuno.
Telepatia...
La Nausea...
Que buen tema
en éstos tiempos que vivimos.
¿Qué haríamos hoy en día sin ella en éste Barco
que cada día se nos mueve más y más,
sin puertos, sin tierra, sin que nos podamos bajar,
al menos que no nos tiren por la borda a la hora de palmar?
Yo creo que en el entrópico aquelarre actual,
ya sin muchas esperanzas que deshojar,
la Nausa ha venido en nuestra ayuda
como duende alado que de nosotros se ha apiadado
al vernos tan tragi-comicamente zozo-brar,
o brar-zozo, que es igual.
Porque mediante ella podemos vaciarnos
lo que hay que expulsar,
arrojar lo que hay que tirar,
desembuchar lo que a diario nos hacen embuchar,
lo que constantemente nos hacen tragar,
y en este sentido la Nausa es la gran medicina
que nos restablece el sistema vegetativo en buen lugar
para poder asi seguir navegando en éste Barco
que cada día se nos mueve más y más,
sin puertos, sin tierra, sin que nos podamos bajar...
Porque imaginemosnos marearse en el Barco sin Nausea,
sin poder vomitar, aguantando todo el tiempo
lo que tenemos que echar...uf...sería una tortura!, ¿no?
"Vomita, hombre, lo que te excede",
dice un proverbio hindú.
Y es verdad.
Y sin la Nausea no podría llevarse a cabo
esta terapia tan ancestral.
'Yo soy yo, y mi nausea'.
Sin ella no podríamos existir
ni seguir achicando agua en éste temporal.
¿Se le olvidaría a don Sartre éste lado 'barquero'
del polígono que trató en su libro?
No lo creo.
Simplemente lo articuló de otra manera.
Es que hay muchas formas de decir lo mismo.
Leído en "Izquierda y Derecha":
ResponderEliminar"Yo tengo escrito que hay personas que sólo se sienten morales cuando tienen náuseas. Son las dominadas por la indignación moral, que es, precisamente, la actitud que cree más noble el vómito que el apetito".
Entónces, como de Nausa se trata, tendríamos que aclarar:
No, la Nausa de marras, éste vómito,
no tiene nada que ver con la 'moralidad',
ni mucho menos con una "actitud que cree más noble el vómito que el apetito"
...¡Por dios y todos los santos del calendario ateo!
...¿Cómo va a ser mas "noble" la expulsión de los olorosos jugos gástricos
que el placer de comer?
No.
Aqui la Nausea tiene que ver con lo que Wilhelm Reich estipula
en su libro "La Función del Orgasmo", dónde establece así
la formula del orgasmo en éste motor de cuatro tiempos:
TENSIÓN → CARGA → DESCARGA → RELAJACIÓN
Ni que decir tiene que esa DESCARGA reichiana
equivale a la susodicha NAUSEA.
Tal vez porque todas las inequidades de la política del 'free world',
sus inmoralidades y actitudes innobles,
--complicidades consumadas--
no sean más que 'coitus interruptus'
dónde el orgasmo nos lo hacen tener
afuera del lugar natural dónde debía ocurrir,
y ésta 'tensión' y 'carga' la tenemos que solucionar
con la extratemporal vomitada descargadora
del proverbio hindú del "Vomita, hombre, lo que te excede"
Es Eros contra Tanatos.
No moralidad contra inmoralidad.