La muerte es algo claro y transparente. Sólo guarda un problema por solucionar: ¿por qué no la aceptamos? http://antoniopriante.wordpress.com/2013/04/09/la-muerte/
Veo que impera la alacridad y lamento secesionarme de ella, pero es muy probable que el libro se escribiera en tiempos de crisis profunda, como la actual. El único problema serio que veo yo, ¡y cada vez más cerca...!, es cómo elegir un modo de desaparecer de este mundo que no les suponga a los descendientes un gasto casi suntuario para despedirse de unos despojos. Antes había entierros "de pobre", y bien que me acogería a él si pudiera garantizar que no violaran mi último voluntad, pero ahora, el más barato sube a casi 12.000 euros pel cap baix i cot i fred i immòbil...Problemas, muchos: ¿es mejor tirarse por la borda de un crucero en plena noche en el Caribe, lugar predilecto de los tiburones?, ¿es preferible buscar una trocha oculta, cerca del Matarraña? , ¿o mejor una bosque frondoso por los Montes Universales?, ¿o un rincón de piedra donde las aves carroñeras del Monfragüe convirtieran la muerte en rito tibetano? Dan de sí, estos problemas, y mejor tener claro el plan e incluso el año, el día y la hora..., e ir apartando los fondos para ese último viaje a lo conocido.
Cando me poñan o hábito, se é que o levo; cando me metan na caixa se é que a teño; cando o responso me canten, se hai con que pagarlle ós cregos, e cando dentro da cova... ¡Que inda me leve San Pedro se só ó pensalo non río con unha risa dos deños! ¡Que enterrar han de enterrarme anque non lles den diñeiro!...
ejercios, para ejercer? ;)
ResponderEliminarMe imagino un Little Blue Book no. 525: Death: Problems solved.
ResponderEliminarM'imagino un Little Blue Book no. 526:la mort és purament, un canvi més
ResponderEliminarEn realidad,lo que me sucederá mañana es tan oculto,tan grave como lo que me sucederá después de la muerte.'
ResponderEliminarLeon Bloy, Diarios
La muerte es algo claro y transparente. Sólo guarda un problema por solucionar: ¿por qué no la aceptamos? http://antoniopriante.wordpress.com/2013/04/09/la-muerte/
ResponderEliminarPorque es un médico muy sádico: nos impone un régimen tan extraordinariamente severo que te deja en los huesos.
EliminarVeo que impera la alacridad y lamento secesionarme de ella, pero es muy probable que el libro se escribiera en tiempos de crisis profunda, como la actual. El único problema serio que veo yo, ¡y cada vez más cerca...!, es cómo elegir un modo de desaparecer de este mundo que no les suponga a los descendientes un gasto casi suntuario para despedirse de unos despojos. Antes había entierros "de pobre", y bien que me acogería a él si pudiera garantizar que no violaran mi último voluntad, pero ahora, el más barato sube a casi 12.000 euros pel cap baix i cot i fred i immòbil...Problemas, muchos: ¿es mejor tirarse por la borda de un crucero en plena noche en el Caribe, lugar predilecto de los tiburones?, ¿es preferible buscar una trocha oculta, cerca del Matarraña? , ¿o mejor una bosque frondoso por los Montes Universales?, ¿o un rincón de piedra donde las aves carroñeras del Monfragüe convirtieran la muerte en rito tibetano? Dan de sí, estos problemas, y mejor tener claro el plan e incluso el año, el día y la hora..., e ir apartando los fondos para ese último viaje a lo conocido.
ResponderEliminarMorirse, efectivamente, se ha puesto imposible. O por los cielos.
EliminarCando me poñan o hábito,
ResponderEliminarse é que o levo;
cando me metan na caixa
se é que a teño;
cando o responso me canten,
se hai con que pagarlle ós cregos,
e cando dentro da cova...
¡Que inda me leve San Pedro
se só ó pensalo non río
con unha risa dos deños!
¡Que enterrar han de enterrarme
anque non lles den diñeiro!...
(Rosalía de Castro, Follas Novas)
[athini_glaucopis@hotmail.com]