Mientras ponía la mesa estaba tarareando "Shine on You Crazy Diamond", la canción que Pink Floyd compuso como tributo a Syd Barret y de repente me he dado de narices contra la realidad.
- ¿Pink Floyd, verdad? -me ha preguntado mi hijo. Y la mirada irónica, un poco perdona vidas que me ha lanzado me ha hecho temer lo peor.
Y lo peor se ha hecho carne.
- ¿Cómo te lo tomarías si alguien te dice que eres un Pink Floyd? -me ha vuelto a preguntar.
- ¿Qué?
- Imagínate que oyes "¡Ese tío está hecho un Pink Floyd!", ¿cómo lo interpretarías?
- ¿Un Pink Floyd?
- ¡Resalta el Pink!
Ya me venía temiendo desde hacía tiempo que eso que los Pink Floyd se oyeran tanto en las salas de espera de los dentistas no presagiaba nada bueno. Pero, la verdad, no estaba preparado para esto. Resulta que ser un "Pink Foyd" es ser un lerdo, un quillo, un desaguisado existencial, una ridiculez, un don nadie con infulillas.
Me he sentado en silencio y en silencio he comenzado a comer y mientras me llevaba la cuchara a la boca mis veinte años han venido a llamar a mi puerta, desconsolados, y no he tenido ni un mísero vaso de agua que ofrecerles. Nos hemos mirado boquiabiertos, me han dado la espalda, y se han ido, empequeñeciéndose más y más, camino del horizonte de la desmemoria.
Encuentro, a las 2:35 de la madrugada del sábado, que Claudio proponen completar este texto con el siguiente vídeo (y, por supuesto, le hago caso inmediatamente):
Luri,
ResponderEliminarcon su permiso, se lo dedico a su hijo.
ΤΙ ΕΙΝΑΙ ΑΥΤΟ
http://www.youtube.com/watch?v=mNK6h1dfy2o
Claudio...muy bonito corto...
ResponderEliminarGregorio...respecto lo de su hijo, sinceramente, creo que el problema es de él... ya madurará...
Cuando hice la mili a mediados de los ochenta (debí de ser el último tonto que la hizo), en el cuartel era expresión común decirle a alguien: "¿Pero tú de qué vas? ¿de Pink Floyd?" Nunca entendí del todo el sentido de la expresión, pero parece que tiene que ver con tener esas ínfulas de la última acepción.
ResponderEliminarPor lo menos le puede decir a su hijo que la expresión no es de esta generación y que tiene por lo menos veinticinco años de antigüedad.
però esto ya es viejo, lo de ir de Pink Floyd, entendido en el sentido de ir de colgado o de sobrado no siendo el caso de quien así es nombrado. És más, diria que esta expresión la usaba Mikimoto, o sea que hablo de tiempo ha.
ResponderEliminarJoder que buen video, demasiado largo para estos tiempos, pero toda una lección, yo ya lo sabia, pero no podria expresarlo mejor. Lo dicho, para el que quiere, en este blog siempre se aprende algo. Muchisimas Gracias
ResponderEliminar¡Coño con don Claudio! ¡Es una mina!
ResponderEliminarLo de envejecer jode hasta a los que renunciaron al romanticismo hace tiempo.
"Todavía aprendo", dice el viejo goyesco. Muchos lo ven como un mensaje optimista (claro, hay que apuntarse a cursos de yoga, a excursiones, a...). Yo preferiría que no me contara lo que aún aprende. Ya lo voy aprendiendo yo, sin prisas, oiga.
ResponderEliminarPasar a ser padres de nuestros padres es algo durísimo y, a la vez, grandioso. De una calidad y complejidad emocional difícil de asimilar. Imposible anteponer la esperanza y la ilusión que ponemos de natural en los hijos... Eso sí que da para un tratado filosófico.
Viejo son los trapos, decía mi abuelo. Y mucha razón tenía. Abrazos.
ResponderEliminarUn buen post, muchas gracias.
ResponderEliminarSaludos desde un pueblecillo de Cataluña central-un poco al sur.
Yo tengo una guitarra de 12 cuerdas por una única razón: tocar "Wish you were here" una o dos veces al año.
ResponderEliminarel corto ya lo conocìa yo y tambien su "guapeza"
ResponderEliminara pesar de los años.
buee puede decir que tiene una superadmiradora en Mèxico...algo es algo no? :)