Buscar este blog

viernes, 29 de abril de 2016

Todos los hombres son buenos

"Los vecinos de la víctima aseguran que están sorprendidos por lo sucedido. No se esperaban un hecho de esa naturaleza. Es más, aseguran que tanto la mujer centenaria como su hija son encantadoras y que también lo es el hombre arrestado".

Realmente todo sería más fácil si nuestro cuerpo enviara señales de maldad al vecindario desde semanas antes de que cometamos un delito. Para la policía todo sería mas cómodo, los índices de criminalidad se desplomarían y los vecinos dejarían de escandalizarse. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Las águilas no cazan moscas

 I Respuesta de Rémi Brague al periodista que le pregunta cómo logra un estilo tan claro: «El bolígrafo rojo de mi mujer» II Viaje casi relá...