Dada su beligerancia hacia el coaching, actividad a la que me dedico professionalmente. Le agradeceria una critica argumentada que tanto podria replicar como aprender algo útil. Y al menos yo podria saber si és que no hablamos de lo mismo o hay algo de peso... Agradecido de antemano.
Mi reticencia beligerante hacia los entrenadores se limita al mundo educativo, y nace de los entrenadores que he conocido, que le dan tanta importancia a los medios y a los procedimientos que ignoran la relevancia del fin, pero ese no es un mal de los entrenadores, sino un síntoma d nuestro tiempo. Digamos que no tendría nada en contra d un entrenador aristotélico.
Dada su beligerancia hacia el coaching, actividad a la que me dedico professionalmente. Le agradeceria una critica argumentada que tanto podria replicar como aprender algo útil. Y al menos yo podria saber si és que no hablamos de lo mismo o hay algo de peso...
ResponderEliminarAgradecido de antemano.
Mi reticencia beligerante hacia los entrenadores se limita al mundo educativo, y nace de los entrenadores que he conocido, que le dan tanta importancia a los medios y a los procedimientos que ignoran la relevancia del fin, pero ese no es un mal de los entrenadores, sino un síntoma d nuestro tiempo. Digamos que no tendría nada en contra d un entrenador aristotélico.
EliminarInteresante ! Que caracterizaria una entrenador aristotelico ? Como se le reconoceria ?
ResponderEliminarLa respuesta está muy bien desarrollada en la Ética a Nicómaco.
EliminarGracias, lo leere...
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