Venga ya...suéltate el pelo y otros pespuntes capilares --al menos que no se sufra de calvicie, claro--: ¿qué quieres decir con eso de que Podemos es un magnífico negocio para el PP? ¿'Podemos' saberlo?
¿Que qué representa la monarquia? Pues un magnifico negocio para los plutócratas
Respecto a Podemos y el PP, no estaría tan seguro, al menos en el negocio de las elecciones europeas. No voy a defender a Podemos, pero si el PP entiende que el efecto "Podemos" solo afecta a la izquierda es que no se entera de la misa la media.
Me parece tambien que muchos votantes del PP sufrian un sindrome de estocolmo. Que por mucho que el PP pudiese tener la razon, le pierde su política de comunicacion, detras de televisores de plasma, representando un vocabulario y pensamiento de macho hispano, sin rectificar, todo más, alegando incomprensión y salidas de contexto para captar el voto de lo más rancio de este pais. Por mucho que digan los del PP que ellos son más inteligentes y la razón está de su parte, lo explican fatal a sus votantes, lo cual se suma a su descrédito.
O el consenso del 78 ha caido, o el Rey se lo ha creido. En cualquiera de los dos casos, el PP perderá negocio electoral, y la intención de voto conservador y liberal se deslazará a UPD o Ciudadanos.
Las intenciones que tengan las gentes de Podemos no son políticamente muy relevantes. Tampoco es muy relevante políticamente cómo se ven los de Podemos así mismos. Lo único políticamente relevante en democracia es su fuerza electoral y aquí el caladero está claro: sus votos provienen de IU y del PSOE. Podemos, objetivamente, fragmenta a la izquierda más de lo que está. Teniendo en cuenta al señor d'Hont, las consecuencias me parecen claras. Por otra parte, si los de Podemos son coherentes con sus postulados, no parece que vayan a aliarse jamás con la "casta" socialista. Ergo... Si yo fuera del PP, desde un punto de vista estrictamente partidista, estaría celebrando la aparición de Podemos.
M, dice usted dos cosas que me parecen polémicas: 1) Que el consenso del 78 ha caído. Habrá caído cuando haya otro consenso alternativo. Y hoy no aparece en el horizonte. 2) El PP perderá negocio electoral: Depende de la recuperación económica y de la capacidad del PSOE para presentarse verosímilmente como un partido centrista.
¿No le parece suficiente que el Rey abdique? ¿no le parece que el descalabro del PSOE sea suficiente para que caiga el consenso del 78? ¿cree que con la fuerza votante al PP será suficiente para mantenerlo? Yo creo que el PP solo puede confiar en el voto conservador. Es lo que creo, nada más. En cualquier caso, si tiene usted razón Podemos pudiera ser una oportunidad de negocio para las próximas elecciones. Hoy por hoy, el PP tiene sus propios problemas, y solo se salvará si la economia ayuda, sí, pero como no creo que sea algo espectacular, el negocio dependerá del marketing.
Pues no. No me parece. Lo que me parece es exactamente lo contrario: la abdicación del rey es la prueba de que el consenso se mantiene vivo. Mire usted, un consenso se puede romper por varios motivos: a) porque existe otro mayor, es decir, más integrador: si este es el caso, bienvenido sea... pero, la verdad, yo no lo veo. b) porque uns de las partes no se creyó nunca el consenso y ahora, considerando que tiene las de ganar, quiere tomarse la revancha. Si este es el caso, quien lo rompa, que se asegure primero que tiene suficientes fuerzas a su favor. No sea que salga escaldado. c) porque las nuevas generaciones se consideran más listas que sus padres (que hicieron la transición) y están dispuestas a resucitar a los abuelos (que hicieron la guerra civil). Si es así, habrá que ir pensando en el exilio. e) ...
Creo que no hacemos ningún buen negocio cargándonos el mito de la transición.
El mito ahí queda. Pero aunque es de máxima actualidad la abdicación del Rey, su relevo y el debate sobre la pertinencia o no de la monarquía, lo que creo que es realmente importante ahora no es tanto el modelo de Estado, sea éste monárquico o republicano, sino la urgencia de un cambio de modelo democrático y si Felipe VI será capaz, le dejarán, o querrá llevarlo a cabo.
Vivimos simple y llanamente en una plutocracia con toda la desfachatez, con la partitocracia en primer plano. El problema no es el bipartidismo, en Francia, por ejemplo, hacen la segunda vuelta precisamente para conseguirlo y permitir una mayor gobernabilidad, lo contrario de Italia en constante ingobernabilidad. Todos los cambios que hay que hacer desde hace décadas pero que nadie quiere hacer (ley diáfana de financiación de los partidos, reforma de la ley electoral, reforma de la Administración, etc.), me recuerda la histórica reforma agraria que ningún partido o político emprendían porque al caciquismo y sus tentáculos políticos no lo permitía, como ya sabemos. Lo mismo que ahora. Ni a las oligarquías (o clases extractivas para ser modernos), ni al PP ni al PSOE les interesa cambiar ni un ápice el statu quo, es decir, sus intereses y privilegios. ¿Dónde se ha visto pervivir en la absurda “obediencia de partido”? para eso, con un diputado que acudiera al Congreso en representación de todo el partido sería más que suficiente y nos ahorraríamos actuaciones teatrales y mucho dinero.
En EE.UU, los partidos en época de elecciones se convierten en enormes máquinas electorales, pero una vez acabadas las elecciones, cada partido se retira, y cada uno de los diputados y senadores es dueño y señor absoluto de su escaño. En una plutocracia como la nuestra, es imposible que los tres poderes estén separados y sean independientes; por tanto, el cruce de intereses está servido en bandeja, y las correspondientes corruptelas y corrupciones al por mayor. Sin separación de los tres poderes no hay democracia que valga. No sé de qué nos sorprendemos. Y no sé a qué viene hablar de unos y de otros si lo fundamental lo tenemos hecho unos zorros. Harán todo lo que sea necesario para que todo siga igual. Y si tenemos que ser claros, decir que el cuarto poder, por desgracia, se ha vuelto cómplice, forma ya parte del sistema y también actor del simulacro y punto al que hemos llegado.
A mi todo esto de la plutocracia que usted tanto resalta me parece simplemente la manifestación de un cansancio: nos hemos cansado de que las cosas nos vayan bien. Nos hemos cansado de normalidad. Tras siglos de guerras civiles hemos experimentado el magnífico aburrimiento democrático y a algunos les sabe a poco y que quiere emociones fuertes. La democracia es una causa imperfecta, e incluso muy imperfecta. Pero es que no existen las causas humanas perfectas.
No se enfade conmigo señor Luri. Si usted tiene otra manera de definir la modalidad democrática en la que vivimos, se lo agradeceré, a mi no se me ocurre otra de más elegante. Sé perfectamente la imperfección de la democracia, y me quedó muy claro el día que de joven leí la mejor definición moderna que conozco, que creo es de Churchill: “la democracia es el peor de los sistemas posibles si exceptuamos todos los demás”. Y sé muy bien que hay maneras y maneras de organizarla. Y a eso iba.
Soy de los que está convencido de que, con todos sus defectos, limitaciones y la correspondiente parte de azar, y sin querer entrar en detalles (ahí tenemos libros a montones que hablan de ello), la transición fue modélica y que sin la figura del Rey y todos los que la propiciaron no hubiéramos gozado de los mejores años de bienestar que ha disfrutado España en siglos.
Pero los defectos y limitaciones también propician que, con el tiempo, la fruta se pudra, y siga pudriéndose si no se pone remedio. Desear que se reforme la Constitución en todo aquello que suponga mejoras, pedir cumplir las reformas prometidas y las leyes tan necesarias, desear que la separación de poderes sea real, entender que el enroque de los dos principales partidos favorece más que nunca la corrupción, innata a la condición humana, ¿a todo eso le llama usted deseo de emociones fuertes?
Mi padre se fue a la guerra a defender la república con 18 años porque no tuvo más remedio, y yo soy un niño de la posguerra, así que sé qué hablo. Puede que otros sí, pero le aseguro que de emociones fuertes ya he tenido mi ración y no deseo más. Precisamente por eso me preocupo.
no entiendo esa frase: "nos hemos cansado de que las cosas nos vayan bien"...¿a Ud? ¿a los de su generación? No será que nos hemos dado cuenta, de que las cosas-iban-sobre ruedas gracias a que las ruedas estaban hinchadas de aire, de vacío, de nada, de dinero-deuda por ejemplo............¿nos es el Estado de bienestar el germen nacido de unas entelequias como los Bancos centrales ("nacionales" antes) ahora "zona-monetarios"? No Sr Luri, las cosas no han ido bien...y nos hemos cansado sino que las cosas-se-han cansado de nosotros!!! estudiante-de-Wittenberg
Belart, no solamente no me enfado con usted sino que le agradezco sus palabras, de verdad. Digamos que a mi lo que me da miedo es nuestra historia en los dos últimos siglos. ¿La Constitución actual es un paréntesis en esa historia? Esperemos que no. En todo caso, bienvenidas sean las reformas que sean capaces de conseguir un consenso mayor que el que hizo posible esta Constitución que parece haberse quedado sin defensores públicos.
Perdonen que me entrometa, tiene usted razón, Sr. Luri, pero no la tiene toda y me parece que la expresión Plutocracia que usa uno de sus comentaristas define bastante bien la realidad actual. Aquí nadie se ha cansado de vivir bien, ¡por Dios!, en todo caso nos hemos cansado de eufemismos que no describen la realidad.
¿A usted le parece que en España hay separación de poderes efectiva y no testimonial?
¿A usted le parece que la disciplina de voto en los grupos parlamentarios es correcta y necesaria?
¿Usted cree que una democracia puede funcionar correctamente sin separación de poderes?
Si cree que sí no siga leyendo.
Los pactos son buenos si son útiles y es evidente que el pacto que alumbró la transición fue útil y, por consiguiente, bueno también. Fue un pacto consecuencia de un empate y de una impotencia de las partes por imponer sus tesis. Los que lo llevaron a término fue gente, en su mayoría, inteligente, de mente y corazón, abiertos y prácticos. Pero eso no significa que las partes fueran moralmente iguales a pesar de tener cada una que asumir responsabilidades graves en su pasado. Una visión sesgada de la transición se fundamenta en eso, en decir que las dos Españas eran diferentes pero moralmente equivalentes. No es cierto con todos mis respetos. Este punto de vista lo comprendo, pero en buena parte me ofende y ofendería a mi padre si lo pudiera oír.
¿Se imagina usted que la II Guerra Mundial hubiera terminado con un empate y Alemania continuara exhibiendo en su bandera la esvástica nazi y no se hubiera procesado a ninguno de sus criminales y Hitler tuviera un panteón enorme construido por judíos asesinados? El tratado de Versalles fue una de las causas de aquella guerra, es verdad, pero no es toda la verdad.
Italia al terminar la guerra, y Grecia al ser derrocados los coroneles, consideraron que la Monarquía, al haber, por decirlo finamente, contemporizado con el régimen caído, debía someterse por sí misma a referéndum. Luego seguirían el resto de leyes democráticas. En España no, ¿el rey no había contemporizado con el franquismo?, según parece no o, en todo caso para muchos, que lo hiciera no tiene la más mínima importancia, había necesidades más urgentes que ya forman parte de un pasado, según ellos, que no afecta a su hijo. ¿Eso es así?
En el proceso de la transición el rey tenía una función clave, neutralizar a los militares, y así lo hizo. Esa, como todos dicen, fue su reválida que superó con nota. Eso es cierto.
Pero el rey también tenía y tiene otro deber por ley, el de facilitar el consenso entre partes enfrentadas y, según mi modesto parecer, no cumplió con su obligación, como mínimo, en el proceso que alumbró el segundo Estatut. Después del 23F se acomodó hasta que la realidad le ha estallado en la cara.
La Constitución fue lo que fue y es lo que todavía es. Un paquete en lo que había de todo, o lo tomabas entero o lo dejabas entero, incluido el privilegio vasco y navarro que hasta hace dos días al resto de España le parecía bien o simplemente le daba igual que le daba lo mismo, no así el Estatut catalán, ése no, nunca, jamás.
¿Se imagina usted que el pueblo español hubiera rechazado la Constitución?, ¿el Rey habría abdicado y se hubiese proclamado una República?, ¿hubiera seguido como rey franquista y habría restablecido los principios del movimiento y aquí paz y allí gloria?, ¿qué habría sucedido? Nadie lo sabe, pero es evidente que no había alternativa entre el sí y el no en relación a la monarquía en concreto. Y eso, para mí, es un déficit de origen muy grave, una especie de fraude, una tara de nacimiento que continua. Comprensible, quizás, en su momento, pero ahora no.
Teme usted con razón, Sr. Luri, la influencia de nuestra historia pasada. Es un temor razonable que yo comparto también.
En el Reino Unido para favorecer el “no” en el próximo referéndum escocés están hablando de Historia, de la mutua historia vivida entre ingleses y escoceses. Gracias a este debate el no está creciendo en relación al sí, ¿por qué?, porque su mutua historia es una historia de éxito.
¿España tiene una historia de éxito común? Lamentablemente no.
España ha vivido los mejores años de su historia española, eso también es verdad, pero la situación actual no es la de 1975, creo yo.
Si el déficit democrático de la Constitución no se soluciona o corrige, la realidad también nos estallará en la cara, no sé de qué manera, nadie puede conocer el futuro, pero es indudable, creo, que nada bueno podrá salir de ese deber incumplido.
Mire usted don Peletero: la transición fue posible porque personas que no habían sido demócratas en su vida, como Fraga y Carrillo, decidieron estrecharse la mano y buscar vías para hacer política sin necesidad de eliminarse el uno al otro. Esto puede parecerles a algunos poco; a mi, me parece un milagro: un fenómeno inédito en nuestra historia. Respecto a las imperfecciones de nuestra democracia... me parecen bastante comprensibles para un país en el que hace sólo 75 años no había apenas demócratas. Las democracias que han perdurado son las que han creído en los ajustes permanentes. El borrón y cuenta nueva es propio de quien se niega a aprender nada de su experiencia pasada. Pero en cualquier caso, insisto: lo políticamente sano es sustituir el consenso constitucional, si estuviere agotado, por un consenso al menos similar al que hizo posible la constitución.
Mire usted, Don Gregorio, lo acaba de definir perfectamente y no creo que sea demasiado diferente a lo que yo he dicho si es que me ha leído bien.
“la transición fue posible porque personas que no habían sido demócratas en su vida, como Fraga y Carrillo, decidieron estrecharse la mano y buscar vías para hacer política sin necesidad de eliminarse el uno al otro.”
Mejor explicado imposible.
A nadie sensato le parece poco eso, sería estúpido pensarlo, ¿no le parece? Como también sería estúpido no hacer esas renovaciones.
“El borrón y cuenta nueva es propio de quien se niega a aprender nada de su experiencia pasada.”
Naturalmente, sería también estúpido no hacerlo, de eso se trata, de aprender del pasado y la transición forma parte de ese pasado del que debemos aprender, a no ser que todavía nos encontremos en la lógica emocional y política del año 1975. A veces parece que sí. Y muchos, no lo digo por usted, quieren que esa lógica emocional y política se perpetúe… ¿cuánto?, ¿40 años más?
Quizá tienen razón, quizá sea verdad que no sabemos salir de la cápsula del año 1975, si así es poco hemos avanzado y aprendido.
“Pero en cualquier caso, insisto: lo políticamente sano es sustituir el consenso constitucional, si estuviere agotado, por un consenso al menos similar al que hizo posible la constitución.”
Ahí vamos, o deberíamos ir, las personas sensatas sabiendo que sí uno se calla y no se queja todos pensarán que no hay ninguna necesidad de un nuevo consenso. ¿Cómo se sabe que el consenso anterior está agotado?, ¿cómo sabemos que necesitamos uno nuevo?, ¿en qué sentido? Muchos piensan que para qué demonios necesitamos un nuevo consenso con lo bien que estamos, otros quieren convertir legítimamente España en Francia, otros quieren hacerlo, también legítimamente, en Suiza. ¿Dónde se encuentra el punto medio, el punto de consenso? ¿En no hacer nada? Desgraciadamente eso es una partida de póquer o de mus.
A corto y medio plazo don Gregorio probablemente tenga usted razón.
Y no sólo por la fragmentación de la izquierda que evidentemente beneficia al PP , es que con la evaporación del socialismo catalán el escenario es óptimo, siempre y cuando logren movilizar a su electorado por supuesto. Porque lo que a pasado en Valencia por ejemplo, y esto tomando por término de comparación la europeas anteriores, ha sido tremendo...
A largo plazo, ya veremos.
El Frente Nacional tuvo por padrino al PS de Mitterand que llegó a cambiar la ley electoral para que el FN tuviese grupo propio en la Asamblea Nacional ...
El FN es el primer partido proletario de Francia. Sus bases -y eso parece bien estudiado- son las que antiguamente votaban al PCF. Digo esto para dejar clara mi opinión: en política solamente tienen razón los que pronostican el pasado (y sólo en algunos casos). Los casos de corrupción del PP serían letales para este partido si su electorado tuviese una alternativa centrista creíble. No parece ser el caso. En consecuencia, opta por la abstención. Pero ideológicamente sabe lo que es. Por eso para movilizarse puede tener suficiente con sentir la radicalización de la izquierda... o con encontrar una figura en el PP capaz de movilizarlo... o con ambas cosas.
Estoy de acuerdo con lo que usted dice sobre el PP, aunque no creo que en las próximas generales tengan los casi once millones de votos que tuvieron en las del 2011, por mucho que jueguen al "¡Qué vienen los rojos!"
Puse el ejemplo del FN francés, que le pareció a la derecha francesa durante muchos años un aliado objetivo del PS y no un substituto "national" del PCF , para indicar que efectivamente las cosas se sabe como empiezan pero no como acaban. Bruno Mégret rompió el FN en los noventa llevándose a casi dos tercios de los cargos electos porque quería pactar con la derecha mayoritaria y no continuar con la estrategia "ni izquierda ni derecha", ahora parece que la familia Le Pen no estaba en las nubes...
Lo del socialismo es de pena, en Catalunya i en el resto, sólo ellos tienen la culpa de la pérdida de votos en una època en la cual podían haber centralizado con cierta habilidad muchas incomodidades, Podemos es una incognita, puede durar dos días o no, veremos. Las izquierdas siempre caen en esas divisiones pero ya no sé ni si son izquierdas o qué.
Yo creo que la crisis del PSC ha puesto de manifiesto dos cosas: 1. Que nunca fue un partido homogéneo. 2. Que esto no importaba cuando había cargos que repartir.
¿Cuánto tiempo puede soportar, en las condiciones actuales, un partido socialdemócrata fuera del poder, sin que la segunda ley de la termodinámica haga su efecto? Me refiero al aumento irreversible de la entropía, es decir, del desorden.
Si aparecen movimientos populistas, estilo Podemos, con fuerte soporte mediático, que redefinen, al menos en el corto plazo, sin encontrar ninguna resistencia, y en pocos meses, lo que se considera aceptable y lo que signfica "ser de izquierdas", una parte significativa de su electorado y con ella el propio partido, se orientará en esa dirección. Como habrá otros sectores que pugnarán en dirección contraria, las fuerzas contrapuestas acabarán con la unidad y, con ella se irá la mínima posibilidad de regresar al poder de nuevo.
El universo mental de la izquierda ha terminado identificando "ser" con "hacer" y "conseguir". Algo, por otra parte, muy similar a lo que ocurre con el nacionalismo, lo que explica la atracción fatal que éste ha tenido en aquella. Los extremeños se tocan. La marca "somos de izquierdas" acaba siendo más importante que el producto ofrecido, dejando en segundo plano consideraciones sobre la viabilidad económica e institucional, adaptación a las nuevas condiciones globales cambiantes, pluralidad de agentes e intereses sociales, etc. Otra baza más que Podemos, sin duda, sabrá aprovechar.
Por otro lado, ¿qué lugar queda para una política socialdemocráta si no se dispone de la palanca del gasto público masivo para alcanzar sus objetivos, y además la gente lo sabe?. La radicalidad, con sus soluciones fáciles para mundos imaginarios, queda como única opción. Bueno, hay otra, que sería la elegida por el SPD, pero no creo que aquí tenga muchos seguidores.
No es de extrañar que se termine buscando refugio en los afines, procurando mantener su apoyo a cualquier precio y abandonándose a la satisfacción narcisista de verse tan radicales como el que más, esperando que vengan tiempos mejores. Y en ese terreno de juego, Podemos simpre podrá maniobrar mucho mejor.
Por lo anterior creo que, efectivamente, el PP, salvo "cisnes negros", o que su proverbial torpeza le juegue una mala pasada, puede sacar mucho rendimiento de toda esta historia
Podemos está difundiendo esa cosa del PPSOE. Si esa imagen cala, el gran perjudicado será el PSOE. Todo esto hay que tomarlo cum grano salis, pero Podemos sólo puede cuajar si es capaz de romper el centrismo del PSE. Y de nuevo, el gran perjudicado será el PSOE. La izquierda juega un juego realmente extraño.Tan extraño que alguien finalmente se acabará dando cuenta. Por eso tradicionalmente todos estos movimientos han acabado proporcionando cuadros nuevos al PSOE. ¿Será Podemos la escuela de cuadros del PSOE? Me juego un euro que a medio plazo, sí. Pero mientras tanto, le están haciendo la campaña al PP.
Puede que la manera en la que la izquierda se ha manifestado verbalmente con motivo de la abdicación movilice,por miedo a los electores del PP que se abstuvieron en las europeas.Puede incluso que pierdan votos de gente que les apoyó ,no para que reclamaran la tercera república con el apoyo ,además ,de los independistas ,sino para que clamaran contra las políticas de ajustes. Si esto fuera así,lo mejor que podría hacer el PSOE es ir hacia el centro,porque la izquierda más radical ya tiene a Podemos y a otros grupos.Además,ha demostrado ,como partido que se alterna en el gobierno ,cómo se olvidan los programas electorales.La izquierda tiene eso en cuenta , especialmente las nuevas generaciones
Por cierto, señores anónimos: decía el viejo Platón que la condición principal para que exista una comunidad sana es que la gente vaya con la cara descubierta y se conozcan unos ciudadanos a otros sin subterfugios.
Venga ya...suéltate el pelo y otros pespuntes capilares
ResponderEliminar--al menos que no se sufra de calvicie, claro--:
¿qué quieres decir con eso de que Podemos
es un magnífico negocio para el PP?
¿'Podemos' saberlo?
Tu dirás. Qué pena que los socialistas no den señales de alarma, se han ido de rositas.
ResponderEliminar¿Que qué representa la monarquia? Pues un magnifico negocio para los plutócratas
ResponderEliminarRespecto a Podemos y el PP, no estaría tan seguro, al menos en el negocio de las elecciones europeas. No voy a defender a Podemos, pero si el PP entiende que el efecto "Podemos" solo afecta a la izquierda es que no se entera de la misa la media.
Me parece tambien que muchos votantes del PP sufrian un sindrome de estocolmo. Que por mucho que el PP pudiese tener la razon, le pierde su política de comunicacion, detras de televisores de plasma, representando un vocabulario y pensamiento de macho hispano, sin rectificar, todo más, alegando incomprensión y salidas de contexto para captar el voto de lo más rancio de este pais. Por mucho que digan los del PP que ellos son más inteligentes y la razón está de su parte, lo explican fatal a sus votantes, lo cual se suma a su descrédito.
O el consenso del 78 ha caido, o el Rey se lo ha creido. En cualquiera de los dos casos, el PP perderá negocio electoral, y la intención de voto conservador y liberal se deslazará a UPD o Ciudadanos.
M.
Las intenciones que tengan las gentes de Podemos no son políticamente muy relevantes. Tampoco es muy relevante políticamente cómo se ven los de Podemos así mismos. Lo único políticamente relevante en democracia es su fuerza electoral y aquí el caladero está claro: sus votos provienen de IU y del PSOE. Podemos, objetivamente, fragmenta a la izquierda más de lo que está. Teniendo en cuenta al señor d'Hont, las consecuencias me parecen claras. Por otra parte, si los de Podemos son coherentes con sus postulados, no parece que vayan a aliarse jamás con la "casta" socialista. Ergo... Si yo fuera del PP, desde un punto de vista estrictamente partidista, estaría celebrando la aparición de Podemos.
ResponderEliminarM, dice usted dos cosas que me parecen polémicas:
1) Que el consenso del 78 ha caído. Habrá caído cuando haya otro consenso alternativo. Y hoy no aparece en el horizonte.
2) El PP perderá negocio electoral: Depende de la recuperación económica y de la capacidad del PSOE para presentarse verosímilmente como un partido centrista.
¿No le parece suficiente que el Rey abdique? ¿no le parece que el descalabro del PSOE sea suficiente para que caiga el consenso del 78? ¿cree que con la fuerza votante al PP será suficiente para mantenerlo? Yo creo que el PP solo puede confiar en el voto conservador. Es lo que creo, nada más. En cualquier caso, si tiene usted razón Podemos pudiera ser una oportunidad de negocio para las próximas elecciones. Hoy por hoy, el PP tiene sus propios problemas, y solo se salvará si la economia ayuda, sí, pero como no creo que sea algo espectacular, el negocio dependerá del marketing.
EliminarM.
Pues no. No me parece. Lo que me parece es exactamente lo contrario: la abdicación del rey es la prueba de que el consenso se mantiene vivo. Mire usted, un consenso se puede romper por varios motivos:
Eliminara) porque existe otro mayor, es decir, más integrador: si este es el caso, bienvenido sea... pero, la verdad, yo no lo veo.
b) porque uns de las partes no se creyó nunca el consenso y ahora, considerando que tiene las de ganar, quiere tomarse la revancha. Si este es el caso, quien lo rompa, que se asegure primero que tiene suficientes fuerzas a su favor. No sea que salga escaldado.
c) porque las nuevas generaciones se consideran más listas que sus padres (que hicieron la transición) y están dispuestas a resucitar a los abuelos (que hicieron la guerra civil). Si es así, habrá que ir pensando en el exilio.
e) ...
Creo que no hacemos ningún buen negocio cargándonos el mito de la transición.
El mito ahí queda. Pero aunque es de máxima actualidad la abdicación del Rey, su relevo y el debate sobre la pertinencia o no de la monarquía, lo que creo que es realmente importante ahora no es tanto el modelo de Estado, sea éste monárquico o republicano, sino la urgencia de un cambio de modelo democrático y si Felipe VI será capaz, le dejarán, o querrá llevarlo a cabo.
EliminarVivimos simple y llanamente en una plutocracia con toda la desfachatez, con la partitocracia en primer plano. El problema no es el bipartidismo, en Francia, por ejemplo, hacen la segunda vuelta precisamente para conseguirlo y permitir una mayor gobernabilidad, lo contrario de Italia en constante ingobernabilidad. Todos los cambios que hay que hacer desde hace décadas pero que nadie quiere hacer (ley diáfana de financiación de los partidos, reforma de la ley electoral, reforma de la Administración, etc.), me recuerda la histórica reforma agraria que ningún partido o político emprendían porque al caciquismo y sus tentáculos políticos no lo permitía, como ya sabemos. Lo mismo que ahora. Ni a las oligarquías (o clases extractivas para ser modernos), ni al PP ni al PSOE les interesa cambiar ni un ápice el statu quo, es decir, sus intereses y privilegios. ¿Dónde se ha visto pervivir en la absurda “obediencia de partido”? para eso, con un diputado que acudiera al Congreso en representación de todo el partido sería más que suficiente y nos ahorraríamos actuaciones teatrales y mucho dinero.
En EE.UU, los partidos en época de elecciones se convierten en enormes máquinas electorales, pero una vez acabadas las elecciones, cada partido se retira, y cada uno de los diputados y senadores es dueño y señor absoluto de su escaño. En una plutocracia como la nuestra, es imposible que los tres poderes estén separados y sean independientes; por tanto, el cruce de intereses está servido en bandeja, y las correspondientes corruptelas y corrupciones al por mayor. Sin separación de los tres poderes no hay democracia que valga. No sé de qué nos sorprendemos. Y no sé a qué viene hablar de unos y de otros si lo fundamental lo tenemos hecho unos zorros. Harán todo lo que sea necesario para que todo siga igual. Y si tenemos que ser claros, decir que el cuarto poder, por desgracia, se ha vuelto cómplice, forma ya parte del sistema y también actor del simulacro y punto al que hemos llegado.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarA mi todo esto de la plutocracia que usted tanto resalta me parece simplemente la manifestación de un cansancio: nos hemos cansado de que las cosas nos vayan bien. Nos hemos cansado de normalidad. Tras siglos de guerras civiles hemos experimentado el magnífico aburrimiento democrático y a algunos les sabe a poco y que quiere emociones fuertes. La democracia es una causa imperfecta, e incluso muy imperfecta. Pero es que no existen las causas humanas perfectas.
EliminarNo se enfade conmigo señor Luri. Si usted tiene otra manera de definir la modalidad democrática en la que vivimos, se lo agradeceré, a mi no se me ocurre otra de más elegante. Sé perfectamente la imperfección de la democracia, y me quedó muy claro el día que de joven leí la mejor definición moderna que conozco, que creo es de Churchill: “la democracia es el peor de los sistemas posibles si exceptuamos todos los demás”. Y sé muy bien que hay maneras y maneras de organizarla. Y a eso iba.
EliminarSoy de los que está convencido de que, con todos sus defectos, limitaciones y la correspondiente parte de azar, y sin querer entrar en detalles (ahí tenemos libros a montones que hablan de ello), la transición fue modélica y que sin la figura del Rey y todos los que la propiciaron no hubiéramos gozado de los mejores años de bienestar que ha disfrutado España en siglos.
Pero los defectos y limitaciones también propician que, con el tiempo, la fruta se pudra, y siga pudriéndose si no se pone remedio. Desear que se reforme la Constitución en todo aquello que suponga mejoras, pedir cumplir las reformas prometidas y las leyes tan necesarias, desear que la separación de poderes sea real, entender que el enroque de los dos principales partidos favorece más que nunca la corrupción, innata a la condición humana, ¿a todo eso le llama usted deseo de emociones fuertes?
Mi padre se fue a la guerra a defender la república con 18 años porque no tuvo más remedio, y yo soy un niño de la posguerra, así que sé qué hablo. Puede que otros sí, pero le aseguro que de emociones fuertes ya he tenido mi ración y no deseo más. Precisamente por eso me preocupo.
no entiendo esa frase: "nos hemos cansado de que las cosas nos vayan bien"...¿a Ud? ¿a los de su generación?
EliminarNo será que nos hemos dado cuenta, de que las cosas-iban-sobre ruedas gracias a que las ruedas estaban hinchadas de aire, de vacío, de nada, de dinero-deuda por ejemplo............¿nos es el Estado de bienestar el germen nacido de unas entelequias como los Bancos centrales ("nacionales" antes) ahora "zona-monetarios"? No Sr Luri, las cosas no han ido bien...y nos hemos cansado sino que las cosas-se-han cansado de nosotros!!!
estudiante-de-Wittenberg
Belart, no solamente no me enfado con usted sino que le agradezco sus palabras, de verdad.
EliminarDigamos que a mi lo que me da miedo es nuestra historia en los dos últimos siglos. ¿La Constitución actual es un paréntesis en esa historia? Esperemos que no. En todo caso, bienvenidas sean las reformas que sean capaces de conseguir un consenso mayor que el que hizo posible esta Constitución que parece haberse quedado sin defensores públicos.
Perdonen que me entrometa, tiene usted razón, Sr. Luri, pero no la tiene toda y me parece que la expresión Plutocracia que usa uno de sus comentaristas define bastante bien la realidad actual. Aquí nadie se ha cansado de vivir bien, ¡por Dios!, en todo caso nos hemos cansado de eufemismos que no describen la realidad.
Eliminar¿A usted le parece que en España hay separación de poderes efectiva y no testimonial?
¿A usted le parece que la disciplina de voto en los grupos parlamentarios es correcta y necesaria?
¿Usted cree que una democracia puede funcionar correctamente sin separación de poderes?
Si cree que sí no siga leyendo.
Los pactos son buenos si son útiles y es evidente que el pacto que alumbró la transición fue útil y, por consiguiente, bueno también. Fue un pacto consecuencia de un empate y de una impotencia de las partes por imponer sus tesis. Los que lo llevaron a término fue gente, en su mayoría, inteligente, de mente y corazón, abiertos y prácticos. Pero eso no significa que las partes fueran moralmente iguales a pesar de tener cada una que asumir responsabilidades graves en su pasado. Una visión sesgada de la transición se fundamenta en eso, en decir que las dos Españas eran diferentes pero moralmente equivalentes. No es cierto con todos mis respetos. Este punto de vista lo comprendo, pero en buena parte me ofende y ofendería a mi padre si lo pudiera oír.
¿Se imagina usted que la II Guerra Mundial hubiera terminado con un empate y Alemania continuara exhibiendo en su bandera la esvástica nazi y no se hubiera procesado a ninguno de sus criminales y Hitler tuviera un panteón enorme construido por judíos asesinados? El tratado de Versalles fue una de las causas de aquella guerra, es verdad, pero no es toda la verdad.
Italia al terminar la guerra, y Grecia al ser derrocados los coroneles, consideraron que la Monarquía, al haber, por decirlo finamente, contemporizado con el régimen caído, debía someterse por sí misma a referéndum. Luego seguirían el resto de leyes democráticas. En España no, ¿el rey no había contemporizado con el franquismo?, según parece no o, en todo caso para muchos, que lo hiciera no tiene la más mínima importancia, había necesidades más urgentes que ya forman parte de un pasado, según ellos, que no afecta a su hijo. ¿Eso es así?
En el proceso de la transición el rey tenía una función clave, neutralizar a los militares, y así lo hizo. Esa, como todos dicen, fue su reválida que superó con nota. Eso es cierto.
EliminarPero el rey también tenía y tiene otro deber por ley, el de facilitar el consenso entre partes enfrentadas y, según mi modesto parecer, no cumplió con su obligación, como mínimo, en el proceso que alumbró el segundo Estatut. Después del 23F se acomodó hasta que la realidad le ha estallado en la cara.
La Constitución fue lo que fue y es lo que todavía es. Un paquete en lo que había de todo, o lo tomabas entero o lo dejabas entero, incluido el privilegio vasco y navarro que hasta hace dos días al resto de España le parecía bien o simplemente le daba igual que le daba lo mismo, no así el Estatut catalán, ése no, nunca, jamás.
¿Se imagina usted que el pueblo español hubiera rechazado la Constitución?, ¿el Rey habría abdicado y se hubiese proclamado una República?, ¿hubiera seguido como rey franquista y habría restablecido los principios del movimiento y aquí paz y allí gloria?, ¿qué habría sucedido? Nadie lo sabe, pero es evidente que no había alternativa entre el sí y el no en relación a la monarquía en concreto. Y eso, para mí, es un déficit de origen muy grave, una especie de fraude, una tara de nacimiento que continua. Comprensible, quizás, en su momento, pero ahora no.
Teme usted con razón, Sr. Luri, la influencia de nuestra historia pasada. Es un temor razonable que yo comparto también.
En el Reino Unido para favorecer el “no” en el próximo referéndum escocés están hablando de Historia, de la mutua historia vivida entre ingleses y escoceses. Gracias a este debate el no está creciendo en relación al sí, ¿por qué?, porque su mutua historia es una historia de éxito.
¿España tiene una historia de éxito común? Lamentablemente no.
España ha vivido los mejores años de su historia española, eso también es verdad, pero la situación actual no es la de 1975, creo yo.
Si el déficit democrático de la Constitución no se soluciona o corrige, la realidad también nos estallará en la cara, no sé de qué manera, nadie puede conocer el futuro, pero es indudable, creo, que nada bueno podrá salir de ese deber incumplido.
Mire usted don Peletero: la transición fue posible porque personas que no habían sido demócratas en su vida, como Fraga y Carrillo, decidieron estrecharse la mano y buscar vías para hacer política sin necesidad de eliminarse el uno al otro. Esto puede parecerles a algunos poco; a mi, me parece un milagro: un fenómeno inédito en nuestra historia. Respecto a las imperfecciones de nuestra democracia... me parecen bastante comprensibles para un país en el que hace sólo 75 años no había apenas demócratas. Las democracias que han perdurado son las que han creído en los ajustes permanentes. El borrón y cuenta nueva es propio de quien se niega a aprender nada de su experiencia pasada. Pero en cualquier caso, insisto: lo políticamente sano es sustituir el consenso constitucional, si estuviere agotado, por un consenso al menos similar al que hizo posible la constitución.
EliminarMire usted, Don Gregorio, lo acaba de definir perfectamente y no creo que sea demasiado diferente a lo que yo he dicho si es que me ha leído bien.
Eliminar“la transición fue posible porque personas que no habían sido demócratas en su vida, como Fraga y Carrillo, decidieron estrecharse la mano y buscar vías para hacer política sin necesidad de eliminarse el uno al otro.”
Mejor explicado imposible.
A nadie sensato le parece poco eso, sería estúpido pensarlo, ¿no le parece? Como también sería estúpido no hacer esas renovaciones.
“El borrón y cuenta nueva es propio de quien se niega a aprender nada de su experiencia pasada.”
Naturalmente, sería también estúpido no hacerlo, de eso se trata, de aprender del pasado y la transición forma parte de ese pasado del que debemos aprender, a no ser que todavía nos encontremos en la lógica emocional y política del año 1975. A veces parece que sí. Y muchos, no lo digo por usted, quieren que esa lógica emocional y política se perpetúe… ¿cuánto?, ¿40 años más?
Quizá tienen razón, quizá sea verdad que no sabemos salir de la cápsula del año 1975, si así es poco hemos avanzado y aprendido.
“Pero en cualquier caso, insisto: lo políticamente sano es sustituir el consenso constitucional, si estuviere agotado, por un consenso al menos similar al que hizo posible la constitución.”
Ahí vamos, o deberíamos ir, las personas sensatas sabiendo que sí uno se calla y no se queja todos pensarán que no hay ninguna necesidad de un nuevo consenso. ¿Cómo se sabe que el consenso anterior está agotado?, ¿cómo sabemos que necesitamos uno nuevo?, ¿en qué sentido? Muchos piensan que para qué demonios necesitamos un nuevo consenso con lo bien que estamos, otros quieren convertir legítimamente España en Francia, otros quieren hacerlo, también legítimamente, en Suiza. ¿Dónde se encuentra el punto medio, el punto de consenso? ¿En no hacer nada? Desgraciadamente eso es una partida de póquer o de mus.
Saludos.
A corto y medio plazo don Gregorio probablemente tenga usted razón.
ResponderEliminarY no sólo por la fragmentación de la izquierda que evidentemente beneficia al PP , es que con la evaporación del socialismo catalán el escenario es óptimo, siempre y cuando logren movilizar a su electorado por supuesto. Porque lo que a pasado en Valencia por ejemplo, y esto tomando por término de comparación la europeas anteriores, ha sido tremendo...
A largo plazo, ya veremos.
El Frente Nacional tuvo por padrino al PS de Mitterand que llegó a cambiar la ley electoral para que el FN tuviese grupo propio en la Asamblea Nacional ...
El FN es el primer partido proletario de Francia. Sus bases -y eso parece bien estudiado- son las que antiguamente votaban al PCF. Digo esto para dejar clara mi opinión: en política solamente tienen razón los que pronostican el pasado (y sólo en algunos casos).
EliminarLos casos de corrupción del PP serían letales para este partido si su electorado tuviese una alternativa centrista creíble. No parece ser el caso. En consecuencia, opta por la abstención. Pero ideológicamente sabe lo que es. Por eso para movilizarse puede tener suficiente con sentir la radicalización de la izquierda... o con encontrar una figura en el PP capaz de movilizarlo... o con ambas cosas.
Estoy de acuerdo con lo que usted dice sobre el PP, aunque no creo que en las próximas generales tengan los casi once millones de votos que tuvieron en las del 2011, por mucho que jueguen al "¡Qué vienen los rojos!"
EliminarPuse el ejemplo del FN francés, que le pareció a la derecha francesa durante muchos años un aliado objetivo del PS y no un substituto "national" del PCF , para indicar que efectivamente las cosas se sabe como empiezan pero no como acaban. Bruno Mégret rompió el FN en los noventa llevándose a casi dos tercios de los cargos electos porque quería pactar con la derecha mayoritaria y no continuar con la estrategia "ni izquierda ni derecha", ahora parece que la familia Le Pen no estaba en las nubes...
Once millones son muchos votos. Pero... con un parlamento muy fracturado quizás no los necesite.
EliminarLo del socialismo es de pena, en Catalunya i en el resto, sólo ellos tienen la culpa de la pérdida de votos en una època en la cual podían haber centralizado con cierta habilidad muchas incomodidades, Podemos es una incognita, puede durar dos días o no, veremos. Las izquierdas siempre caen en esas divisiones pero ya no sé ni si son izquierdas o qué.
ResponderEliminarYo creo que la crisis del PSC ha puesto de manifiesto dos cosas:
Eliminar1. Que nunca fue un partido homogéneo.
2. Que esto no importaba cuando había cargos que repartir.
¿Cuánto tiempo puede soportar, en las condiciones actuales, un partido socialdemócrata fuera del poder, sin que la segunda ley de la termodinámica haga su efecto? Me refiero al aumento irreversible de la entropía, es decir, del desorden.
ResponderEliminarSi aparecen movimientos populistas, estilo Podemos, con fuerte soporte mediático, que redefinen, al menos en el corto plazo, sin encontrar ninguna resistencia, y en pocos meses, lo que se considera aceptable y lo que signfica "ser de izquierdas", una parte significativa de su electorado y con ella el propio partido, se orientará en esa dirección. Como habrá otros sectores que pugnarán en dirección contraria, las fuerzas contrapuestas acabarán con la unidad y, con ella se irá la mínima posibilidad de regresar al poder de nuevo.
El universo mental de la izquierda ha terminado identificando "ser" con "hacer" y "conseguir". Algo, por otra parte, muy similar a lo que ocurre con el nacionalismo, lo que explica la atracción fatal que éste ha tenido en aquella. Los extremeños se tocan. La marca "somos de izquierdas" acaba siendo más importante que el producto ofrecido, dejando en segundo plano consideraciones sobre la viabilidad económica e institucional, adaptación a las nuevas condiciones globales cambiantes, pluralidad de agentes e intereses sociales, etc. Otra baza más que Podemos, sin duda, sabrá aprovechar.
Por otro lado, ¿qué lugar queda para una política socialdemocráta si no se dispone de la palanca del gasto público masivo para alcanzar sus objetivos, y además la gente lo sabe?. La radicalidad, con sus soluciones fáciles para mundos imaginarios, queda como única opción. Bueno, hay otra, que sería la elegida por el SPD, pero no creo que aquí tenga muchos seguidores.
No es de extrañar que se termine buscando refugio en los afines, procurando mantener su apoyo a cualquier precio y abandonándose a la satisfacción narcisista de verse tan radicales como el que más, esperando que vengan tiempos mejores. Y en ese terreno de juego, Podemos simpre podrá maniobrar mucho mejor.
Por lo anterior creo que, efectivamente, el PP, salvo "cisnes negros", o que su proverbial torpeza le juegue una mala pasada, puede sacar mucho rendimiento de toda esta historia
Podemos está difundiendo esa cosa del PPSOE. Si esa imagen cala, el gran perjudicado será el PSOE. Todo esto hay que tomarlo cum grano salis, pero Podemos sólo puede cuajar si es capaz de romper el centrismo del PSE. Y de nuevo, el gran perjudicado será el PSOE. La izquierda juega un juego realmente extraño.Tan extraño que alguien finalmente se acabará dando cuenta. Por eso tradicionalmente todos estos movimientos han acabado proporcionando cuadros nuevos al PSOE.
Eliminar¿Será Podemos la escuela de cuadros del PSOE?
Me juego un euro que a medio plazo, sí. Pero mientras tanto, le están haciendo la campaña al PP.
Puede que la manera en la que la izquierda se ha manifestado verbalmente con motivo de la abdicación movilice,por miedo a los electores del PP que se abstuvieron en las europeas.Puede incluso que pierdan votos de gente que les apoyó ,no para que reclamaran la tercera república con el apoyo ,además ,de los independistas ,sino para que clamaran contra las políticas de ajustes.
ResponderEliminarSi esto fuera así,lo mejor que podría hacer el PSOE es ir hacia el centro,porque la izquierda más radical ya tiene a Podemos y a otros grupos.Además,ha demostrado ,como partido que se alterna en el gobierno ,cómo se olvidan los programas electorales.La izquierda tiene eso en cuenta , especialmente las nuevas generaciones
Por cierto, señores anónimos: decía el viejo Platón que la condición principal para que exista una comunidad sana es que la gente vaya con la cara descubierta y se conozcan unos ciudadanos a otros sin subterfugios.
ResponderEliminarSí, en la antigua democracia ateniense el voto no era secreto. Claro que eso favorecía el clientelismo.
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