Sí, pero a pesar de ello, lo que más me asombra es la capacidad de superación de los japoneses. Ayer contaban que en el terremoto de 1923 de menor intensidad murieron más de 100.000 personas. Además de su capacidad de mantener la serenidad y el orden.
Sí, pero a pesar de ello, lo que más me asombra es la capacidad de superación de los japoneses. Ayer contaban que en el terremoto de 1923 de menor intensidad murieron más de 100.000 personas. Además de su capacidad de mantener la serenidad y el orden.
ResponderEliminarEntre la naturaleza y el mercado se reparte la soberanía.
ResponderEliminarNo creo! sólo és un idiota con poder para hacerlo.
ResponderEliminarEstos católicos... Creo que es el que la tiene más grande.
ResponderEliminarAs flies to wanton boys are we to th' gods,
ResponderEliminarThey kill us for their sport.
(King Lear)
La naturaleza soberana de sus aguas y todas sus tierras, nos hace creer gobernada.
ResponderEliminarSaludos.
Felipe.
Entonces no hay más soberano que el Movimiento...,el de las placas tectonicas, claro.
ResponderEliminarHoracio lo expresó de manera lapidaria: “naturam expelles furca, tamen usque recurret.”
ResponderEliminarUna tragedia inmensa. Abrazos.
ResponderEliminarAcerca del trabajo manual.
ResponderEliminarhttp://www.slate.com/id/2288159/pagenum/all/
Gracias Claudio, el tema me interesa mucho.
ResponderEliminarLa primera tragedia es la estupidez de creer en la energía atòmica, la necedad humana de sentirse Dios.
ResponderEliminarLa energía atómica no es algo en lo que pueda creerse o no. Es algo que creamos, es.
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