Me acaba de llegar una oferta de una importante editorial rusa para publicar mi libro sobre los Mercader en su país. Por supuesto, aunque la oferta no me permitirá comprarme un atolón en los Mares del Sur, he dicho inmediatamente que sí. Este libro debe, sobre todo, leerse en ruso. Celebro, de nuevo, el azar amigo y la amistad. Gracias, querido Vladimir Kardaíl por tu generosidad al traducir el libro.
¡Estamos de enhorabuena, querida B.!
Enhorabuena.
ResponderEliminarEnhorabuena.
ResponderEliminarYa sabía yo que tanta visita de rusos tenía que dar fruto.
A ver si me animo leer el libro de una vez. Estoy leyendo "Maoismo. Una historia global" de Julia Lowell y es curiosa la cantidad de "mujeres fuertes" nacidas en entornos privilegiados que fueron madrinas de la Komintern.