Hace unos años tuve en mis manos el diario de un abogado católico barcelonés. Lo inicia el 1 de enero de 1938, en plena guerra civil y describe con una naturalidad asombrosa, casi costumbrista, tanto los desastres de la guerra como detalles íntimos de su biografía.
Junto a las explosiones de las bombas, el autor se detiene a hablar de una morena que se asoma cada día al balcón o de sus dudas sobre si debe continuar o no su noviazgo. Cree que quiere a su novia, pero la encuentra fea, prematuramente envejecida y vulgar… Intenta contarle de manera delicada sus sentimientos, pero ella se lo toma a broma.
Barcelona es un hervidero de sospechas. Se habla de quintacolumnismo. Hay detenciones. Hay mucho miedo a los coches desconocidos que se detienen por la noche ante las puertas de las casas. Una sospecha es una condena a muerte… si es que se sale vivo de la checa.
Uno de los detenidos es el hermano del autor. Sospecha que está en la checa de la calle Vallmajor. Corre con su cuñada a llevarle ropa limpia sin saber si lo encontrará aún con vida. "Vuelva usted la semana que viene", le dicen.
¿Cómo dejar a una novia a la que ya no quieres en medio de una guerra civil?
Como abogado tiene que defender a detenidos en los que son evidentes las huellas de malos tratos. El fiscal pide para su hermano pena de muerte. Lo defiende él y consigue 30 años de internamiento.
Aumentan los acusados de espionaje. Hay un fiscal de rasgos sádicos. Se burla de una mujer de más de sesenta años diciéndole que por las noches se sube a una escoba y se va a dormir con Franco, pero que lo que a ella le gustan son los "curitas".
Compra 25 gramos de tabaco por 40 pesetas. Una fortuna. Tiene mala conciencia, pero sabe que lo volverá a hacer.
Le gusta estar con su cuñada. Se siente a su lado mejor que con su novia.
El fiscal impertinente se dirige a una mujer acusada de haber robado en la fábrica en la que trabaja: "¿Pero mujer, si querías tener algo en la mano, por qué no te buscas un novio?”
En enero del 39 se hunde aparatosamente Cataluña y en esos días es su novia quien lo deja a él. Sorprendentemente ahora echa en falta a “esa chica que era tan mía”. Siguen las bombas, pero la gente parece acostumbrada.
Lunes 23 de enero: Barcelona, una ciudad muerta. Martes 24: llegan noticias de que ha caído Sant Boi. Hay mucha gente que carga con todo lo que puede y abandona la ciudad precipitadamente. Miércoles 25: Saqueo de las tiendas. Jueves 26: Barcelona liberada. “Toda la vida recordaré con emoción este día”.
Se apunta como voluntario en el ejército de Franco y viaja a Castellón. El 18 de marzo viendo a su alrededor el comportamiento de las tropas a cuyo lado combate, se pregunta: "¿Y con gente así es posible hacer una nueva España?"
¿Existe la posibilidad de obtener ese documento? Parece interesantísimo. Gracias
ResponderEliminarAl igual que el anterior comentarista, también yo me apunto en la lista de espera para tener acceso a ese documento.
ResponderEliminar¿Podría dedicar una entrada a la hipótesis de que "el mal puede reducirse a dolor"?
ResponderEliminarMuchas gracias.
M.L.S.E.
Hace falta escribir una historia de esa guerra como Tucídides escribió la de la que le tocó vivir
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