Guarde pare su regaloesta sentencia el autorsi el sabio no aplaude, malo...A usted le están aplaudiendo los sabios, y de lo otro que decía Moratín, también bien, así que miel sobre hojuelas.
¿No era Iriarte, quien lo decía?
Tiene usted toda la razón
I Sabía que A.S., un amigo íntimo, estaba muy enfermo. Pero no sospechaba hasta qué punto lo estaba. Por eso aquella noche en aquel hotel de...
Guarde pare su regalo
ResponderEliminaresta sentencia el autor
si el sabio no aplaude, malo...
A usted le están aplaudiendo los sabios, y de lo otro que decía Moratín, también bien, así que miel sobre hojuelas.
¿No era Iriarte, quien lo decía?
ResponderEliminarTiene usted toda la razón
Eliminar