Es dulce en la boca y amarga al oído, decía Gracián.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.
I Como con frecuencia me cuesta decir que no, me veo obligado a asumir las consecuencias de mi pusilanimidad: vivo bajo un alud de comprom...
Es dulce en la boca y amarga al oído, decía Gracián.
ResponderEliminar