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sábado, 11 de junio de 2016

Der geduldige Sokrates

Cansado de no hallar respuestas, he salido esta tarde a dar un largo paseo por la playa. En los auriculares llevaba una deliciosa ópera cómica del gran Teleman, Der geduldige Sokrates (¿la conoces, B.?). Al poco rato, oyéndole cantar sus berrinches a Jantipa, he comenzado a entender. ¡Curioso fenómeno, el de la comprensión! A veces para que te visite has de alejarte de ella. He subido el volumen y he disfrutado de la ópera y del atardecer, porque todo estaba en su sitio y todo adquiría sentido. De la playa se retiraban los últimos bañistas, que iban siendo sustituidos por los primeros pescadores. Ha comenzado a soplar una brisa refrescante y mi nieto Bruno me ha llamado por teléfono para invitarme a una barbacoa en su casa. Las estrellas lucían en el cielo y el Libro X de la República, en mi corazón.

6 comentarios:

  1. El curso y el libro platónico me provocan una envidia insana.

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    1. Véngase a Santiago, don Martín. Si no conoces la opera, te la recomiendo. Hay una buena versión en Spotify y alguna un poco triste en Youtube. Nunca sabrá la historia de la filosofía lo que le debe al mal humor de Jantipa.

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  2. Ojalá pudiera,pero la agenda no me deja. No obstante, me obligaré a mirarme morosamente el dichoso Libro X. Que empieza denostando poetas y termina contando mitos. Si no mal me equivoco.ma República empieza con un paseo y termina por otro, en otro lugar, no?

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    1. Efectivamente, don Martín. Pero la pregunta que a uno -a mi- le surge tras leer a Platón es la de si, de manera inevitable, cada régimen político no tiene sus propios poetas. Los poetas de la democracia podrían ser los novelistas. Es Magris quien dice que la novela es poiesis de la democracia. Si uno se toma esto en serio aparece una cuestión enorme: ¿Hasta qué punto la desaparición del sujeto en la novela moderna, disuelto en sus propias sensaciones y emociones es causa o efecto de la misma vida democrática.

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    2. Interesante !
      El sujeto esta descompuesto, quien lo recompondrá ?
      Quien lo re-sintetizará ?



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    3. Por ahí circula el espejo stendhaliano, que no crea ni es creado, ni naturante ni naturado. Refleja, no sabemos con qué dialectica. El espejo lo mienta Platon en relación con la voluble y tramposa mimesis (¿una mujer?, quizás se preguntara Nietzsche), en Rep. 596d.

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