Adolf Schrodter Schwedt (1805 - 1875). Don Quijote sentado en un sofá (Alte und Neue Nationalgalerie, Berlin).
Cervantes desmiente todas las beaterías que se dicen sobre los libros. Leer es una actividad peligrosa. No es un arma contra el fanatismo, ni nada de eso. De hecho, los dictadores y los poderosos en general, sean lo fanáticos que sean, siempre tienen a su lado a algún intelectual susurrándoles algo al oído. Es una actividad peligrosa para nosotros mismos. Pero necesaria para protegernos de la realidad, porque el hombre no sabe vivir en condiciones de absoluta realidad. Y así, huyendo de la realidad, nos encontramos con la muerte. Y todo lo demás es cuento.
La alucinada expresión del personaje en la ilustración la clavó Fernando Rey en su, al menos para mí, inolvidable interpretación del lector manchego. Aquella mirada de quien se pasea por el trampantojo autoengañado me pareció inmejorable.
ResponderEliminarCierto, muy cierto.
ResponderEliminarTodos los fanatismos se basan en un libro, sagrado o no. Y lo leen seriamente, puesto que actúan al dictado de las palabras escritas que toman por órdenes sobrenaturales
"Esta ocupación de los libros es tan penosa como cualquier otra, y no menos enemiga de la salud, que es lo que ha de considerarse principalmente. Y no hay que dejarse adormilar por el placer que nos procura: es ese mismo placer el que pierde al hacendoso, al avariento, al libertino y al ambicioso. Harto nos enseñan los sabios a guardarnos de la traición de nuestros apetitos y a discernir los placeres verdaderos y plenos de aquellos otros en los que se mezcla y entrevera un dolor más grande. [...] Los libros son placenteros; pero, si con su trato hemos de acabar perdiendo la alegría y la salud (lo mejor de nosotros), dejémoslos. Soy de los que piensa que su fruto no alcanza a compensar esa pérdida.[...]
ResponderEliminarPor lo que a mí respecta, solo me gustan o bien los libros agradables y fáciles, que me engatusan (1), o bien los que me dan consuelo y me aconsejan que ponga orden en mi vida y en mi muerte."
Montaigne, Libro I, cap. XXXIX
_________________________________
(1) me chatouillent en el francés original.
JAIMITO