Presentando hace pocos día el libro de Enric Prats, L'educació, una qüestió d'estat, me preguntaba dónde están los resultados de la tremenda inversión educativa de nuestro país en las últimas décadas.
Don Federico Mayor, con ese tono pontificial que le caracteriza, aseguraba cuando era secretario general de la UNESCO que "el nivel de educación de un país determina las condiciones de ese país para participar en el desarrollo mundial, beneficiarse de los avances del conocimiento y progresar él mismo mientras contribuye a la educación de los otros. Esta es una verdad autoevidente que ya nadie discute". Bueno... yo no tengo una fe ciega en las verdades autoevidentes de don Mayor, pero es evidente que sobre esto hoy sí se discute. El ejemplo es The Elusive Quest for Growth, de William Easterly.
El caso es que desde lancé esa pregunta al aire no dejo de darle vueltas. Parece obvio que nuestro sistema educativo no nos está ayudando a salir de la crisis e incluso podemos legítimamente preguntarnos si tiene alguna responsabilidad en la misma.
Sospecho que la relación entre educación y crecimiento está mediada por una variable de la máxima relevancia, que se puede expresar con esta pregunta: ¿Qué estímulos de futuro encuentra un joven en la educación que ha recibido?
Probablemente habría que volver a los principios, como su amigo Sócrates: ¿qué entendemos por "educación"? ¿Café para todos? ¿éxito=virtud? ¿Se puede ser un bárbaro políglota? ¿Qué modelo de persona tenemos?...
ResponderEliminarCreo que esa pregunta debe responderla cada uno, sin esperar a que el Estado venga a educarlo, porque la educación es una proyección de uno mismo en un futuro que te comprometes a alcanzar.
EliminarLo que en este apunte me interesa es la cuestión más estrictamente económica de lo que normalmente entendemos por educación: la relación entre inversiones educativas y retorno social de estas mismas inversiones.
qué estímulos de futuro debería encontrar los sectores de población más desfavorecidos. Y qué estímulos del pasado debería encontrar el otro sector. Pues hay una relación inversa en la rentabilidad educacional según el hogar.
Eliminar¿y no será más bien "crecemiento económico y educación" que es el lugar donde nos están instalando?...¿cuál es el discurso de la señora Merkel?..."Marktkonforme Demokratie" (democracia conforme al mercado), por tanto, también educación conforme al mercado ¡adiós a la democracia! lo que se dislumbra es que los partidos tradicionales serviles, ya no son un instrumento para cambiar las cosas.
ResponderEliminarAnna
uy!disculpas! (mejor vislumbrar que dislumbrar)
ResponderEliminarAnna