La vida vivida a conciencia es un sueño.
La acti-vidad es el acto de la vida
Era tan inválido que esperaba a la vida sentado.
Sólo un suspiro separa la vida de la muerte.
La vida que no se consume, caduca pronto.
Gracias a que la vida nos arrastra no tenemos que estar pensando constantemente a dónde vamos.
Gracias a dios el vivir tiene esta cosa perezosa, olvidadiza, acomodaticia, que nos permite ignorar que nos estamos precipitando en el tiempo.
La función de la cultura es hacernos olvidar nuestra naturaleza y la de la ley penalizar los brotes intempestivos de memoria.
Es sabido que la cultura es la agricultura de las plazas públicas.
La naturaleza, vista por el hombre, ya es cultura.
La cultura propiamente dicha es cultivo solitario del desarraigo.
Me resulta incomprensible el amor a la naturaleza. La naturaleza en su sentido más propio es la muerte viva: Mirad el festín de vida que garantiza un cadáver.
¿Tiene el caníbal ardores de conciencia?
La cultura es el mundo visto por una mirada con más esperanza que memoria.
Los símbolos son de quien los usurpa.
En aquel aprisco sin vallas, cada oveja era un rebaño.
La educación en el lugar común proporciona ventajas evidentes: nos ahorra tener que inventar soluciones a nuestra propia.
Cada vez que veo actuar a mi gata no puedo evitar pensar que la lógica es la forma de pensamiento más primitiva. ¡Qué incapaz es mi gata de ironía! La ironía es la expresión elegante de una contradicción.
La Excepción llevó a la Norma ante el tribunal del Capricho. Acusada de trivial, la Norma no pudo decir nada atinado en su defensa. Fue absuelta por ello.
La literatura y no la lógica es la que educa el sentido de la coherencia. Es el aprendizaje necesario para hallar refugio entre los hombres.
La realidad tiende a encaramarse por nuestros deseos, parasitándolos.
El amor a la naturaleza es el amor propio. Es puro egoísmo del cual yo me considero partícipe.
ResponderEliminar¡Muy buenos! Sólo cambiaría el último, quien parasita la realidad son más bien son nuestros deseos.
ResponderEliminar"Sólo un suspiro separa la vida de la muerte."
ResponderEliminarFrito me tiene ese suspiro desde hace décadas.Vivo/Muerto. ¿Qué diablos es entonces "/"?
A veces me parece que es la palabra, pero no sé qué sentido tiene decir eso, todo se viene abajo.
Ahí va un par de atrevimientos, que ahora quien no peca de aforista parece que habite en los extrarradios del ser: "El aforismo es un globo liberado de la férrea cadena de los argumentos" y "El orden es la pesadilla del azar; el azar, el sueño del orden".
ResponderEliminarSi no los suelto, reviento...
Me da a mi, don Juan, que usted no está muy predispuesto a reventar.
ResponderEliminarQueridos contertulios hiperesféricos: Perdonen ustedes que no les conteste personalmente. Ando con obras en casa. Tengo el suelo levantado y las paredes desaparecidas. He tenido que trasladarme, junto con mi mujer y mi gata, a un piso minúsculo y tengo que escribir en diagonal.
¡Obras en casa!
ResponderEliminarAunque esté lejos de mí el dudar que su formación navarra y filosófica le ha preparado para esta experiencia, sin duda la más dura de cuantas ser humano puede sufrir, me permito enviarle una modesta expresión de ánimo.
Eso es de cobardes, Don Gregorio. Los valientes se quedan en casa entre nubes de polvo, montones de runa y estruendo de taladros.
ResponderEliminarSe me ha aburguesado usted.
Claudio: Es en estos momentos de acérrimo dolor cuando de verdad se agradece el detalle solidario.
ResponderEliminarArrebatos: Lo confieso... me he aburguesado. Vivo en un apartamento de veinte metros cuadrados con mi mujer, mi gata y dos ordenadores, una mesa de jardín y dos colchones de espuma sobre el suelo. Además hace tanto frío que tengo que ponerme el abrigo bueno para estar por casa. Para salir a la calle, me lo puedo quitar.
ResponderEliminarAhora mi mujer y yo no tenemos otro remedio que hablar, lo cual no presagia nada bueno.
Se me ha muerto mi gata, viejita y enferma. Esto sí que es un hundimiento. Lo dejo dicho aquí porque sé que las pasiones felinas se entienden y se comparten.
ResponderEliminarLa Z del post anterior, mira.
Lola: Querida Lola... efectivamente, un hundimiento.
ResponderEliminar¡Puñetera Z!
"La acti-vidad es el acto de la vida"
ResponderEliminar¿Es posible que la entera filosofía de Aristóteles quepa en sólo una frase?
La vida vivida a conciencia es un sueño.
ResponderEliminar(O una pesadilla).
Abrazos.
Señor Luri, buenos días; aquí le traigo una perla del gran platónic, Antonio Machado, por si le sirve para limar asperezas dentro del cubículo:
ResponderEliminarSi usted me quisiera a mí
como yo la quiero a usted
nos llamaran a los dos
la fundación del querer.