Buscar este blog

miércoles, 20 de marzo de 2013

De miserables neuróticos a infelices banales

El psicoanálisis no hace más que confirmar aquella vieja máxima de Platón: los buenos son aquellos que se contentan con soñar lo que los otros, los malos, hacen en la realidad. Todo lo que se puede esperar de una cura psicoanalítica -y Freud lo sabía bien-, es la transformación de un miserable neurótico en un infeliz banal. 

Cuando Freud recibió la visita de uno de los psiquiatras alemanes más célebres, el Profesor Schultz, le preguntó como preámbulo a cualquier posibilidad de conversación seria: "¿Cree usted sinceramente en su capacidad para curar a un paciente?". "¡De ninguna manera!", respondió Schultz. Freud añadió: "En este caso, nos entenderemos".

Cuando la caída es fatal, el único auxilio que podemos reclamar del psicoanálisis es que nos evite suicidarnos por razones equivocadas.

Jaccard
(¿quién, si no?)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Vehemencia

 I Tras tres días sin poder separarme de Benjamin Labatut y su Maniac , pero ya he cerrado la última página. Y como suele ocurrir cuando has...